Subir un benjamín a alevín

Te comento.
No soy partidario que las decisiones de un equipo las tome el entrenador de turno. Te encuentras como dices que su entrenador actual no quiere o pone argumentos para que un jugador no se mueva de su equipo, por contra el entrenador de alevines alegara que si juega con un equipo superior mejorará y será más favorble para el niño.
Estas decisiones las debe de tomar una persona responsable y conocedoras de todos los caprichos o posibilidades de mejora dentro de la entidad.
En la situación que me comentas yo no tocaría al niño. Por un lado en el equipo que juega están cortos de plantilla, con lo cual la perdida de algún elemento perjudicaría el grupo. Luego está la aportación deportiva de tu hijo a ese equipo. Hoy está jugando todos los partidos o la mayoría de ellos, eso no dice que el deporte está muy presente en él y su formación deportiva no está teniendo ninguna perdida y aún pensando que su equipo es flojo o está por debajo de sus posibilidades, él tiene un entrenamiento más fuerte y comprometido de asimilación de todo; los partidos "más esfuerzo, más compromisos".
Si subimos al niño al equipo Alevín que consecuencias tendría para él. ¿Jugaría todos los partidos?, ¿Se sometería a la disciplina de jugar un rato como todos?, ¿Es capricho del entrenador?, ¿En qué va a mejorar?, ¿Cómo le va a afectar el cambio de grupo?, ¿Qués es más importante su evolución como deportista o los triunfos?.
Estamos en la fase más importante de la iniciación de cualquier deportista.
El niño está en la etapa de observación y aprendizaje y es capaz de aprender y de retener mucha información.
El niño debe de sentirse feliz con la actividad que desarrolla y divertirse tanto entrenando como compitiendo. Si somos capaces de hacer que el niño se implique en su propio aprendizaje, mayor número de experiencias motrices acumulara, favoreciendo una adecuada formación deportiva.
No debemos realizar enseñanzas dirigidas a movimientos técnicos o físicos específicos.
Debemos dirigir nuestras enseñanzas a un plano general y global.
El niño no esta preparado para soportar el estrés de dicha competición. No tiene las soluciones para afrontar lo que significa el éxito o el fracaso o lo que es lo mismo "perder o ganar".
El niño no está para competir, está para aprender y cuanto más posibilidades técnicas tenga a su alcance mejor respuesta dará a su problema.
Desvinculemos al niño de lo que nosotros queremos o de lo que nos gustaría que hiciera (padres, tutores, educadores, preparadores etc.) y dejemos libremente su aprendizaje deportivo.
En la etapa de Benjamín-Alevín la actividad deportiva debe de ser un complemento educativo y no un desarrollo meramente deportivo con pretensiones de algo más.
Piensa que a esa edad es el principio del todo "fútbol". Los niños si no encuentran distracción, buscarán dar soluciones a su diversión con cualquier cosa más apetecible.
En consecuencia yo como padre no movería al niño de grupo esta temporada la temporada que viene estudiraría la situación. Pros y contra.
Hasta pronto.