Perrita boxer de 6 meses
Hace 3 meses que tenemos una perrita bóxer, que actualmente tiene 6 meses.
Escogimos esta raza y el sexo para estar con niños porque nos la recomendó la veterinaria.
Al principio de tenerla en casa se portaba estupendamente. Era muy chiquitina y desde el primer momento la acostumbramos a dormir en el exterior. Evidentemente en una casita, no a la intemperie.
La verdad es que resultó muy sencillo, pues estaba acostumbrada a vivir en un campo con su madre y hermanos y únicamente estaba en contacto con personas los fines de semana, por lo que ni lloró la primera noche que pasó solita.
Mientras nosotros no estábamos en casa se pasaba el tiempo en el campo, a lo que estaba acostumbrada.
Las primeras semanas se portaba estupendamente. Cuando llegábamos por las tardes a casa jugaba con los niños (6 y 2 años), aunque yo siempre estoy con ellos para controlar que no les haga daño y que mi pequeño tampoco la pueda lastimar intentando cogerla y achucharla!
Hace un par de semanas que, no sé si debido a que está cogiendo más confianza, se está "desmadrando" un poquito.
Cuando llegamos, está tan contenta, que no deja de saltarnos encima, cosa que ha hecho siempre, pero claro, al haber crecido tanto, tira a mi niño por los suelos y le hace daño... Nos llena de barro...
Desde el primer momento hicimos lo que nos decía la veterinaria, gritarle un enérgico NO, cuando hace algo indebido y, como último recurso, darle con un periódico enrollado, pero quizás no hemos sido demasiado constantes...
Si estoy con el periódico en el exterior, lógicamente no se me acerca y mi intención es poder disfrutarla, no asustarla!
Cuando está conmigo continuamente me muerde las manos. No trata de hacerme daño, es más como diría yo, como una manera de acercarse a mi y me da su pata. A mi hijo pequeño también se lo hace, a la niña no tanto, pues al ser más mayor, si la molesta, no se queda parada a su lado sin saber que hacer.
Además, cuando nos marchamos, al abrir las barreras, aprovecha para escaparse y por mucho que la llame no viene, tengo que arreglármelas para "cazarla"...
Ahora he optado por ponerle el arnés cuando nos tenemos que marchar y dejarla atada mientras saco el coche y soltarla cuando he cerrado las barreras.
Agradecería que nos dieras unos consejos para "socializarla" y que no nos volvamos locos al entrar en casa y poder disfrutar de su compañía de una manera más tranquila.
No sé si necesitas algún dato más. La verdad es que nunca habíamos tenido un perro y probablemente hacemos cosas indebidas.
Escogimos esta raza y el sexo para estar con niños porque nos la recomendó la veterinaria.
Al principio de tenerla en casa se portaba estupendamente. Era muy chiquitina y desde el primer momento la acostumbramos a dormir en el exterior. Evidentemente en una casita, no a la intemperie.
La verdad es que resultó muy sencillo, pues estaba acostumbrada a vivir en un campo con su madre y hermanos y únicamente estaba en contacto con personas los fines de semana, por lo que ni lloró la primera noche que pasó solita.
Mientras nosotros no estábamos en casa se pasaba el tiempo en el campo, a lo que estaba acostumbrada.
Las primeras semanas se portaba estupendamente. Cuando llegábamos por las tardes a casa jugaba con los niños (6 y 2 años), aunque yo siempre estoy con ellos para controlar que no les haga daño y que mi pequeño tampoco la pueda lastimar intentando cogerla y achucharla!
Hace un par de semanas que, no sé si debido a que está cogiendo más confianza, se está "desmadrando" un poquito.
Cuando llegamos, está tan contenta, que no deja de saltarnos encima, cosa que ha hecho siempre, pero claro, al haber crecido tanto, tira a mi niño por los suelos y le hace daño... Nos llena de barro...
Desde el primer momento hicimos lo que nos decía la veterinaria, gritarle un enérgico NO, cuando hace algo indebido y, como último recurso, darle con un periódico enrollado, pero quizás no hemos sido demasiado constantes...
Si estoy con el periódico en el exterior, lógicamente no se me acerca y mi intención es poder disfrutarla, no asustarla!
Cuando está conmigo continuamente me muerde las manos. No trata de hacerme daño, es más como diría yo, como una manera de acercarse a mi y me da su pata. A mi hijo pequeño también se lo hace, a la niña no tanto, pues al ser más mayor, si la molesta, no se queda parada a su lado sin saber que hacer.
Además, cuando nos marchamos, al abrir las barreras, aprovecha para escaparse y por mucho que la llame no viene, tengo que arreglármelas para "cazarla"...
Ahora he optado por ponerle el arnés cuando nos tenemos que marchar y dejarla atada mientras saco el coche y soltarla cuando he cerrado las barreras.
Agradecería que nos dieras unos consejos para "socializarla" y que no nos volvamos locos al entrar en casa y poder disfrutar de su compañía de una manera más tranquila.
No sé si necesitas algún dato más. La verdad es que nunca habíamos tenido un perro y probablemente hacemos cosas indebidas.
Respuesta de yukio
1
Perdona la tardanza en responder, pero he estado de vacaciones precisamente disfrutando de mis perros y he desconectado de todo (literal).
Lo primero, creo que muestras una clarividencia poco habitual en un amo primerizo, y desde luego lo explicas fenomenal. En realidad, todo lo que cuentas se debe a que la perrita tiene 6 meses, ni más ni menos Son un trasto, encantadores pero agotadores.
Lo que la perrita está haciendo es integrarse en la manada, ya que está tomando conciencia de ella y busca su lugar. Y está aprendiendo con juegos, para ella todo es un juego ahora mismo; el día entero es un periodo magnífico de juego en el que quiere pasárselo fenomenal. El problema es cuando no tiene claro, o directamente no sabe, que los juegos tienen unas reglas que cumplir, y eso es lo que le tenéis que enseñar: primero, no todo es juego; segundo, no todo vale; y tercero, mandáis vosotros (incluidos los niños). Ella ha de obedecer a todo el mundo.
Ese es el contexto general. Ahora te explicaré cada una de las cosas que me dices, y es importante que todos los miembros de la familia, sin excepción, la tratéis igual:
- Lo de saltar encima cuando llegáis es muy habitual, todos los cachorros lo hacen para llamar vuestra atención y manifestar su alegría. No hay nada de malo en eso excepto esa manifestación. Para evitarlo, cuando os vaya a saltar encima adelantad la rodilla de modo que se golpee con ella, o dadle un golpecito en la nariz; que asocie el saltar con algo molesto para que no lo haga. Eso evita el salto, pero no arregla la excitación: para ello, no la hagáis caso cuando entréis en casa, no la miréis ni la habléis. Esperad a que se haya calmado y entonces sí, llamadla (nunca vayáis vosotros a ella) y la acariciáis -no os paséis- y la saludáis. Pero nunca cuando esté excitada, sólo cuando se calme. Y siempre mantened ese NO! Que acertadamente os han recomedado.
- Lo de morder las manos puede deberse a que esté cambiando la dentición, pero en ese caso lo mordería todo y no parece el caso, además de que ya debe haber terminado. De nuevo, está reclamando vuestra atención y demandando juego. La táctica, por tanto, es igual: NO!, golpecito en la nariz y ni caso hasta que se calme. Lo intentará varias veces: permaneced inmutables, ignoradla. Cuando se aburra y se vaya, dejad pasar un rato y llamadla para jugar. No juguéis a tirar de algún juguete ni a nada que implique morder, tiradle la pelota, enseñadla cosas, etc., que vea que juega pero cuando queréis vosotros.
- El escapismo en el boxer es frecuente, y ella lo toma como un juego (los cachorros juegan mucho a perseguirse). Cuando se vaya, no la persigas: es lo que ella quiere, en eso consiste "su" juego. Llámala con voz firme pero amable, y si no viene, aléjate de ella (que te vea irte). Institntivamente, te perseguirá ella a ti, y lo que tienes que hacer cuando llegue es premiarla y acariciarla hasta que responda a la llamada. Jamás la riñas cuando llegue: asociará que cuando la llamas es para reñirla y no querrá ir nunca. Para este tema se necesita mucha paciencia y que la perra esté cansada, procura que haga muchísimo ejercicio hasta que se agote (es complicadísimo agotar a un cachorro, y más de boxer, pero...).
En general, la perra no parece tener problemas de socialización. Procura que se canse mucho y que juegue lo más posible con otros perros, cuanto más diferentes en sexo, edad y raza, mejor, y que se relaciones con personas, niños, ruidos, etc. y ya estará perfectamente socializada. Y para que aprenda las reglas, simplemente prémiala cuando haga bien y ríñela cuando lo haga mal, pero eso debe hacerlo toda la familia, para que ella tenga las cosas claras: eso también la volverá una perra más tranquila. Inténtalo así y si sigues teniendo problemas, escríibeme.
Saludos, suerte ¡Y paciencia!
Lo primero, creo que muestras una clarividencia poco habitual en un amo primerizo, y desde luego lo explicas fenomenal. En realidad, todo lo que cuentas se debe a que la perrita tiene 6 meses, ni más ni menos Son un trasto, encantadores pero agotadores.
Lo que la perrita está haciendo es integrarse en la manada, ya que está tomando conciencia de ella y busca su lugar. Y está aprendiendo con juegos, para ella todo es un juego ahora mismo; el día entero es un periodo magnífico de juego en el que quiere pasárselo fenomenal. El problema es cuando no tiene claro, o directamente no sabe, que los juegos tienen unas reglas que cumplir, y eso es lo que le tenéis que enseñar: primero, no todo es juego; segundo, no todo vale; y tercero, mandáis vosotros (incluidos los niños). Ella ha de obedecer a todo el mundo.
Ese es el contexto general. Ahora te explicaré cada una de las cosas que me dices, y es importante que todos los miembros de la familia, sin excepción, la tratéis igual:
- Lo de saltar encima cuando llegáis es muy habitual, todos los cachorros lo hacen para llamar vuestra atención y manifestar su alegría. No hay nada de malo en eso excepto esa manifestación. Para evitarlo, cuando os vaya a saltar encima adelantad la rodilla de modo que se golpee con ella, o dadle un golpecito en la nariz; que asocie el saltar con algo molesto para que no lo haga. Eso evita el salto, pero no arregla la excitación: para ello, no la hagáis caso cuando entréis en casa, no la miréis ni la habléis. Esperad a que se haya calmado y entonces sí, llamadla (nunca vayáis vosotros a ella) y la acariciáis -no os paséis- y la saludáis. Pero nunca cuando esté excitada, sólo cuando se calme. Y siempre mantened ese NO! Que acertadamente os han recomedado.
- Lo de morder las manos puede deberse a que esté cambiando la dentición, pero en ese caso lo mordería todo y no parece el caso, además de que ya debe haber terminado. De nuevo, está reclamando vuestra atención y demandando juego. La táctica, por tanto, es igual: NO!, golpecito en la nariz y ni caso hasta que se calme. Lo intentará varias veces: permaneced inmutables, ignoradla. Cuando se aburra y se vaya, dejad pasar un rato y llamadla para jugar. No juguéis a tirar de algún juguete ni a nada que implique morder, tiradle la pelota, enseñadla cosas, etc., que vea que juega pero cuando queréis vosotros.
- El escapismo en el boxer es frecuente, y ella lo toma como un juego (los cachorros juegan mucho a perseguirse). Cuando se vaya, no la persigas: es lo que ella quiere, en eso consiste "su" juego. Llámala con voz firme pero amable, y si no viene, aléjate de ella (que te vea irte). Institntivamente, te perseguirá ella a ti, y lo que tienes que hacer cuando llegue es premiarla y acariciarla hasta que responda a la llamada. Jamás la riñas cuando llegue: asociará que cuando la llamas es para reñirla y no querrá ir nunca. Para este tema se necesita mucha paciencia y que la perra esté cansada, procura que haga muchísimo ejercicio hasta que se agote (es complicadísimo agotar a un cachorro, y más de boxer, pero...).
En general, la perra no parece tener problemas de socialización. Procura que se canse mucho y que juegue lo más posible con otros perros, cuanto más diferentes en sexo, edad y raza, mejor, y que se relaciones con personas, niños, ruidos, etc. y ya estará perfectamente socializada. Y para que aprenda las reglas, simplemente prémiala cuando haga bien y ríñela cuando lo haga mal, pero eso debe hacerlo toda la familia, para que ella tenga las cosas claras: eso también la volverá una perra más tranquila. Inténtalo así y si sigues teniendo problemas, escríibeme.
Saludos, suerte ¡Y paciencia!
