Beso excitante

El beso como cualquier otro aspecto de la relación humana es personal e intransferible, incluso, si Vd. este es su primer novio y rompen la relación, al siguiente o sucesivos, no les besará igual.
Esas sensaciones, de besos "especiales", son más, una imaginación del cine, que una realidad, es más un beso puede ser tan falso como el de Judas y se percibe, no será la primera mujer que descubre una infidelidad, por el beso que recibe al reencontrarse con su pareja.
- ¿Cómo besar?. No es solo una cuestión técnica, es una cuestión de amor y de pasión, es la expresión de un sentimiento hacia el otro, de entrega y de recepción, reducirlo a una técnica, resulta frío y desapasionado, pero también requiere intimidad, pese a muchos practicantes exhibicionistas, que pretenden sorprender al transeúnte, espectador inocente, de sus practicas exhibicionistas.
-El beso comprende todo tipo de rozamientos o succiones en que los labios para que cumplan una función de acariciar. Para la boca no hay sectores vedados o prohibidos, y el aspirante a gozador debe saber usarla. El beso, boca a boca, tiene sus secretos que, bien conocidos permiten ir graduando la estimulación.
Obviamente para darlo hay que entregar los labios y una vez acogidos se ha de iniciar un recorrido matizado con exploraciones a cargo de la lengua. Ésta debe introducirse en la boca ajena, establecerse allí, ir de un lado para otro, salir de tanto en tanto, ojalá con la lengua ajena pegada a la propia que, por su parte ha de atraerse a la cavidad bucal del practicante donde, deberá retenerse.
Los grandes besadores conocen la manera de hacer durar un beso.
El buen beso es infatigable y nunca estático. Los labios palpan, la lengua, como anciana chismosa, se mete en todas partes. La saliva ayuda a humedecer. No es cuestión de tiempo sino de gusto. Separando los labios con suavidad, las lenguas quedan solas batiéndose como espadachines.
De ahí, conviene comenzar un recorrido entusiasta por la geografía del vecino, con las mismas técnicas y sin limitaciones. Todo es besable, todo es chupable, todo es lamible, todo es mordisqueable. Si el acariciado ha eliminado sus temores, él mismo pondrá frente a la boca las zonas que quiere sentir estimuladas.
Finalmente recuerde que el beso, se puede dar y recibir, allí donde se desee, con pasión entrega y amor para estimular y preparar otras practicas sexuales más intimas, aún.
¡Ah!, no piense que a los hombres les excitan determinados besos, son lo mismos que le excitarían a Vd., así pues, ¡La imaginación, al poder!.