Denunciar a una veterinaria por negligencia
Hace un año y medio llevé a mi pequeña gata europea, que entonces tenía 9 meses a esterilizar, la operación salió bien, o al menos eso pensamos.
A partir de entonces la gata tuvo un cambio de actitud radical, pasó de ser una gata alegre y juguetona a esconderse de todo, desarrolló problemas intestinales y estreñimiento, hasta el extremo de que llegó a salírsele parte del intestino por el ano.
La llevamos a la misma veterinaria y esta trató de volver a meterle el intestino hacia adentro con hielo pero no funcionó, por lo que tuvo que abrirla y cosérselo. El problema es que al poco tiempo se le volvió a salir.
Cansada, decidí cambiar de veterinaria y gracias a eso pudimos meterle el trocito de intestino sin tener que volver a operarla.
El caso es que al tiempo la gata empezó a perder peso, y la llevé a mi nueva veterinaria, quien le dio tratamiento, pero la gata seguía adelgazando hasta que llegó un punto que no llegaba a los 2 kilos.
Le hicieron un análisis y una ecografía y aunque en el primero estaba todo bien, en la eco se veía una mancha oscura cerca de la cicatriz de esterilización. La veterinaria dijo que quizá había cicatrizado un trocito de intestino al lado de la cicatriz, así que dijo que la operaría para quitarlo.
El problema es que cuando abrió no estaba un trocito de intestino pegado, sino 15 cm de intestino que se habían enrollado de algún modo a la hora de coser tras la operación. La veterinaria tuvo que extirpale todo ese cacho y el intestino de un gato mide 30 cm, es como si a mi me sacasen 3 metros y medio de intestino.
A causa de esto y de la debilidad que tenía mi gata murió, y ahora quiero saber qué acciones legales puedo tomar contra la primera veterinaria por haberla cosido mal, ya que por culpa de una operación tan sencilla como es una esterilización ahora mi gata ya no está aquí. Y además de que cuando la abrió por segunda vez debería haber visto el problema ¿no?
A partir de entonces la gata tuvo un cambio de actitud radical, pasó de ser una gata alegre y juguetona a esconderse de todo, desarrolló problemas intestinales y estreñimiento, hasta el extremo de que llegó a salírsele parte del intestino por el ano.
La llevamos a la misma veterinaria y esta trató de volver a meterle el intestino hacia adentro con hielo pero no funcionó, por lo que tuvo que abrirla y cosérselo. El problema es que al poco tiempo se le volvió a salir.
Cansada, decidí cambiar de veterinaria y gracias a eso pudimos meterle el trocito de intestino sin tener que volver a operarla.
El caso es que al tiempo la gata empezó a perder peso, y la llevé a mi nueva veterinaria, quien le dio tratamiento, pero la gata seguía adelgazando hasta que llegó un punto que no llegaba a los 2 kilos.
Le hicieron un análisis y una ecografía y aunque en el primero estaba todo bien, en la eco se veía una mancha oscura cerca de la cicatriz de esterilización. La veterinaria dijo que quizá había cicatrizado un trocito de intestino al lado de la cicatriz, así que dijo que la operaría para quitarlo.
El problema es que cuando abrió no estaba un trocito de intestino pegado, sino 15 cm de intestino que se habían enrollado de algún modo a la hora de coser tras la operación. La veterinaria tuvo que extirpale todo ese cacho y el intestino de un gato mide 30 cm, es como si a mi me sacasen 3 metros y medio de intestino.
A causa de esto y de la debilidad que tenía mi gata murió, y ahora quiero saber qué acciones legales puedo tomar contra la primera veterinaria por haberla cosido mal, ya que por culpa de una operación tan sencilla como es una esterilización ahora mi gata ya no está aquí. Y además de que cuando la abrió por segunda vez debería haber visto el problema ¿no?
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