¿Por qué se me pasa por la cabeza la idea de suicidio tras sentirme triste por alguna decepción?

Hola,
me gustaría plantearle una duda. Me considero una persona sana y coherente. Es por ello por lo que me sorprende que cuando estoy triste, o paso por algún momento de ánimo más bajo, o ruptura sentimental, o simplemente algún momento un tanto más débil como supongo tenemos todos... ¿por qué me pasa por la cabeza la idea del suicidio? Sé que no me voy a suicidar ni lo intentaría... Pero esa idea no sé, me viene sin llamarla a la cabeza, incluso pienso por una milésima de segundo a quién importaría yo o quién lloraría por mí... No sé algo extraño.
Consultando algún libro y artículo, he visto que puede tratarse de una especie de "prueba" que me pone mi mente, algo así como una mala pasada que basta que yo quiera ahuyentar o que deje de existir, para que aparezca más aprovechando un momento de debilidad mental.
¿Por qué ocurre esto? ¿TieNe qué ver con esa sensación que también he leído de que algunas madres se les pasa por la cabeza arrojar al bebe pero que por supuesto serían incapaces? ¿Son trampas que nos ponemos nosotros mismos? Estoy empezando a tener miedo de esos pensamientos!
Muchas gracias de antemano y un saludo

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Lo que planteas es algo más común de lo que te imaginas. A todos nosotros se nos ha venido a la cabeza pensamientos extraños o extremos ( y no digamos si hablamos de los sueños). Lo que te tiene que quedar claro es que son solo PENSAMIENTOS y que se pueden tener. Lo que te pasa es que son tan extremos que tienes miedo a pensar así, pero si das "dos pasos para atrás" y te observas a ti mismo, te darás cuenta que eres más que esos pensamientos. Los pensamientos son pensamientos, las sentimientos son sentimientos y las valoraciones son valoraciones, tu estás por encima de esas "actividades" humanas. No tienes por qué controlar esos pensamientos, simplemente obsérvalos y ya está y con el tiempo estarán ahí como el que lleva unas gafas. Una cosa son los pensamientos y otra las actuaciones, lo que haces es lo que deja huella y no lo que piensas, así que ni siquiera te voy a decir que no tengas esos pensamientos ni que intentes controlar no tenerlos, porque no tienen la mayor importancia. Cuando lo enfoques así, será cuestión de tiempo el que se vayan disipando. Lo que si es importante es que para liberarse de estas "comeduras de cabeza", lo que NO hay que hacer es intentar controlarlas o evitarlas porque se engrandecen, simplemente observalas, se empequeñecerán solas y terminarás olvidando el tema.

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