Clave de seguridad

Si es un niño pequeño, la mejor opción para controlar el acceso a Internet, es crear un usuario en Inicio-Panel de Control-Cuentas de usuarios y poner contraseña al usuario que exista. De esta forma si usted, como padre es el que entra, siempre debe encenderlo y poner la contraseña, de forma que nunca usará el ordenador sin que usted lo sepa. También puede indicar la contraseña a su madre.
Para mayor control, o para dejarle usar el ordenador, pero limitarle el uso de internet, ponerle una hora para que lo utilice, etc, existen aplicaciones como Internet Access Controller 2007, que controla y restringe el acceso a Internet de todos los usuarios de un ordenador.
http://internet-access-controller.softonic.com
Lo primero que debemos hacer es establecer una contraseña para el administrador de la conexión a Internet. A partir de ahí comenzaremos eligiendo la mejor manera de poner límites a los usuarios. En este aspecto el programa es realmente versátil.
Se puede establecer una cuota de tiempo por cada usuario, de tal manera que cuando se agote no haya acceso a la Red. También podemos fijar unas horas y días determinados para cada usuario en los que la conexión a Internet esté activa. La tercera opción consiste en poner en marcha una cuenta atrás. Cuando el reloj llegue a cero se pierde la conexión.
También podemos bloquear el uso de determinados programas, acceso a páginas y servicios. El sistema no tiene complicación: una lista blanca y otra negra.
Para comprobar la eficacia de estas medidas podremos consultar el archivo LOG, aquí queda registrado todo; desde los intentos de acceso de cada usuario hasta qué páginas ha consultado. Internet Access Controller 2007 controla y restringe el acceso a Internet de todos los usuarios de un ordenador.
Lo primero que debemos hacer es establecer una contraseña para el administrador de la conexión a Internet. A partir de ahí comenzaremos eligiendo la mejor manera de poner límites a los usuarios. En este aspecto el programa es realmente versátil.
Se puede establecer una cuota de tiempo por cada usuario, de tal manera que cuando se agote no haya acceso a la Red. También podemos fijar unas horas y días determinados para cada usuario en los que la conexión a Internet esté activa. La tercera opción consiste en poner en marcha una cuenta atrás. Cuando el reloj llegue a cero se pierde la conexión.
También podemos bloquear el uso de determinados programas, acceso a páginas y servicios. El sistema no tiene complicación: una lista blanca y otra negra.
Para comprobar la eficacia de estas medidas podremos consultar el archivo LOG, aquí queda registrado todo; desde los intentos de acceso de cada usuario hasta qué páginas ha consultado.
Existen otras fórmulas, pero puede ir probando estas opciones.