El rendimiento de tu equipo actual, al margen de que se le haya hecho un correcto mantenimiento, estará relacionado con su antigüedad. Los equipos actuales son mucho más eficientes en su consumo, por lo que si tu equipo tiene más de diez años, es conveniente sustituirlo.
Si es posible, que los instaladores consideren la posibilidad de reutilizar la instalación. Y en cuanto a la elección, es importante que el equipo tenga una calificación energética A y que la tecnología del compresor sea inverter. Pide tres presupuestos que incluyan tanto marcas más conocidas como marcas de gama media.
Y luego, es importante que te hagan un estudio específico de las necesidades de tu vivienda. Cuestiones pasivas como la orientación, el nivel de radiación solar de las estancias, la calidad del aislamiento o la ventilación son tan importantes como la potencia y prestaciones de los equipos. Por eso, consulta a instaladores profesionales.
Que hagas una buena elección.