Desamor y maltrato psicológico ¿?
Buenos días.
Hace un par de meses inicie una relación de pareja. Teníamos muchos aspectos compatibles, en cuanto a objetivos, gustos, etc. Era una persona pasional y romántica que siempre deseaba estar a mi lado y me llenaba de regalos y atenciones. Si bien tanta atención me pareció excesiva y me extraño su apego rápido, pensé, o quizá más bien desee, que aquello fuera signo de "amor a primera vista" ( cosa en la que no he creído nunca) y no un signo de una anomalía emocional. Sin embargo, pronto empezaron a darse situaciones que me molestaban o generaban cierto estrés. Así por ejemplo, tenía la sensación de que debía de pedirle permiso o advertirle con anterioridad de mis planes para el fin de semana, y si bien intentaba incluirle en todos ellos, había compromisos ineludibles en los que me era imposible tenerlo en consideración. Cuando cumplía con mis compromisos, aún cuando me advertía que no había ningún problema y que lo comprendía, una vez volvía a quedar con él, se producía una situación de tensión en el que había insinuaciones, indirectas etc, que reprendía mi comportamiento o que exigían una mayor atención por su parte. De manera puntual, asimismo, se metía con mi ciudad, o mediante generalizaciones con mi forma de vida, gustos, etc ( advierto que no era una constante). Siempre que iniciábamos una discusión al respecto, se amparaba en un mayor conocimiento de las situaciones por su amplia experiencia en la vida ( hecho que hacía que me jactase cuando el grado de tensión era excesiva porque no conocía mi vida y además yo tengo más años que él). Cuando ya no tenía argumentos, que por lo general, tampoco solía dar muchos, sólo parecía esperar a simplemente exasperarme, entonces la situación volvía a la normalidad, regresaba a ser la persona encantadora y a llenarme de atenciones. En dos o tres ocasiones se ha emborrachado, lo que ha llevado a generar tensión porque contaba cosas sobre pasado muy desagradables . No dejaba que se le compadeciera o se mostrara cariño, rehuyendo cualquier muestra de aprecio que le pudiera dar. Después pasaba a tratarme de manera despótica y, en dos ocasiones llegó a riduculizarme.Si le reprobaba su conducta se sentía ofendido y dolido. Claro está eso me llevaba a discutir con él hasta que se ponía a llorar y hacía que volviera a perdonarle ( sin embargo nunca pedía disculpas respecto a su actitud). Cuando se molestaba con algo, o se sentía frustrado, amenazaba con irse a su ciudad ( él es de otro lugar), abandonarme, o decirme que era una niñata. Todo ello condujo que tras una última discusión ( no voy a extenderme en pormenores aquí) la relación se rompiera. Tras la ruptura, él no parece haberlo aceptado y me manda continuos sms o realiza llamadas ( en su mayor parte son de carácter ADULADOR - NUNCA AMENAZANTE- O BIEN CULPABILIZADOR). Me repite continuamente que dado su pasado siempre ha desconfiado de las personas y que tenia miedo de abrirse a mi, pero promete ( como siempre) que va a cambiar y que me hará feliz.
Él está solo aquí, por lo que no sé si esta avalancha de sms y llamadas es simplemente un resultado de su aislamiento, de que no tiene a nadie, lo que hace que ses sienta desamparado y yo sea su único apoyo o bien es un intento soterrado de hacerme sentir culpable para que vuelva con él. ¿Me está manipulando psicológicamente o es simplemente un "acoso" producto de su soledad y desamor?
Hace un par de meses inicie una relación de pareja. Teníamos muchos aspectos compatibles, en cuanto a objetivos, gustos, etc. Era una persona pasional y romántica que siempre deseaba estar a mi lado y me llenaba de regalos y atenciones. Si bien tanta atención me pareció excesiva y me extraño su apego rápido, pensé, o quizá más bien desee, que aquello fuera signo de "amor a primera vista" ( cosa en la que no he creído nunca) y no un signo de una anomalía emocional. Sin embargo, pronto empezaron a darse situaciones que me molestaban o generaban cierto estrés. Así por ejemplo, tenía la sensación de que debía de pedirle permiso o advertirle con anterioridad de mis planes para el fin de semana, y si bien intentaba incluirle en todos ellos, había compromisos ineludibles en los que me era imposible tenerlo en consideración. Cuando cumplía con mis compromisos, aún cuando me advertía que no había ningún problema y que lo comprendía, una vez volvía a quedar con él, se producía una situación de tensión en el que había insinuaciones, indirectas etc, que reprendía mi comportamiento o que exigían una mayor atención por su parte. De manera puntual, asimismo, se metía con mi ciudad, o mediante generalizaciones con mi forma de vida, gustos, etc ( advierto que no era una constante). Siempre que iniciábamos una discusión al respecto, se amparaba en un mayor conocimiento de las situaciones por su amplia experiencia en la vida ( hecho que hacía que me jactase cuando el grado de tensión era excesiva porque no conocía mi vida y además yo tengo más años que él). Cuando ya no tenía argumentos, que por lo general, tampoco solía dar muchos, sólo parecía esperar a simplemente exasperarme, entonces la situación volvía a la normalidad, regresaba a ser la persona encantadora y a llenarme de atenciones. En dos o tres ocasiones se ha emborrachado, lo que ha llevado a generar tensión porque contaba cosas sobre pasado muy desagradables . No dejaba que se le compadeciera o se mostrara cariño, rehuyendo cualquier muestra de aprecio que le pudiera dar. Después pasaba a tratarme de manera despótica y, en dos ocasiones llegó a riduculizarme.Si le reprobaba su conducta se sentía ofendido y dolido. Claro está eso me llevaba a discutir con él hasta que se ponía a llorar y hacía que volviera a perdonarle ( sin embargo nunca pedía disculpas respecto a su actitud). Cuando se molestaba con algo, o se sentía frustrado, amenazaba con irse a su ciudad ( él es de otro lugar), abandonarme, o decirme que era una niñata. Todo ello condujo que tras una última discusión ( no voy a extenderme en pormenores aquí) la relación se rompiera. Tras la ruptura, él no parece haberlo aceptado y me manda continuos sms o realiza llamadas ( en su mayor parte son de carácter ADULADOR - NUNCA AMENAZANTE- O BIEN CULPABILIZADOR). Me repite continuamente que dado su pasado siempre ha desconfiado de las personas y que tenia miedo de abrirse a mi, pero promete ( como siempre) que va a cambiar y que me hará feliz.
Él está solo aquí, por lo que no sé si esta avalancha de sms y llamadas es simplemente un resultado de su aislamiento, de que no tiene a nadie, lo que hace que ses sienta desamparado y yo sea su único apoyo o bien es un intento soterrado de hacerme sentir culpable para que vuelva con él. ¿Me está manipulando psicológicamente o es simplemente un "acoso" producto de su soledad y desamor?
Respuesta de virgi2
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Lo que si está claro, dado el comportamiento de él descrito por ti, es que hay existencia de alguna patología escondida a punto de explotar.
No sé si será provocado como consecuencia de una anterior relación mal acabada o por algo más lejano producido en su familia, ya sea por parte de la madre o por parte del padre. Pero la desconfianza, la baja-autoestima y la pincelada de personalidad bipolar que tu describes, es bastante clara, es como si el pretendiera actuar como el hombre que le gustaría ser, pero lógicamente, ha dejado salir al exterior su personalidad real de forma inevitable, ya que no se puede, dentro del mundo de las emociones, esconderlas de forma eterna, son incontrolables y más si se tiene algún problema sico-social o emocional, como en el caso que tú describes.
Si fuera él, el que me pidiera el consejo, de seguro que le mandaría a visitar a un especialista en éstos temas, para ayudarlo a través de terapia y spicoanálisis y fijar un comportamiento dentro de las líneas normales sociales, si se pudiera, pero dado, que el consejo debo dártelo a ti, creo firmemente, que debes de guardar la distancia durante un tiempo prudencial, hasta que el asuma que vuestra corta relación ha terminado, ya que, no creo que sea beneficioso que te compliques la vida en una relación que pudo ser algo y no fue, ya que, por tu escrito, no hay un sentimiento fuerte,(al menos, por tu parte), como para arriesgarte a canalizar unos problemas de personalidad de otra persona, problemas que no eres culpable de que existan ni provocadora de ello.
Lo que me sorprende a su vez, que, en tan corto tiempo éste chico creó una gran dependencia de ti, lo que me motiva a pensar en un sentido impropio de posesión que al corto plazo se convertiría en celos y posteriormente evolucionaría muy en contra tuya de manera agresiva, ya sea spicológicamente (cosa que empezó a cometer con chantajes emocionales), e inclusive y a la larga cuando ya tenga dominada tu estatus emocional física, no sé hasta que punto te puede merecer la pena asumir dicho riesgo.
Lo que sí es definitivo y única es la decisión que tomes, si tomaras la de darle una segunda oportunidad, desde luego debes de apoyarlo e incitarlo, como ya he dicho anteriormente, a buscar un asesor profesional dado su comportamiento y reacciones, reacciones que tú has visionado e intuitivamente has catalogado como no normales, de la misma manera que yo, sin conocerlo he pensado lo mismo dado tu escrito.
No sé si será provocado como consecuencia de una anterior relación mal acabada o por algo más lejano producido en su familia, ya sea por parte de la madre o por parte del padre. Pero la desconfianza, la baja-autoestima y la pincelada de personalidad bipolar que tu describes, es bastante clara, es como si el pretendiera actuar como el hombre que le gustaría ser, pero lógicamente, ha dejado salir al exterior su personalidad real de forma inevitable, ya que no se puede, dentro del mundo de las emociones, esconderlas de forma eterna, son incontrolables y más si se tiene algún problema sico-social o emocional, como en el caso que tú describes.
Si fuera él, el que me pidiera el consejo, de seguro que le mandaría a visitar a un especialista en éstos temas, para ayudarlo a través de terapia y spicoanálisis y fijar un comportamiento dentro de las líneas normales sociales, si se pudiera, pero dado, que el consejo debo dártelo a ti, creo firmemente, que debes de guardar la distancia durante un tiempo prudencial, hasta que el asuma que vuestra corta relación ha terminado, ya que, no creo que sea beneficioso que te compliques la vida en una relación que pudo ser algo y no fue, ya que, por tu escrito, no hay un sentimiento fuerte,(al menos, por tu parte), como para arriesgarte a canalizar unos problemas de personalidad de otra persona, problemas que no eres culpable de que existan ni provocadora de ello.
Lo que me sorprende a su vez, que, en tan corto tiempo éste chico creó una gran dependencia de ti, lo que me motiva a pensar en un sentido impropio de posesión que al corto plazo se convertiría en celos y posteriormente evolucionaría muy en contra tuya de manera agresiva, ya sea spicológicamente (cosa que empezó a cometer con chantajes emocionales), e inclusive y a la larga cuando ya tenga dominada tu estatus emocional física, no sé hasta que punto te puede merecer la pena asumir dicho riesgo.
Lo que sí es definitivo y única es la decisión que tomes, si tomaras la de darle una segunda oportunidad, desde luego debes de apoyarlo e incitarlo, como ya he dicho anteriormente, a buscar un asesor profesional dado su comportamiento y reacciones, reacciones que tú has visionado e intuitivamente has catalogado como no normales, de la misma manera que yo, sin conocerlo he pensado lo mismo dado tu escrito.
