Primero identifiquemos la zona donde se encuentra el clítoris. Checa bien y tendrás que usar un poco la imaginación. La vulva es la parte externa donde se encuentran dos tipos de labios que protegen los miembros genitales de las chicas. La vagina y el clítoris se encuentran en esta zona, dentro del área que se ve envuelta por los labios que te menciono. La vulva, pues, es la parte donde se guardan estos elementos. Si olo visualizaras desde fuera, tienen la forma de un "ojo" donde al abrir los labios te darás cuenta que existen dos pequeños orificios (uno más grande que el otro) y un pequeño cúmulo de carne (que es la zona del clítoris). El orificio que se encuentran cerca del ano es la parte externa de la vagina. De lado contrario, en la parte frontal de la vulva esta el clítoris. Con forme se estimule a una chica (y en especial esta área), el clítoris ira aumentando su tamaño ya que esta conformado de gran cantidad de vasos sanguíneos (algo similar a lo que pasa con el pene). La estimulación puede llegar de varias formas a hacer que este miembro cambie de forma. Regularmente las primeras caricias y los juegos iniciales encienden los motores para que se comience a generar un cambio. Una buena fórmula de hacer sexo oral es estimular con la lengua y con los labios el clítoris. Chupando o lamiéndolo se logra que tu pareja suba a niveles muy altos de escitaciópn, ya que esta parte provoca que la mecánico corporal de las chicas se ponga al máximo. Te recomiendo que inicies con un masaje suave al clítoris de tu pareja con la yema de tus dedos, esto prepara la zona para un ataque más fuerte. Tienes que tener cuidado ya que es una zona extremadamente sensible. Si eres cuidadoso, te asuguro que tu chica te querrá más que nunca. UNa vez que identifiques cada área, lo importante para realizar un buen trabajo sexual es saber los puntos donde tu chica es más sensible. Cada chica es diferente por lo que no existe una técnica única, más bien tienes que explorar e ir checando las reacciones de tu pareja. Usando la lengua, "lame" toda la vulva y la parte exterior de la vagina (el orificio por donde introduces el pene) y mueve con rapidez tu lengua para que esta se mantenga húmeda. El sitio de mayor sensibilidad siempre sueles ser el clítoris así que con la lengua acaricia, lame, succiona este elemento, con forme lo hagas notaras que tu chica experimenta sensaciones diferentes y que te las expresa de diversas formas. Cada vez que tu hagas un movimiento ella te lo mostrara de forma sensual a través de sonido agradables que significan que las cosas van por buen camino. Conforme más ataques la zona frontal de la vulva mayor será también la humedad del resto de la vagina y de la vulva. Mientras estás lamiendo te darás cuenta de las reacciones que te inducen a seguir haciendo lo que haces. Una vez que encuentres los puntos más sensibles, lo importante es combinarlos, es decir... succciona en uno, lame en otro, mueve la lengua en otro y así sucesivamente intentando cambiar las sensaciones para cada lugar y provocando aun más sensaciones de placer en tu pareja. La forma visual para saber si los límites de excitación se han incrementado es el tamaño del clítoris, notarás que su tamaño es mayor y su color es más rojizo. Otra forma es que, aparte de tu saliva, la vulva y la vagina están más húmedas lo que te facilitará la penetración y claro.. los pezones de tu pareja estarán ergidos y los senos en general duros. Recuerda, con cuidado y lo que no debes de ocupar son los dientes. No muerdas con ellos por que puedes causar mucho dolor en tu pareja. Aunque tu no te des cuenta, los dientes tienen filo suficiente para lastimar a partes tan sensibles como estás. Asínque los dientes están prohibidos. ¿Ok? Bueno, espero que esto te de una idea de lo que tienes que hacer. Recuerda que lo más importante es la imaginación y todo lo que se te ocurra está bien. Finalmente, recuerda que la vulva esta muy sensible al tacto pero también las zonas al rededor de ella. La parte interna de las piernas cerca de la vulva, el ano, las nalgas, el vientre y el coxis tienen zonas igualmente sensibles; los senos y la parte trasera del cuyo así como la espalda no está por demás, así que recorrerlas con tu lengua no es mala idea. No hay nada mejor que una lengua curiosa para ellas. Cuídate y disfruta Nacho Parra