Miedo a las tormentas

La mayoría de las fobias tienen su origen, o bien en algo aprendido: nuestros padres o hermanos también la tenían y transmiten sus miedos, o bien son fruto de algún episodio desagradable ocurrido en nuestra infancia. Para superarlo es importante conocer cuál fue el origen de la fobia. ¿Lo recuerdas?

Ante todo gracias por contestarme, nadie de mi familia ha tenido un miedo semejante al mio a nada, el psicólogo que me trató me dijo que podía ser miedo a los cambios bruscos de vida, la verdad es que mi vida ha ido cambiando bruscamente en los últimos años, pero estos cambios han venido después de que empezara mi miedo. La primera vez que yo recuerdo que sintiera algo parecido fue viajando en el coche por la noche en medio de una tormenta muy fuerte, recuerdo que me sobrecogió el cambio de iluminación en medio del campo, era como pasar del día a la noche en un segundo, eso me petrificó, pero si hay otra causa no lo recuerdo.
En los últimos años me ha pasado de todo, eso no me ha ayudado mucho. En 2002 me fui a vivir con mi novio, en 2003 me casé y me quedé embarazada nada más casarme, en 2004 tuve a mi hijo, en 2005 murió mi marido de un cáncer en dos meses, en 2007 creyeron que mi hijo era diabético y estuvo ingresado en un hospital hasta que vieron que no lo era, en 2008 mi sobrino de 10 años tuvo un tumor cerebral del que está afortunadamente recuperado y este año a mi hijo le han operado de apendicitis a causa de una adenitis mesentérica. Como puedes leer mi vida no ha parado de cambiar bruscamente. Demasiadas tensiones, demasiados nervios. Mi marido me ayudó mucho en relación a las tormentas, salía conmigo al patio e intentaba que me relajará, eso empezaba a funcionar, sólo con oír su voz yo conseguía relajarme, no paraba de hablar para que yo me sintiera cómoda, pero mi marido ya no está y su pérdida ha hecho que mi miedo vaya de mal en peor.
Disculpa el discurso, pero supongo que es bueno que sepas todo esto, gracias por ayudarme o al menos por contestarme, eso ya es mucho para mí. Siempre agradecida.

Lo que te ha ocurrido es que has relacionado la fobia a las tormentas con la desaparición de tu marido.
Tú misma lo has dicho, ha desaparecido y ha vuelto tu fobia a las tormentas. Es como que él te hacía sentir segura y ahora que no está ya no lo estás.
Aunque ya hace tiempo de su fallecimiento, es lógico que aún esté presente.
Debes dedicarte más a ti, hacer cosas que te gusten: ir a un gimnasio, nadar, pintar... algo que sea tuyo solamente. Has sufrido mucho tiempo y tienes que disfrutar más de la vida.
Te deseo mucha suerte y ya verás que todo va a ir mejor.