Terrible dilema tras la muerte de mi suegro
Hola:
Tengo 47 años, estoy casada y tengo dos hijos de 16 y 12 años. Mi matrimonio va a trancas y barrancas, ya que hemos pasado muchos problemas: hace 7 años murió mi padre (lo que no llevé muy bien), hace 4 nos quedamos los dos sin trabajo, ahora tenemos una empresa que va bastante regular, y desde hace un año y medio la enfermedad de mi suegro, que falleció hace dos semanas, nos ha tenido en un sin vivir.
Pero el problema que tengo, es el siguiente: mi suegra quiere, por encima de todo, venirse a vivir con nosotros (no tiene más hijos). No está enferma ni nada, ni siquiera está llorando a mi suegro (con el que no se llevaba demasiado bien). Mi marido no quiere que esto pase pero el chantaje emocional que ella le hace es muy fuerte y puede con él. La verdad, está destrozado.
Yo no quiero de ninguna de las maneras que ella venga. Tengo ganas de levantar cabeza, de empezar de nuevo a vivir y no soy capaz de asumir que ella esté en medio. No me parece justo. Estoy muy angustiada, ya que a mi marido le destroza mi negativa, con lo que casi no podemos ni hablar... Tampoco me atrevo a hablar con ella, ya que estoy segura de que luego se lo diría a él. Y ya tenemos bastante lío.
De verdad, no soy mala persona, si estuviera enferma sé que la tendría que cuidar, pero ahora mismo no hay derecho, tiene dinero, fortaleza para ir a trabajar sus tierras (su hobbie), aficiones y amistades. ¡Yo soy la que tengo una vida que arreglar con mi marido y mis hijos!
¿Me puede ayudar? ¿Cómo soluciono esto?
Gracias por leerme
Teresa
Tengo 47 años, estoy casada y tengo dos hijos de 16 y 12 años. Mi matrimonio va a trancas y barrancas, ya que hemos pasado muchos problemas: hace 7 años murió mi padre (lo que no llevé muy bien), hace 4 nos quedamos los dos sin trabajo, ahora tenemos una empresa que va bastante regular, y desde hace un año y medio la enfermedad de mi suegro, que falleció hace dos semanas, nos ha tenido en un sin vivir.
Pero el problema que tengo, es el siguiente: mi suegra quiere, por encima de todo, venirse a vivir con nosotros (no tiene más hijos). No está enferma ni nada, ni siquiera está llorando a mi suegro (con el que no se llevaba demasiado bien). Mi marido no quiere que esto pase pero el chantaje emocional que ella le hace es muy fuerte y puede con él. La verdad, está destrozado.
Yo no quiero de ninguna de las maneras que ella venga. Tengo ganas de levantar cabeza, de empezar de nuevo a vivir y no soy capaz de asumir que ella esté en medio. No me parece justo. Estoy muy angustiada, ya que a mi marido le destroza mi negativa, con lo que casi no podemos ni hablar... Tampoco me atrevo a hablar con ella, ya que estoy segura de que luego se lo diría a él. Y ya tenemos bastante lío.
De verdad, no soy mala persona, si estuviera enferma sé que la tendría que cuidar, pero ahora mismo no hay derecho, tiene dinero, fortaleza para ir a trabajar sus tierras (su hobbie), aficiones y amistades. ¡Yo soy la que tengo una vida que arreglar con mi marido y mis hijos!
¿Me puede ayudar? ¿Cómo soluciono esto?
Gracias por leerme
Teresa
Respuesta de eloisa callejon fernandez
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La verdad que si estás en un problema, porque tu suegra está en pleno duelo.
Pero es verdad que tu con tus problemas ya tienes bastante y ella es autosifuciente.
Una solución intermedia sería que estos primeros días o este primer mes, la vayáis a visitar los fines de semana, o los domingos que generalmente es el día de peor bajón.
Que vaya toda la familia, con tus hijos también, aunque es difícil arrancar a los jóvenes, que hagan ese sacrificio por un tiempo.
Y que durante la semana vaya tu marido una o dos veces a comer o cenar con ella.
Y tu tienes que proponerle esa solución a tu esposo y explicarle que no es mala voluntad de tu parte, pero es que no puedes psicológicamente, dile la verdad, que quieres arreglar vuestros problemas y que necesitas estar sola con él y los niños.
Tu marido está destrozado porque la madre lo presiona, pero la verdad es que es ley de vida quedarse sola cuando una es vuida, y si además no está enferma... es que solo necista un poco de contención.
Habla nuevamente con tu esposo, pero sin llegar a discutir, exprésale lo que sientes a ver que pasa.
Yo también creo que si no te llevas del todo bien con ella, no es bueno que vaya a tu casa.
Pero si tu marido se empeña, y en tu casa hay sitio, tendrán que pactar una solución intermedia, por ejemplo que vaya durante un mes, mientras que este en su peor momento de duelo.
Porque lo que no puedes permitir es que tu situación matrimonial empeore por esto, y tampoco le puedes prohibir a él que lleve a tu casa a su madre, pues la casa es de ambos y él tiene derecho.
Te sugiero que pruebes con las soluciones que te propuse, y veremos como resulta, tal vez tu marido ni pensó en otras soluciones y lo alivias un poco de tanta presión.
Hasta pronto
Pero es verdad que tu con tus problemas ya tienes bastante y ella es autosifuciente.
Una solución intermedia sería que estos primeros días o este primer mes, la vayáis a visitar los fines de semana, o los domingos que generalmente es el día de peor bajón.
Que vaya toda la familia, con tus hijos también, aunque es difícil arrancar a los jóvenes, que hagan ese sacrificio por un tiempo.
Y que durante la semana vaya tu marido una o dos veces a comer o cenar con ella.
Y tu tienes que proponerle esa solución a tu esposo y explicarle que no es mala voluntad de tu parte, pero es que no puedes psicológicamente, dile la verdad, que quieres arreglar vuestros problemas y que necesitas estar sola con él y los niños.
Tu marido está destrozado porque la madre lo presiona, pero la verdad es que es ley de vida quedarse sola cuando una es vuida, y si además no está enferma... es que solo necista un poco de contención.
Habla nuevamente con tu esposo, pero sin llegar a discutir, exprésale lo que sientes a ver que pasa.
Yo también creo que si no te llevas del todo bien con ella, no es bueno que vaya a tu casa.
Pero si tu marido se empeña, y en tu casa hay sitio, tendrán que pactar una solución intermedia, por ejemplo que vaya durante un mes, mientras que este en su peor momento de duelo.
Porque lo que no puedes permitir es que tu situación matrimonial empeore por esto, y tampoco le puedes prohibir a él que lleve a tu casa a su madre, pues la casa es de ambos y él tiene derecho.
Te sugiero que pruebes con las soluciones que te propuse, y veremos como resulta, tal vez tu marido ni pensó en otras soluciones y lo alivias un poco de tanta presión.
Hasta pronto
