Y muchas gracias por realizar tu consulta y enhorabuena por la claridad en tu exposición.
Tengo muchos clientes que llegan a mi con el mismo tema que tu me planteas y con el seguimiento de un adecuado plan supervisado su creatividad reaparece.
No conozco en detalle tu caso, no puedo saber los verdaderos motivos que te hacen hacer lo que haces, porque créeme... siempre hay unos motivos o razones encubiertas para todo lo que pensamos o hacemos. Sin embargo, voy a darte unas claves que espero que te sean de utilidad.
1. La creatividad necesita de focalización. Los mejores artistas no son aquellos que tienen ideas maravillosas, son aquellos que teniendo esas buenas ideas son capaces de permanecer concentrados en la obra iniciada hasta que la terminan. Son perseverantes, comprometidos, y siguen un orden o rutina (incluso dentro de un aparente caos) que incluye hacer tanto la parte más "creativa y reconfortante" como la más "prosaica y gris". Lo que hacen y sobre todo el como lo hacen, les funciona.
2. ¿Te funciona lo que tu haces? Al parecer no. Pues ya tienes un primer punto de partida. El resultado te dice que lo que haces o cómo lo haces no funciona. Solución: Cambio lo que hago y como lo hago.
3. Decisión de cambio. Como ya he aceptado la primera premisa "lo que hago no me funciona" acepto la segunda "Voy a cambiar" (observa que no digo "tengo" sino "voy a" ) y para que los cambios sean efectivos tendré que hacer lo siguiente:
Análisis de la situación actual para localizar lo que funciona mal e identificar aquello que puedo cambiar y lo que no. (Hay cosas que simplemente no se pueden modificar, en cuyo caso lo que hacemos es que cambiamos nosotros, es decir, nos adaptamos). De este análisis se pueden derivar diferente conclusiones
- Voy a cambiar a otro empleo que me permita tener más tiempo para dedicarlo a otra esfera personal cualquiera que esta pueda ser.
- Si no quiero cambiar de empleo voy a trabajar más efectivamente para ser más productivo. Existe una regla que dice que el 80% del valor que producimos al día deriva del 20% de nuestra actividad. Por lo tanto aprendo a trabajar muy bien, al menos, sobre ese 20% de actividad, que es la parte más importante de nuestra actividad diaria.
- Voy a organizar mi tiempo mejor: aprendo a priorizar, aprendo a establecer fechas límite para fin de proyectos, aprendo a cumplir mi agenda de trabajo diaria para que no se me acumule el trabajo y ande siempre estresado porque no llego a esas fechas límites, aprendo a saber distinguir entre lo que es urgente y lo que no lo es, aprendo a escribir un planing diario y semanal de trabajo y lo cumplo inexcusablemente, aprendo a mantenerme centrado en lo que hago en cada momento, aprendo a saber "perder" el tiempo, aprendo a organizar mi tiempo otorgando un espacio diario a mi creatividad personal que no infrinjo con otro tipo de pensamientos o tareas de la misma forma que tampoco mi creatividad personal infringe el tiempo asignado a mis tareas laborales más mundanas. Es decir, asigno un tiempo para cada cosa y cumplo hasta el final con eso que he iniciado.
- Voy a no procrastinar, es decir, aprendo a no abandonar o relegar tareas que requieren un mayor esfuerzo por aquellas que son más agradables. Aprendo que procrastinar (a nivel consciente o inconscientemente) es la reacción que se deriva de una falta de confianza en nuestra capacidad para abordar hasta el final aquello que iniciamos. Abandonamos las cosas que emprendemos porque en cierto momento dudamos de que merezcan la pena, dudamos de que valgamos para eso que hacemos, dudamos de que eso que hacemos tenga un verdadero valor y nos autoengañamos pensando que la nueva idea es mucho mejor y seguro que con ella conseguiremos el resultado que esperamos (éxito, reconocimiento, satisfacción, dinero, valoración, etc, etc, etc). Nos evadimos con nuestras ideas o proyectos personales (que tampoco terminamos realmente en muchos casos) para evitar terminar nuestro trabajo, es decir, la obligación, el esfuerzo, el reto diario. La clave es entender que la creatividad exige disciplina, esfuerzo y focalización, tanto para lo que nos resulta agradable como para lo que no. Hay oportunidad para compatibilizarlo todo; el trabajo, la creatividad, dormir, relacionarse, etc... es sólo cuestión de saber organizarse y ser responsable con el plan personal. Los mejores creativos son aquellos que asumen este principio.
- Voy a re-interpretar lo que me pasa. Aprendo a reaccionar diferente ante los mismos estímulos. Ya no me acelero cuando los tiempos límites de entrega llegan porque he organizado bien mi tiempo y he seguido un plan, por lo tanto la tarea está controlada. Ya no me estreso cuando llegan cargas importantes de trabajo porque he incorporado una nueva forma de comportarme ante el trabajo y mi faceta creativa. Ahora he aprendido a compatibilizar todo lo que en una semana quiero que ocurra. Si algo no es posible, simplemente es que no es posible en ese plazo de tiempo así que lo re-emplazo para otra fecha y no me causa ningún estrés. De hecho, justo porque ahora realmente sé lo que se puede hacer o no se puede hacer en una semana puedo establecer un criterio para aceptar invertir tiempo o no en todo lo que hago en este día, en esta semana o bien dejarlo para la siguiente.
Espero que algo de lo que aquí te digo te sirva para solucionar tu tema. Si ha sido así, te animo a que cierres la consulta y la valores consecuentemente.
Un saludo.
Rafael Martinelli
Consulta online para una cambiar tu vida
Skype: rafaandalucia2