Mi bebe de 10 meses que no quiere comida

Resulta interesante el caso que me plantea de su pequeñita; primeramente por el hecho de la situación familiar, y la desesperación suya como madre, algo que es muy lógico, y segundo, porque no se ha hecho de la manera más adecuada.
Debemos recordar que la alimentación complementaria, es aquella que se da para acompañar a la leche materna, pero que no la suple. Desconozco, por otro lado, porqué no sigue alimentándose con leche materna y desde cuándo se le introdujo la de vaca (¿?).
Debe recordar también que cuando un niño comienza a introducirse en alimentos diferentes de lo que venía comiendo (en este caso la fórmula y leche de vaca, o leche materna si todavía lo está), requiere tener mucha paciencia, no forzarlo, gritarle o asustarlo. El momento en que esté comiendo debe ser lleno de cariño y tranquilo. La forma habitual de introducir la alimentación complementaria es sustituir una a una las tomas de leche que hace la bebé, por alguna toma de alimentación complementaria, es decir, dándole papilla de cereales, fruta, purés de verduras (totalmente naturales o entre más naturales mejor; no tanto Gerber) en las veces suficientes para que la bebé vaya tolerándolos mejor, lo que también le va a permitir darse cuenta de la tolerancia que va ir teniendo, o si cierto tipo de alimentos no le caen.
En esta edad, de los cereales que se recomiendan, son aquellos que no tienen algo llamado gluten que es una proteína que está presente en el trigo, el centeno y la avena. Entre menos le demos esos cereales, será mejor la aceptación de la alimentación que sea complementaria. Los cereales que no contienen gluten son arroz, maíz y sorgo.
Dependiendo también de si la pequeñita no ha sufrido anteriormente de atopias (dermatitis, asma o alguna enfermedad de tipo alérgico que siempre tenga), puede también introducirle, salvo la tolerancia, algunas tomas con huevo, pescado y algunas frutas, como la fresa.
Recuerde también que el aspecto del aprendizaje también es muy importante en esta etapa, y dependerá mucho de la capacidad de usted como madre, de observar comer a la pequeñita. Ya para esa edad debe haber un reflejo o habilidad de la masticación bien desarrollado, pero por ejemplo, introducir alimentos salados, a diferencia de los dulces, requiere más aprendizaje y adaptación. Un rechazo a los alimentos semisólidos es normal relativamente, y lo mejor para que la pequeñita se vaya adaptando es írselos repitiendo para que lentamente se los vaya aceptando. También influyen en esa adaptación, ciertos sabores, olores, consistencias, texturas e incluso cantidades de ciertos alimentos. No está por demás dejarle elegir al pequeño.
El número de comidas recomendadas entre los 9-11 meses es de 3, mientras que entre los 11 meses y 2 años, pueden ser hasta 4. Si la ingesta aumenta, deberán aumentar también el número de comidas.
Vamos a tratar de poner a prueba estas recomendaciones e, independientemente de los complementos que le da, que de hecho no son tan necesarios, se espera que tenga una muy buena adaptación. Se recomienda quitarle todo complemento, y dar únicamente alimentos complementarios y leche materna de preferencia, sino con la fórmula adecuada a su edad.
Deseo que su niña esté bien. No se desespere.
Dr. Carlos A. Castanedo
México.