Obsesión

Aacbo de salir de una relación que me ha dejado hecha polvo y con mucho rencor y odio hacia mi ex-pareja. Me siento traicionada, engañada y tengo unas ganas de vengarme terribles. Quiero hacerle daño, quiero que sufra, estoy obsesionada, enganchada a esta historia. Sé que no merece la pena y que tengo que seguir adelante, la mayoría del tiempo consigo pasar, pero de vez en cuando caigo en la obsesión y sufro mucho. Sólo pienso en "hacer justicia" y que sufra como he sufrido yo. Ahora que estoy tranquila leo esto y me parece una barbaridad, pero la realidad es que me pasa. ¿Qué puedo hacer para tranquilizarme? ¿Qué puedo hacer para canalizar la rabia por otro lado y para no ponerme en contacto con él con insultos y amenazas cuando me obsesiono?
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El odio y el amor son dos caras de lo mismo. Mientras le odies y pienses en vengarte, seguirás estando con él, al menos psíquicamente. La única manera de librarte de él es olvidándolo. Otra cosa, que deberías investigar, es si en lo más profundo de tu deseo quieres realmente dejarlo, o si tu afán de venganza no será más bien un modo de permanecer a su lado. Ya sé que lo que te digo te puede resultar extraño, o incluso violento, difícil de reconocer. Pero si no eres capaz de ser indiferente a tu ex-pareja, es que todavía tienes mucho que ver con él. Creo deducir que es él quien te ha abandonado, o hecho algo para que le abandones. Mientras quieras "vengarte", lo que estarás pidiendo, en buena medida, es seguir junto a él.
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Hola.
Muchas gracias por tu respuesta.
Efectivamente, es así. Estoy de acuerdo contigo en que mientras quiera algo con él, lo que sea, matarle o casarme, es porque no me quiero "desenganchar". Pero es algo que no controlo, es decir, racionalmente sé perfectamente lo que hay, sé que el mejor camino es olvidar, etc., pero a veces me puede lo emocional.
La historia ha sido de constantes incoherencias y al final me he desquiciado. Soy consciente de que yo he facilitado que ocurra así, siempre digo que nos hacen lo que nos dejamos, así que "no haberte dejado". La teoría me la sé... y creo que soy capaz de analizar bien el comportamiento humano... otra cosa es comprenderlo, incluido el mío. Así que mi razón me dice que tengo que actuar como si él no existiera... pero a veces lo consigo y otras no, esa es la cuestión. Claro que no quiero dejarle, pero me gustaría tener una relación con él sólo cuando está como me gusta y eso no es posible, porque él es como es y no tiene arreglo o eso parece. Si ahora describo la relación yo misma diría "qué barbaridad, pero tú eres tonta o qué?", pero... he de aceptar que estoy como estoy, así que supongo que el asunto no está en él, sino en mí... ¿dependencia emocional? ¿Inmadurez emocional? No lo sé, pero a veces me parece que es una adicción...
No tengo problemas en analizar lo que me ocurre, el problema lo tengo en cómo hacer para que no me ocurra... hago respiraciones, relajación, intento conocer a otras personas, intento entretenerme en otras cosas... pero lo cierto es que sigue siendo mi primer pensamiento cuando me despierto... y después digo "fuera, fuera"... pero hay algo dentro de mí que no funciona bien...
¿Puedes ayudarme?
Muchas gracias, me encantan tus respuestas, tienes un dominio de los asuntos del coco envidiable.
Claro que yo, u otro profesional (aunque escogido con cuidado), podemos ayudarte. Pero has de tener claro que el fin de la terapia no es ocultar tus reacciones (eso te lo ofrecerán muchos psiquiatras o psicólogos). No se trata de relajarse o mentalizarse, sino de escuchar a esas reacciones, que te quieren decir algo que tú no quieres reconocer. Ya verás que conforme te vayas disponiendo a escucharte, salga lo que salga de ahí, sin miedo, averiguarás cosas insospechadas de ti. Pero, sobretodo, introducirás en tu vida cambios. No sabemos aún cuales, pero se acercarán más a aquello que, sin saberlo, realmente deseas.
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Lo mejor cuando algo no funciona es cambiar, o sea, si cada vez que intentas evitar un pensamiento ese pensamiento cobra más fuerza, igual es que racionalmente no puedes controlar tus emociones. Es como intentar no pensar en un oso blanco, ponte en una esquina de tu casa e intenta no pensar en un oso blanco... no salgas de esa esquina hasta que lo consigas. Como ves si pruebas esto, lo único que consigues no intentando pensar en el oso blanco es pensar más y obsesionarte con el oso blanco y por encima con tu incapacidad de conseguir pensar en el.
O sea, no te tortures por no poder controlar ese pensamiento, cuando esté en tu cabeza déjalo correr, déjalo fluir, no luches contra el porque te gana. Reserva de todos modos un rato al día en el cual escribas una media hora todo el odio que sientes por ese tío, y que sea un rato todos los días a la misma hora. Así canalizarás en parte esto.
Muchísimas gracias.
Es una respuesta muy útil para momentos de "calma relativa". Aplicaré lo que me dices. Pero hay veces que he llegado a perder el control... entonces es cuando me dirijo a él para amenazarle e insultarle... y eso es lo que quiero evitar. Es decir, aunque tenga que vivir con mi obsesión un tiempo hasta que se me pase, al menos no dirigirme a él ni hacer cosas inútiles y que a quien más daño hacen es a mí, como insultar o amenazar. ¿Qué puedo hacer en esos momentos (que no sea cortarme la mano! jaja para no mandarle mensajes, etc.)?
Saludos.
Recurrir a las excepciones, ¿cómo has conseguido no hacerlo cuando lo has conseguido?
Muy buena respuesta! Me has hecho ver que la respuesta la tengo yo...
Cuando empiezo a pensar "demasiado", me pongo a hacer otra cosa hasta que se me pasa. Si me dirijo a él de alguna forma... empieza el ciclo. Cuanto más me acerco, más me obsesiono.
Mil gracias.
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Mirasoy sikiatray tambien tarotista y amaristasi asvisienmicurriculumecho lascartasatravesdemesenerydesdecasa cobro 4eurosyago otro tipo detrabajossi estainterrrrrrsadaaki metienes

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