Las dificultades en el habla/articulación causadas por lesión neurológica (disartria) así como en el ritmo y la fluencia son casos que conllevan, por regla general, un tratamiento y una intervención logopédica a medio/largo plazo y, dependiendo de ello, junto con la gravedad de la lesión y la predisposición y el grado de compromiso del paciente, serán los que indiquen mejoría en mayor o menor grado.
El grueso de la intervención irá destinado a trabajar la coordinación fono-respiratoria, el fortalecimiento y tonificación de todos los órganos encargados del habla y directamente un trabajo de ritmo, fluencia y prosodia adecuados para adquirir suficientes estrategias para corregir, en la medida de lo posible, esa habla enlentecida que nombras.
Tu amiga necesita un logopeda, que haga una evaluación exhaustiva de las dificultades y, en consecuencia, proponga un tratamiento e intervención logopédica.
Os animo a que visitéis un logopeda ;)