Anónimo
Porque me excitan tanto los pies de mi jefa de mi trabajo? Tan fetichista soy?
Me la paso mirándole sus pies pintados y deseo con ganas de tocárselos! Y me gustan muchísimo!
1 respuesta
Pues mi querido amigo, el fetichismo es algo muy común tanto en hombres como en mujeres. La patología empieza cuando la persona se excita solamente con el fetiche y lo utiliza como sustituto del objeto sexual. (El objeto sexual sería una persona) Por lo demás los pies de las señoras suelen ser también un fetiche bastante común. Si los pies de tu jefa "te ponen", pues aquí paz y después gloria.
mi jefa es joven! como que los pies de las señoras también sueles ser un fetiche bastante común??
y otra cosa no entendí? aquí paz y después gloria???? y esa parte tampoco entendí bien como que una persona se excita solamente de un fetiche? y luego se utiliza como un objeto sexual? que los pies dice??
saludos!!
Pues sí, mi querido amigo, aunque te sorprenda los pies de las señoras suelen ser fetiches bastante comunes para muchas personas (hombres y mujeres lesbianas). El dicho "Aquí paz y después gloria" se utiliza para poner fin a algo que no mece una discusión y en tu caso, mi querido amigo, que te exciten los pies de tu jefa, es algo tan normal que, evidentemente no merece discusión alguna.
Entendiste bien. Hay personas que se excitan con el fetiche (Bragas, sujetadores, zapatos de señora, pantis, corbatas, calzoncillos, pantalones, guantes, etc) y lo utilizan como sustituto del objeto sexual, o sea se masturban con él.
Te diré algo; llevo más de 25 años ejerciendo como psicoanalista y sexólogo. He sido profesor de sexología y psicopatología en el Centro Internacional de Psicología (CIP) y, en mi ya larga y dilatada carrera profesional, he visto tantos casos de toda índole que hoy día puedo decir que NADIE tiene autoridad moral para decidir o establecer cuáles conductas sexuales son normales y cuáles no lo son. Pueden haber conductas poco habituales, pero NUNCA decir "eso que hace esta persona no es normal" La anormalidad se da cuando alguien fuerza la voluntad de otra persona obligándole, ya sea bajo amenazas o con violencia. A realizar actos que aquella persona no desea.