Lo único registrado y reconocido como ¨posesión Divina¨por la iglesia son como Francisco de Asís,, sufren los estigmas de Jesús, ha habido varias personas con los estigmas si viste la peli Stigmata, eso consideran en la Iglesia signo de estar poseído por Jesús, yo no pienso así, creo que si una persona es poseída por espíritus del bien, obraría curaciones milagrosas, el único que conozco así es Jesucristo, creo que EL estaba poseído por el bien, no creo lo de La Santísima trinidad, para mí el Hijo es HIJO, no Padre ni espíritu Santo, y como Jesús dijo:todo lo que yo hago pueden hacerlo ustedes, no sé que decirte de las posesiones demoníacas es un tema apasionante, hablan otras lenguas, etc, pero destruyen el cuerpo residente, y en el caso de los estigmas también, yo considero que un espíritu que se posesiona de un cuerpo para poder manifestarse debe respetar el cuerpo que le es prestado, he visto posesiones reales por espíritus de médicos famosos, sabios, etc, a través de un medium que ofrece por voluntad propia su cuerpo para que se materialicen, eso puedo decir Existe, he sido testigo, nunca dañan y usan al medium para curar a personas reales, en estos casos el medium controla su don y sabe como salir del estado y regresar su espíritu a su cuerpo, solo están horas pero pueden manifestarse 4-5-espíritus diferentes según la ayuda que necesiten los presentes, al ser una posesión buena es consentida y por tanto el espíritu se va solo, no hay que echarlo respeta al espíritu que habita en el cuerpo que toma prestado.
La Iglesia Católica, cuando los considera auténticos y don divino, afirma que son participación de los sufrimientos de Jesús. Reconoce unos doscientos cincuenta casos de santos y beatos que han portado. San Francisco de Asís (c. 1181-1226) como el primer estigmatizado, en realidad el primer caso en la historia sería el de la Beata María de Oignies (c. 1177-1213), beguina, caso que por ser poco conocido pasó prácticamente inadvertido. También destacan otros estigmatizados como Santa Catalina de Siena, y muchos beatos que luego confesaron fraude en sus estigmas.