¿Quién paga los profesores de religión? Yo y todos
Hace 25 años, el alumno que estudiaba Ética en lugar de Religión era el raro de la clase, el paria exiliado a gastar esa hora con un grupo reducido sin un programa claro. Hoy, una media del 46 por ciento en todo el estado decide no estudiar Religión. Eso es casi la mitad de la clase. En 1996,eran el 24,9 por ciento los de Ética.
Cada año desciende el número de alumnos que estudian Religión en la escuela pública, por lo que se ha hecho más evidente el debate sobre la laicidad de la educación. Organizaciones sociales como Europa Laica defienden que la escuela debe ser “escrupulosa con el principio de laicidad o neutralidad” para el “libre y pleno desarrollo de la personalidad humana”. En el lado opuesto, la jerarquía eclesiástica opina que son los padres los que quieren que sus hijos reciban Religión y Moral Católica en la escuela y que esta “no es laica o creyente: lo son las personas y la opción de los padres debe ser respetada”, escribe el Arzobispo de Toledo.
Alumnos, padres, Iglesia y Estado son los actores de este debate al que se suman los profesores de Religión, un colectivo hasta hoy silencioso.
¿Quién paga a los profesores de Religión?
Como el resto de profesores, los sueldos de los de Religión los asume la Administración educativa, es decir las Comunidades Autónomas. Los pagamos entre todos. Según el informe de Europa Laica, el gasto en contratación de estos profesores alcanza los 500 millones de euros al año, con los que esta plataforma estima que se están dejando de contratar a 7.000 interinos