El problema de que no avancen los países pobres está en sus propios gobernantes y sistemas políticos-económicos. Todos estos problemas crean una inseguridad y poca fiabilidad en el país, que hace que los países ricos no quieran establecerse en ellos. Ejemplos:
Los gobiernos están a espaldas del país, de modo que toda la riqueza se reparte entre los mismos, familiares, castas, oligarquía.
Los gobiernos no invierten en el país para mejorar las vías de comunicación, el transporte interno, crear leyes de comercio, utilizar bien las ayudas. No hay una planificación del desarrollo.
Hay una ausencia de leyes y de justicia que defienda realmente los derechos y deberes. La corrupción, el fraude, la estafa son abundante, por tanto una empresa no puede establecerse en un lugar donde no hay adecuados transportes, leyes, seguridad, justicia, orden.
No hay una educación generalizada y especializada para que la población pueda avanzar. La educación es para privilegiados o en el extranjero.
Al ciudadano no se le permite el progreso legal, si no es a base de convivir mafias, corrupción, pagos a funcionarios. Etc. Los mercados no está liberalizados, sino corrompidos.