¿Qué libros me recomiendas para estudiar a los filósofos antiguos?

Puedes leerlos con independencia pero es mejor leer a Platón para entender a San Agustín y a Aristóteles para entender a Santo Tomás.
Empieza por los presocráticos, hay un libro de Alberto Bernabé que es muy ameno. Mi consejo es que leas por tu cuenta antes, durante y en la universidad lo que a ti te guste, así crearás tu propio criterio. Y selecciona lo que te manden leer, intenta distanciarte de las corrientes que en la universidad se dan, porque sino te harás un lío. Si alguna te interesa pues adelante, si no te interesa ninguna, pues genial. Y no te preocupes por la desorientación o no entender algo, a mi me creaba ansiedad, porque antes o después te das cuenta que acabas comprendiendolo todo y orientandote por ti mismo.

Gracias por haber respondido! ¿Podría saber si me aconsejas de algo más de lo cual quizás tenga que cuidarme en la universidad al estudiar Filosofía? Porque lo de distanciarme de ciertas corrientes (si ese fuese el caso), lo desconocía completamente.

No es que quiera contradecir la respuesta anterior que me parece muy sensata pero considero que la filosofía no es algo que deba condicionarse al gusto. Tratamos de hallar cierta verdad y en este menester todo pensamiento puede ser útil, lo que ocurre es que hay pensamientos en los que es difícil entrar y por eso resultan más engorrosos pero de todos se puede extraer algo. En lo que sí coincido es en no obcecarse en seguir ni una linea temporal ni una linea de pensamiento tanto si es porque resulta fácil como si resulte difícil de entender a primera vista. Con el tiempo se pueden retomar lecturas que en un principio se han dejado por imposibles o que no despiertan interés. No obstante los pensamientos que han sobrevivido al paso del tiempo y forman parte de la historia de la filosofía constituyen una posible interpretación de la realidad y sirven para ampliar, confirmar o desmentir y en resumen, pulir, el pensamiento propio.

En efecto se trata de buscar que aflore el pensamiento propio ya que desde mi punto de vista, esa es la consecuencia lógica de estudiar filosofía.

Es curioso ver cómo de entrada uno lee cosas que se avienen rápidamente a su modo de pensar pero es en los textos más extraños y distantes en el pensamiento donde se aprecia la capacidad del ser humano para concebir esta realidad y ejercitarse en comprender esos pensamientos agranda nuestra capacidad de comprensión y de generación de nuestro propio pensamiento.

Como digo, el tiempo no debe ser un factor en contra sino a favor, como en todo la constancia es lo que ofrece resultados así que lo que hace falta es empezar y no dejarlo. Al final, empieces por donde empieces una cosa lleva a otra y así se va recorriendo la historia de la filosofía.

Cuando leo y trato de comprender la verdad que pretendía reflejar el autor es como meterse en la mente de otra persona y muchas veces en su corazón. Esa comprensión del ser humano es tan importante como la verdad que pueda haber en sus escritos, pues si es importante hallar la verdad, parte de esa verdad radica y se encuentra en lo que el ser humano es capaz de concebir de ella, sea esto cierto o no. Digamos que es una forma de explorar la materia que tratamos de entender.

Es curioso ver que es posible coincidir o cuando menos, se hace muy difícil rebatir, pensamientos de un filósofo que tiene creencias o ideas en principio contrarias a las propias. Por ejemplo es difícil discutir el sentido práctico y analítico de Bertrand Rusell y su calidad humana aún cuando es quizá el filósofo que más directamente ha rechazado la idea de Dios. A priori podría creerse que si uno cree en Dios o no tiene una idea clara de que no existe hay impedimento en coincidir con Rusell, sin embargo no es así. Es gracias a este tipo de cuestiones donde de verdad se revela la dualidad de formas en que puede comprenderse la vida. Lo mismo ocurre en sentido contrario, si se lee a Santo Tomás sin tener una conciencia clara de la existencia de Dios, se puede analizar la consistencia de sus pensamientos y eso es lo que importa. Para mí, uno de los temas que más interés me despiertan cuando leo a un filósofo es averiguar lo que piensa acerca de Dios, por el particular interés que creo tiene este tema y por lo que da de sí y por lo difícil que resulta argumentar en este sentido pero sobre todo porque es un tema en el que uno puede entrar a razonar de inmediato pues puede hacerse recurriendo a uno mismo, lo cual, es una actividad que presenta un reto y como tal incluso un juego. De paso, permite afirmar o poner en duda aquello que a priori se podía pensar. Por ejemplo, resulta curioso que la corriente filosófica que más firmemente ha constatado la existencia de Dios, sea el racionalismo. El pensamiento que ponía a la razón como el único elemento válido para llegar a la verdad, resulta que encuentra el camino para demostrar la existencia de algo irracional como la fe, mediante el uso único de la razón. Puede haber mayor paradoja.

En fin, el apasionamiento surge si te tomas esto no como una mera carrera, sino como un aprendizaje personal. De la filosofía se pueden aprender cosas para aplicarlas en la vida propia, ese es el verdadero sentido y fin último de la filosofía y así lo entendían los primeros filósofos como Sócrates al que te recomiendo leer con sumo cuidado pues Sócrates no aclaraba nada, su filosofía consistía más bien en poner de manifiesto la ignorancia y errores de los demás y hacer que fuera la gente misma quien se diera cuenta del error de sus concepciones. Su estilo le costó la vida y esto también es una enseñanza de como funciona el mundo en que vivimos.

Solo dos cosas más. Una.- Aparte de leer el pensamiento de un filósofo recomiendo interesarse por su vida, como vivía. Dos.- Siempre que sea posible ver a la persona hablando ya sea en videos o en directo en los acasos de filósofos vivos. La vivencia personal no es reemplazable ni trasciende a través de un libro. Me ocurre que puedo leer y escuchar lo que dice una persona pero si la miro cuando habla, me llaga una información que me permite crear mi impresión personal y eso no se puede lograr a través de un libro.