Dudas MUY SERIAS sobre mi incapacidad permanente total
En 2016 tuve un accidente en la mano donde perdí un dedo, y dos de ellos se quedaron casi rigidos, quedando la mano solo para abrir y cerrar el puño, en junio del 2018 me concedieron la incapacidad permanente total y no puedo ejercer mi profesión habitual que era técnico industrial, me dieron el alta médica y todo ok, en octubre del 2018 encontré un nuevo trabajo que es compatible con mi incapacidad, no requiere uso manual, es solo anotar visitas, repartir el correo que llega ect, pero en la revisión que me hqce la mutua me propone una operación más, me dice que no mejorará mucho la cosa, es más por estética, un dedo lo que es la falange de arriba está rígida doblada y me quieren poner un tornillo en un angulo de 45°, la verdad que lo veo bien, pero han tenido tiempo todo el verano en operarme y no han querido y ahora que estoy agusto en mi nuevo trabajo me proponen esto, tened en cuenta que es una baja según el médico mínima de 2 meses, ¿mi pregunta es... Si me niego a operarme pueden quitarme mi prestación? Puedo aplazar la operación para más adelante, ¿cuándo lleve más tiempo en la empresa? Mi revisión es para Mayo de 2020, tengo miedo de por negarme me quiten mi pensión.
1 respuesta
De lo que me parece, desde luego que estaría muy mal el que una pensión, incluso cualquiera que sea, estuviera condicionada a la obligatoriedad de someterte a una cirugía de estética. Veo que te dicen que no mejorará mucho la cosa; la pregunta sería si es previsible que con esa operación te pudieras incorporar al trabajo anterior; si al respecto de eso, no va a varias nada, presupongo que ellos no te pueden condicionar a someterte a dicho tratamiento; además de que los riesgos siempre podrían ser superiores, o importantes, y considero que tampoco podrían obligarte, ni condicionarte indebidamente.
Considero que es bueno que intentes preservar tu pensión legítima, pero por supuesto que dentro de un orden; no a costa de tu salud, por ejemplo. Ni admitiendo el cometer algo injusto, etc.
Hola, gracias por contestar, con la operación no podría volver a ejercer mi puesto anterior, te explico, mi accidente fue que me reimplantaron los dedos, perdí el dedo índice, osea, la mano, por muchas operaciones que yo me haga jamás volverá a ser la misma, ten en cuenta que nunca tendré la fuerza, ni la destraza de sujetar piezas pequeñas, ni herramientas ect... No sé si me explico... Esta operación es para que un dedo que quedó rígido curvado ponerlo más o menos recto, pero claro, me fastidia el trabajo, de ahí viene si puedo negarme o no, porque estar de baja dos meses para mejorar solo estéticamente... Después del calvario de estar dos años de rehabilitación y estar de baja, y ahora que llevo mi rutina normal, con mi trabajo, mis horarios... Es un palo psicológico fuerte, es volver a la pesadilla.
Pues ya que con el factor psicológico que comentas tienes una disculpa suficiente, si es que la necesitases, para negarte, ya que la indicación de dicha intervención de ninguna manera tendrá un carácter tan absoluto (en realidad ninguna en sentido estricto lo tiene; pero en este caso menos) como para no tener que contemplar estos factores.
Considero que justamente no te pueden obligar, y que no tendría por qué repercutir en tu pensión; y considero que en una buena práctica no tendría por qué afectarte en absoluto.
Dicen que no mejorará mucho la cosa, lo cual puede significar que la indicación es también dudosa; y sin duda los riesgos de toda intervención quirúrgica están ahí (y si ya te hablan de dos meses de baja, la cosa no es tan leve, supongo), pudiendo sin duda empeorar. Tan solo por esto creo que al menos podrías, si no debías, negarte.
