Para contestar esta pregunta tendremos que remontarnos al país donde nació la Revolución Industrial, Inglaterra.
Uno de los factores imprescindibles para que ocurra una Revolución Industrial es el capital. Sin un capital no se puede concentrar la producción en una fábrica para que, de esta manera, la mano de obra sea muchísimo más productiva que, por ejemplo, tejiendo en telares antiguos en sus casas.
Ahora bien ¿De dónde procede este primer capital? Lógicamente no puede proceder de los capitalistas industriales pues estos todavía no existían. Este capital, o acumulación de dinero para una futura inversión, sólo podía proceder de dos fuentes, de la agricultura y del comercio.
Centrémonos en la agricultura, ¿Qué tuvo de diferente la agricultura inglesa para acumular el capital? Se tienen que dar diferentes aspectos:
1. Si el propietario de la tierra es un latifundista (o un señor feudal que viene a ser lo mismo) tendrá muchas más posibilidades de acumular capital pues concurre en un mercado con poca competencia.
2. Si además estos latifundistas imponen leyes por las que pueden acrecentar sus dominios, les favorecen en este proceso de acumulación de capital. El parlamento inglés dictó leyes de enclosure (cercamiento) con lo que se permitía a los latifundistas cercar con vallas los terrenos que habían sido comunales. El capitalismo nació con expropiaciones forzosas, es su manera de ser.
3. A causa de estos cercamientos, fueron expulsados miles de campesinos que podía subsistir en las tierra comunales. Fueron el ejército de mano de obra barata para las fábricas.
4. Ya tenemos pues una aceleración del proceso de acumulación. Los primeros capitalistas ingleses podían haber optado por hacer lo que hizo la aristocracia española, dedicarse a la caza y al ocio. No obstante optaron por seguir acumulando capital y vieron que invirtiéndolo en las fábricas podían sacar mucho más dinero.
De manera breve, así fue el salto del proceso de producción feudal al capitalista. Aquí se tendría se sumar además el factor tecnológico al que también se sumó esa clase aristocrática inglesa pues las ideas de la Ilustación habían calado en su clase.