El mal olor puede ser producido por 3 posibilidades:
Suciedad en la unidad interior (intercambiador, bandeja de desagüe, ventilador o filtros).
Desagüe, que el olor no esté producido por la máquina, sino que este lo aspire por el desagüe.
Movimiento de aire, la máquina no huele, solo mueve un aire viciado con mal olor «incorporado».
Unidad interior sucia.
Una unidad interior sucia, ya sean filtros, ventilador, intercambiador o la propia bandeja de condensados produce mal olor porque a parte de la acumulación de suciedad y humedad que terminan por crear una especia de barro con una «baba» incluida, se van acumulando y proliferando hongos y bacterias que son en gran medida los responsables de estos malos olores, por lo que la forma de evitar esto es muy sencilla, mantener nuestro equipo de climatización lo más limpio y seco posible para evitar que puedan proliferar estos hongos y bacterias.
El aire acondicionado huele a desagüe.
Si el aire acondicionado huele a desagüe el problema es obvio, la máquina aspira aire del desagüe y lo mete en casa, este problema se produce por dos causas que deben darse juntas:
El desagüe de la máquina interior está conectado al desagüe general de la casa.
Este desagüe que va desde la unidad interior hasta el general no tiene sifón o ese sifón es muy pequeño.