I.Hola Compañero, en mi caso no soy conocedor pero tengo entendido que es así para poder obtener una alta precisión, adaptabilidad a las distintas necesidades y una gran versatilidad.
Deseaba trasladarle la información sobre este tema que vi por si pudiese serle de utilidad mientras le atiende una persona más preparada. Le ruego me disculpe la imprecisión y la incomodidad de lectura. Saludos.
https://blog.bextok.com/galgas-espesores-tan-utiles/
Su uso en la industria mecánica es muy variado, pues se utilizan desde los trabajos de laboratorio de la más alta precisión hasta para hacer mediciones directas en los trabajos de taller. Por eso no se construye una única calidad de calas, sino que hay establecidos 5 grados de precisión, que podemos reconocer por los nombres 0, I, II, III y IV (o también AA, A, B, C y W) y que van de mayor a menor precisión. Te los describimos:
- Precisión 0 (AA): Son galgas de la más alta precisión, propias para trabajos científicos y patrones de instrumentos de verificación y determinación de la curva de errores de un micrómetro milesimal.
- Precisión I (A): Se utilizan en el control e inspección de los instrumentos de medida propios del taller (micrómetros ordinarios, calibres, etc).
- Precisión II (B): Se usan para hacer mediciones directas en los trabajos de precisión propios de la construcción de herramientas y utillaje, como calibres de tolerancia. Para ello tienen un soporte para la sujeción de las galgas y unos palpadores especiales para medir agujeros.
- Precisión III (C): Estas galgas de espesor son utilizadas como galgas de taller para efectuar mediciones directas. También se utilizan para realizar trabajos de trazado de precisión, para lo cual se suministra el juego de galgas, con puntas de trazar adecuadas para montar sobre un soporte y de una base.
- Precisión IV (W): Solo se utilizan como galgas o topes de taller, en forma de apoyo o control de desplazamiento de carros en las máquinas herramientas.
Los bloques de galgas
El precedente a los actuales bloques de galgas apareció en Suecia hacia 1700, cuando Christopher Polhem (1661-1751) empezó a utilizar piezas de longitud estándar como elemento de medición, en una época en que las exigencias de precisión eran más bien escasas. Tuvieron que pasar casi dos siglos para que, también un sueco, Carl Edvard Johansson (1864–1943) diseñara el primer juego de galgas, conocidas posteriormente como galgas Johansson. En 1894, el gobierno sueco pasó un importante pedido de rifles a la empresa Mauser de Alemania. Johansson formaba parte de la comisión sueca de inspección del armamento y observó la enorme cantidad de galgas que hacían falta para fabricar los rifles e ideó un sistema que permitía, con un pequeño número de bloques de galgas, obtener todas las combinaciones necesarias para fabricar todas la piezas. En 1896 se fabricó el primer juego, con una exactitud de 0,001 mm. A partir de 1907, la industria americana del automóvil empezó a utilizar masivamente este nuevo sistema de medición.