¡Jolines!
Jolines, siento la tardanza, Wierd. Parece ser que hubo problemas en el servidor y no pude acceder a mi cuenta(finalicé la pregunta porque no se puede tener varias preguntas abiertas con el mismo experto, te he dado la máxima puntuación como compensación).
No toco piano, guitarra sí (pero no soy un gran instrumentista, me ayudo con la guitarra, que también se considera pequeña orquesta, para componer, hace tiempo que no practico en serio).
¿Mis estudios? Por cuestiones de la vida que ya le expliqué a Félix no terminé el grado elemental en el conservatorio... (ups). Mis conocimientos son autodidactas y proceden de la biblioteca general de Sevilla: me he estudiado el manual de armonía clásica de Enrique Rueda (profesor especial de armonía del conservatorio de Granada) y el primer volumen de Armonía Moderna de Enriq Herrera (aula de música moderna y jazz de Barcelona), aunque he hojeado los tres (incluso el de orquestación moderna). También he hojeado algo del círculo de quintas (pero me gusta más explicarlo como secuencias de dominantes secundarias, segundos grados relativos, dominante de la dominante, etc...) y a Walter pistón (Armonía y contrapunto), Shoemberg (Funciones estructurales de la armonía), algo de estética de la música y algo de forma... Pero estas últimas cosas, no las he visto en profundidad.
Sobre Lluis Vergés, me enteré porque respondiste una pregunta en el tablón de anuncios y mencionaste su fabuloso libro, luego lo busqué en Google.
Gracias, saludos.
No toco piano, guitarra sí (pero no soy un gran instrumentista, me ayudo con la guitarra, que también se considera pequeña orquesta, para componer, hace tiempo que no practico en serio).
¿Mis estudios? Por cuestiones de la vida que ya le expliqué a Félix no terminé el grado elemental en el conservatorio... (ups). Mis conocimientos son autodidactas y proceden de la biblioteca general de Sevilla: me he estudiado el manual de armonía clásica de Enrique Rueda (profesor especial de armonía del conservatorio de Granada) y el primer volumen de Armonía Moderna de Enriq Herrera (aula de música moderna y jazz de Barcelona), aunque he hojeado los tres (incluso el de orquestación moderna). También he hojeado algo del círculo de quintas (pero me gusta más explicarlo como secuencias de dominantes secundarias, segundos grados relativos, dominante de la dominante, etc...) y a Walter pistón (Armonía y contrapunto), Shoemberg (Funciones estructurales de la armonía), algo de estética de la música y algo de forma... Pero estas últimas cosas, no las he visto en profundidad.
Sobre Lluis Vergés, me enteré porque respondiste una pregunta en el tablón de anuncios y mencionaste su fabuloso libro, luego lo busqué en Google.
Gracias, saludos.
1 respuesta
Respuesta de wierd
1
No te preocupes, tenía curiosidad por saber si conocías a Vergés.
Bueno, se trata de atonalismo;ya te insinué en la respuesta anterior que Félix te podía ayudar mucho mejor que yo, pues el si se ha dedicado a ésa estética.
Intentaré darte alguna guía pero el tema es inabordable para todoexpertos.
De entrada, si quieres tomarte en serio la composición, creo que sería fundamental que te hicieses con un piano, acústico o eléctrico, o incluso un sinte, pero algo que te permita ver la armonía con claridad. En ése sentido la guitarra es un instrumento muy limitado. Imaginate que hablamos de poliacordes;un pasaje muy conocido de la Consagración de Stravinsky parte de un mi bemol,(acorde), sobre un mi,(acorde). Algo tan simple de entender en un piano, es imposible en la guitarra y en ése sentido tendrás una limitación monumental.
Hemos pasado muchos años oyendo música tonal, entendiendo el tono como un microuniverso formado por acordes en función de subdominante, dominante y tónica, esta última, el centro de gravedad de dicho universo. Y es algo que tenemos tan asimilado, por la armonía clásica, el contrapunto, y cómo no, el pop, el rock etc, que puede resultarnos difícil escapar de ése centro, del proceso cadencial,( como quiera que se amplíe), y de las escalas mayores y menores en toda su variedad.
Esté claro que si tocas las notas do mi sol la sol, tendrías un motivo que irremediablemente llevaría a tu oído a un acorde Do mayor, sin necesidad de armonizarlo.
Estás insinuando un acorde, y por ende, un tono, ya que puede pertenecer a Do mayor, o un cuarto grado de Sol mayor, o un quinto de Fa mayor.
Vemos que huyendo del tono, no solo es cuestión de jugar con la armonía, sino que la melodía en sí, podría sacarnos del contexto tonal si conseguimos que nuestro oído no perciba células del tipo do-mi-sol, re-fa-la, en conjunto, todo lo que "huela" a acorde perfecto mayor, menor, dominante séptima, etc.Resulta muy simple decirlo, pero si intenta escribir una pequeña melodía de ésas características, verás que hace falta mucha práctica. Por otro lado, si tocas una serie de notas seguidas a distancia de segunda, harás entender una escala, con el peligro que éso puede suponer para tu melodía atonal. Los saltos de tritono, también pueden ser arriesgados, y con todo eso es importante practicar en la escritura de melodías eludiendo éstos riesgos.
Por otro lado está la armonía. Puedes escribir pasajes homofónicos, acompañar una melodía, o puedes montar una textura polifónica, donde en cada momento resaltarás la voz que te interese.
En cuanto a armonía, hay muchos recursos que han sido utilizados por los grandes maestros del siglo veinte, y que deberías conocer antes de ir probando por tu cuenta.
La armonía modal podría ser un buen tema para ir abriendo boca. Tienes en la consagración, un pasaje muy conocido, en el que se da un paseo modal sobre mi bemol dórico.(Rondes de Printanières).
Los acordes por cuartas, son un recurso que ya conoces.
El bitonalismo, es decir, la existencia de dos tonos a la vez, es otro reecurso utilizado por Stravinsky, y puedes oírlo en El sacrificio de la consagración. Por cierto, John Williams se inspiró en el para un pasaje de La güera de las galaxias, en el que los dos robots caminan por el desierto.
Otro recurso es el de los Poliacordes, es decir, el uso de estructuras formadas por dos o más acordes, dependiendo de la masa armónica, de la pesadez o ligereza, o de la dinámica del pasaje en cuestión.
Armonía compuesta, armonía en espejo, escalas artificiales, acordes aumentados, en fin, los recursos son tantos que darían para mucho tiempo de estudio. Sin contar con la dodecafonía, que es un sistema bastante estricto que hay que estudiar con mucho detenimiento.
Ya te decía que el tema era muy muy extenso, así que resumiendo, mi consejo es que si te gusta la composición, te pongas manos a la obra, empezando por oír mucho. Te aconsejo "La consagración", ya que ahí verás muchos de los recursos que te contaba. También el "Concierto para orquesta" de Bartok. No te limites a escuchar, hazlo partitura en mano, y entresaca todo lo que te llame la atención, para analizarlo. Intenta imitarlo después. Al fin y al cabo, lo que quieres es escribir, y a éso, sólo se aprende escribiendo.
De todo esto se habla en el libro "Armonía del siglo veinte" de Vincent Persicheti, de la editorial Real musical;no es caro, y te ayudará sin duda.
Otro libro interesante, es "Tratado de composición a dos voces", también de Real musical, de Hindemith. Te aconsejo "Matías el pintor" del mismo autor.
No dudes en hacerte con un teclado, te aseguro que estas técnicas son muy difíciles de aprender a dominar con la guitarra, y en fin, creo que tienes alguna pauta para ponerte a ello. Espero haberte sido útil, y cuenta conmigo si me necesitas. Un abrazo.
Rafa.
Bueno, se trata de atonalismo;ya te insinué en la respuesta anterior que Félix te podía ayudar mucho mejor que yo, pues el si se ha dedicado a ésa estética.
Intentaré darte alguna guía pero el tema es inabordable para todoexpertos.
De entrada, si quieres tomarte en serio la composición, creo que sería fundamental que te hicieses con un piano, acústico o eléctrico, o incluso un sinte, pero algo que te permita ver la armonía con claridad. En ése sentido la guitarra es un instrumento muy limitado. Imaginate que hablamos de poliacordes;un pasaje muy conocido de la Consagración de Stravinsky parte de un mi bemol,(acorde), sobre un mi,(acorde). Algo tan simple de entender en un piano, es imposible en la guitarra y en ése sentido tendrás una limitación monumental.
Hemos pasado muchos años oyendo música tonal, entendiendo el tono como un microuniverso formado por acordes en función de subdominante, dominante y tónica, esta última, el centro de gravedad de dicho universo. Y es algo que tenemos tan asimilado, por la armonía clásica, el contrapunto, y cómo no, el pop, el rock etc, que puede resultarnos difícil escapar de ése centro, del proceso cadencial,( como quiera que se amplíe), y de las escalas mayores y menores en toda su variedad.
Esté claro que si tocas las notas do mi sol la sol, tendrías un motivo que irremediablemente llevaría a tu oído a un acorde Do mayor, sin necesidad de armonizarlo.
Estás insinuando un acorde, y por ende, un tono, ya que puede pertenecer a Do mayor, o un cuarto grado de Sol mayor, o un quinto de Fa mayor.
Vemos que huyendo del tono, no solo es cuestión de jugar con la armonía, sino que la melodía en sí, podría sacarnos del contexto tonal si conseguimos que nuestro oído no perciba células del tipo do-mi-sol, re-fa-la, en conjunto, todo lo que "huela" a acorde perfecto mayor, menor, dominante séptima, etc.Resulta muy simple decirlo, pero si intenta escribir una pequeña melodía de ésas características, verás que hace falta mucha práctica. Por otro lado, si tocas una serie de notas seguidas a distancia de segunda, harás entender una escala, con el peligro que éso puede suponer para tu melodía atonal. Los saltos de tritono, también pueden ser arriesgados, y con todo eso es importante practicar en la escritura de melodías eludiendo éstos riesgos.
Por otro lado está la armonía. Puedes escribir pasajes homofónicos, acompañar una melodía, o puedes montar una textura polifónica, donde en cada momento resaltarás la voz que te interese.
En cuanto a armonía, hay muchos recursos que han sido utilizados por los grandes maestros del siglo veinte, y que deberías conocer antes de ir probando por tu cuenta.
La armonía modal podría ser un buen tema para ir abriendo boca. Tienes en la consagración, un pasaje muy conocido, en el que se da un paseo modal sobre mi bemol dórico.(Rondes de Printanières).
Los acordes por cuartas, son un recurso que ya conoces.
El bitonalismo, es decir, la existencia de dos tonos a la vez, es otro reecurso utilizado por Stravinsky, y puedes oírlo en El sacrificio de la consagración. Por cierto, John Williams se inspiró en el para un pasaje de La güera de las galaxias, en el que los dos robots caminan por el desierto.
Otro recurso es el de los Poliacordes, es decir, el uso de estructuras formadas por dos o más acordes, dependiendo de la masa armónica, de la pesadez o ligereza, o de la dinámica del pasaje en cuestión.
Armonía compuesta, armonía en espejo, escalas artificiales, acordes aumentados, en fin, los recursos son tantos que darían para mucho tiempo de estudio. Sin contar con la dodecafonía, que es un sistema bastante estricto que hay que estudiar con mucho detenimiento.
Ya te decía que el tema era muy muy extenso, así que resumiendo, mi consejo es que si te gusta la composición, te pongas manos a la obra, empezando por oír mucho. Te aconsejo "La consagración", ya que ahí verás muchos de los recursos que te contaba. También el "Concierto para orquesta" de Bartok. No te limites a escuchar, hazlo partitura en mano, y entresaca todo lo que te llame la atención, para analizarlo. Intenta imitarlo después. Al fin y al cabo, lo que quieres es escribir, y a éso, sólo se aprende escribiendo.
De todo esto se habla en el libro "Armonía del siglo veinte" de Vincent Persicheti, de la editorial Real musical;no es caro, y te ayudará sin duda.
Otro libro interesante, es "Tratado de composición a dos voces", también de Real musical, de Hindemith. Te aconsejo "Matías el pintor" del mismo autor.
No dudes en hacerte con un teclado, te aseguro que estas técnicas son muy difíciles de aprender a dominar con la guitarra, y en fin, creo que tienes alguna pauta para ponerte a ello. Espero haberte sido útil, y cuenta conmigo si me necesitas. Un abrazo.
Rafa.
