Reparar juntas suelo pizarra

Para empezar, debemos distinguir si lo que hiciste saltó por falta de adherencia o por mala dosificación o elección de componentes. Si las juntas se están deshaciendo, es el segundo caso. Si por el contrario salta por trozos, es decir, se suelta del otro mortero, estamos en el primer caso.
El proceso a seguir es el siguiente:
Cepillar y quitar todo el material que esté disgregado, dejándolo lo más limpio posible. Para el mortero, conviene utilizar arena exenta de polvo o arcilla, por lo que será arena lavada de machaqueo procedente de cantera de color blanco o muy claro (si la coges de río te saldrá un tono más amarillento). La proporción viene a ser 1 de cemento por cada 3 de arena, poniendo algo menos de la mitad de agua que de cemento (40-45%). Ve añadiendo poco a poco el agua, ya que la arena lavada contiene agua y puedes necesitar menos agua, en cuanto la pasta está trabajable no le eches más. Esta relación agua/cemento es fundamental para la resistencia que tendrá al final el cemento. Humedece las juntas con agua de forma que esté mojado pero no encharcado. Debes hacerlo cuando el soporte no esté a pleno sol ni muy caliente, ya que provoca que el agua del cemento se evapore y cuarteará el mortero en el secado. Aplicas el mortero y lo enrasas con la paleta. Cuando el mortero haya tirado, limpias el excedente con una esponja húmeda. Finalmente y para conseguir una ejecución de libro, con el mortero aparentemente seco, puedes regarlo regularmente para que conserve la humedad durante unos 3 días, o le pones un plástico tras la primera regada, así evitas que pierda agua por evaporación y se produce un fraguado completo del cemento.
En cuanto a poner otro componente, se puede pintar el cemento viejo con una resina de union de morteros. La encontrarás en cualquier almacén de materiales que tenga de todo. En ese caso, tras limpiar bien las juntas aplicas la resina, sin mojar. Esta resina tiene un tiempo de vida, te lo pone en el bote, así que irás pintando por delante del tajo para que no le de tiempo a secar antes de poner el mortero. Se aplica con pincel, y procura no salirte de la junta porque aunque suele ser transparente deja un tono más oscuro.
Si sigues estos pasos, tendrás juntas perfectas.