La posición de un astro en la esfera celeste es descrita por dos coordenadas esféricas definidas dentro de un determinado sistema de referencia. Según los fines de las medidas o de la instrumentación usada, se utilizan cuatro sistemas diversos de coordenadas celestes. El primer sistema, o sistema azimutal, asume como plano fundamental el del horizonte; las coordenadas son el azimut y la altura. El segundo sistema, o sistema horario, asume como plano fundamental el plano del ecuador celeste; las coordenadas son el ángulo horario y la declinación. En el tercer sistema, o sistema ecuatorial, los planos fundamentales son dos, perpendiculares entre sí: el plano del ecuador celeste y el del circulo horario del punto ( equinoccio de primavera); las coordenadas son la ascensión recta y la declinación. Finalmente, el cuarto sistema, o sistema eclíptico, asume como planos fundamentales, el de la eclíptica y el círculo máximo perpendicular a la eclíptica que contiene el punto; las coordenadas son la longitud celeste y la latitud celeste. Fórmulas oportunas de transformación permiten pasar de uno a otro de los cuatro sistemas. Los sistemas más utilizados en la astronomía, refiriéndome a las monturas para los telescopios, son el azimutal (más sencillo de utilizar por lo que es el preferido por los iniciados) y el ecuatorial (utilizado por los telescopios más complejos cuyo principal inconveniente es el elevado precio de la montura).