Es una pregunta muy específica y solo puedo ofrecerte opiniones, basadas en razonamientos de carácter my general.
Me parece que la estrategia que hay que seguir es favorecer el desarrollo de plantas competidoras. Deben ser evidentemente plantas deseables, o al menos no tan indeseables; sobre todo plantas menos susceptibles de incendio y menos favorecidas por el incendio (la jara pringosa es, si no me equivoco, un pirófito, una planta que medra mejor tras los incendios). Se trataría de, tras arrancar las jaras, sembrar o plantar, y en algún grado proteger o favorecer, otras plantas leñosas, matas y arbustos, para que ocupen el especio y, en su caso, favorezcan el desarrollo futuro de una formación arbórea o, si la pendiente y el sustrato no son compatibles, una formación arbustiva densa y estable. Pienso en primer lugar en las retamas, escobones y genistas, y otras leguminosas de porte menor (Ononis) o mayor (Colutea), todas las cuales enriquecen el suelo en nitrógeno y favorecen el desarrollo de una vegetación más densa, variada y madura.
La jara pringosa produce efectos «alelopáticos» sobre las semillas de otras especies (inhibe su germinación, estropeando su estadística) e incluso sobre las propias (pero es un efecto difícil de aprovechar), por eso hay que eliminar la jara primero, y contar con la persistencia de ese efecto inhibidor sobre la germinación en un primer tiempo.
Otra manera de expresar la misma estrategia es decir que pretendemos acelerar o encauzar la sucesión ecológica, favoreciendo a las plantas que crecen antes de que de manera natural crezca el bosque. Una vez puesto en marcha el proceso se pueden favorecer especies como labiérnagos (Phyllirea), lentiscos y cornicabras (Pistacia), Colutea, etc.
Se me ocurre que hay dos estrategias para investigar en esta línea, eligiendo plantas ventajosas y cuya promoción sea especialmente factible:
1ª Buscar información experta (más experta que la mía) en las publicaciones botánicas o de ingeniería ambiental. Tengo delante un artículo sobre las especies que preceden al encinar (Encinares luso-extremadurenses y sus especies preclimácicas); está escrito en una jerga especial (la de la fitosociología), pero contiene un mapa y comenta las especies que preceden al encinar en la evolución natural en cada zona. Te lo puedes descargar:
http://www.biolveg.uma.es/abm/Volumenes/vol15/15_Ladero.pdfPor otro lado, en el lenguaje actual hay una palabra clave, «restauración», que acompañando a la palabra vegetal (por ejemplo, «restauración de la cubierta vegetal») indica las acciones dirigidas a favorecer el desarrollo de una vegetación de tipo natural en sitios como taludes de carreteras o minas abandonadas. Si buscas encontrarás orientaciones sobre como trabajar.
2ª Busca en el entorno lugares con características físicas (sustrato, pendiente, orientación, ...) equivalentes, pero donde no sean las jaras las dominantes. Mira que especies hay e investiga si es factible usarlas. No hay que olvidar precisamente la competencia; donde las jaras están asentadas (a menudo favorecidas por el incendio) no dejan que entren otras, pero no pueden imponerse donde éstas ya están: las plantas crecen donde las condiciones físicas son adecuadas y donde además
las otras las dejan.
Una nota importante, por si te parece que merece la pena explorar la idea: usa sólo especies que ya pertenezcan a la flora local, que crezcan allí cerca o en el término de al lado. En cuanto al uso de depredadores y parásitos más o menos exóticos, como sabes, es peligroso, por más que lo llamemos «lucha biológica». Catástrofes como la mixomatosis han sido producidas por ese tipo de acción.
Como ya te dije, me falta una cualificación específica y no conozco ni tampoco encuentro publicaciones que contengan una respuesta ajustada a tu pregunta. Espero que estas consideraciones te sean de alguna utilidad. Recibe mi felicitación por la preocupación que demuestras por hacer bien algo que no te va a producir un beneficio privado inmediato ni evidente. Si hay algo más que pueda hacer, estaré encantado.