Algo curioso que me raya :-)

La respuesta a tu pregunta te la podría haber dado Galileo. Él enunció que un sistema de referencia, moviéndose a velocidad constante, presentaba las mismas propiedades que un sistema en reposo. Es decir, si algo se mueve a velocidad constante formará un sistema donde las fuerzas están en equilibrio.
En el caso de la mosca y el coche: Al estar cerrado herméticamente, el coche con el aire que contiene en su interior forman un sistema cerrado que vale como sistema de referencia. Cuando el coche se mueve a velocidad constante, en el interior del coche la física se aplicará como si estuviéramos en reposo. De hecho, ¿no es cierto que si vas por una autopista a una velocidad fija puedes moverte dentro del coche como si estuvieras en tierra firme? Sin embargo, esto cambia cuando hay variación de velocidad, es decir, aceleración. Esta aceleración refleja la aparición de una fuerza que, como habrás observado, nos impulsa hacia atrás (pues nuestro cuerpo tiende a permanecer en reposo o en su velocidad constante) cuando aceleramos, o hacia delante cuando frenamos (deceleramos). Lo mismo le sucede a la mosca. De hecho, cuando aceleramos, la mosca se siente atraída hacia la parte de atrás del automóvil. Si consiguiéramos acelerar lo suficientemente rápido, efectivamente se estamparía en la luna de atrás.
Otro ejemplo claro que demuestra la estabilidad de los sistemas que se mueven a velocidad uniforme se ve en el movimiento de los planetas. Podías haber preguntado: ¿Por qué si la Tierra rota no sentimos una fuerza que nos expulse hacia fuera de ella mientras gira? La respuesta es la misma que con el caso de la mosca. Como la Tierra se mueve en un movimiento circular de velocidad angular constante, crea un sistema, junto con la atmósfera, estable equivalente a estar en reposo.