Indecisión ante elección de estudios y profesión.

Soy un joven de 18 años. El año pasado terminé el bachillerato científico-tecnológico, y este año me lo estoy tomando libre.
La razón por la cual me lo tomo libre es porque no sé que carrera estudiar.
La elección de los estudios universitarios es probablemente la elección más complicada que tendré en mi vida, puesto que me agobia el pensar que pueda equivocarme, e introducirme en unos estudios que o bien no me gusten lo suficiente, o que después no me guste el ejercicio profesional.
Las carreras que he estado valorando han sido muchísimas. Sin embargo, mi elección está en líneas generales, entre las siguientes: Medicina, psicología, ingeniería de caminos o ingeniería industrial. De hacer psicología escogería la especialidad de psicología clínica; de ingeniería industrial, escogería la rama de diseño de elementos mecánicos aplicado al automóvil; y, de ingeniería de caminos, supongo que me encararía hacia hidrología o bien hacia la construcción de obras civiles. Dentro de la medicina, lo que más me interesaría es la cardiología, la neurología, la psiquiatría o bien la medicina familiar y comunitaria. La cirugía sin embargo no me gustaría ejercerla... Mejor diagnosticar y aplicar tratamientos que abrir a la gente y ver tantísima sangre.
Sa como sea, soy consciente de que los ámbitos profesionales innerentes en estas profesiones son bastante distintos. Hay un perfil común entre la psicología y la medicina: el contacto con la gente, y la preservación de la salud del ser humano. También hay similitudes entre la ingeniería industrial y la ingeniería civil, como son que en las dos se usan las matemáticas para producir algún bien útil para la sociedad.
A mí me gustaron las matemáticas y la física del bachillerato, pero no se si toda la vida me gustaría ejercer de ingeniero. Puesto que encuentro un poco frío todo eso, en mi mente afloraron la psicología y la medicina, que me encararían hacia un ejercicio profesional totalmente distinto.
Me siento interesado en dos ámbitos profesionales, pero a la vez, no sé si realmente me van a llenar completamente. Fui a una psicóloga y según el WAIS-3 mi CI es de 134.
La verdad, me siento un poco abrumado. Si me dicen que soy inteligente, pero no he tenido agallas aún para decidirme para uno de los dos ámbitos de trabajo, siento que o bien no soy tan inteligente como ese test sugiere, o bien tengo indecisión crónica o algo raro. Hay cosas en esta vida que tengo muy claras. Querré tener hijos, un trabajo fijo y seguro pero no monótono, a ser posible creativo, tener perro (ya tengo uno)... En fin ser feliz, o al menos encararse perfectamente hacia el camino de la felicidad, pero si hay algo que me está costando ahora decidir es mi futuro profesional. Lo que sí tengo claro al 100% es que quiero ser titulado universitario.
Mi madre me dice: "la carrera que empiezas la terminas" (un año de carrera, ¿contando residencias y matrícula de 1000? Se va entorno a los 8000 e y mis padres están divorciados y no son ricos), por esto me tomé este año libre, para aclararme las ideas y escoger bien el año siguiente, sin embargo, aunque mi información ha aumentado, mi decisión todavía no ha aflorado.
No le pediré que me diga que quiero ser, porque se que esto sólo lo puedo responder yo. ¿Solamente le pido que me diga cómo puedo decidirme ya?
Según Freud la pereza es el miedo al fracaso, y este año solo lo he dedicado a aprender inglés pero no he hecho todo lo que podría haber hecho. Tengo quizá miedo a fracasar, no en sentido profesional probablemente, sino en sentido de no encontrar lo que realmente me llene, puesto que con esfuerzo y constancia y una inteligencia media cualquier carrera se puede sacar y lo mismo a la hora de ser un buen profesional.
En fin, qué me recomendaría para agilizar mi proceso de decisión, y lo que es más importante, ¿qué después de decidir me sienta con la sensación de haber hecho lo correcto y pueda encararme ya profesionalmente?
P.D. Disculpe por tan largo mensaje. Por cierto, soy de España.
Respuesta
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Estoy seguro que eres un chico con un gran potencial, se nota en la manera en que escribes y el lenguaje que utilizas. Se entiende tu inquietud de querer tomar la MEJOR decisión en la elección de tu carrera, pero déjame decirte algo. Muchas veces las decisiones que parecen las más complejas se resuelven de la manera más sencilla. Quizá puedas hacer un análisis a profundidad de tus aptitudes, de los futuros en el mercado laboral, de los ingresos promedio en cada una de las provincias e industrias en las que estás interesado. Sí, puedes hacer todo eso para elegir la mejor carrera. Pero ¿sabes algo? La respuesta es mucho más sencilla de lo que tú crees... y ya tienes una buena idea de cuál debe ser. Tú mismo lo dijiste: "... ser feliz". Elige aquella profesión que disfrutes, que te apasione y habrás dado un paso enorme hacia tu felicidad y realización profesional y personal. No importa si no tiene mercado o si aparentemente no pagan mucho, créeme que cuando te dedicas a lo que te gusta, si no tiene mercado ¡Tú lo vas a encontrar! O mejor aún ¡Tú lo vas a crear! Y si pagan poco pero tienes ambición suficiente, el dinero te seguirá a ti, porque estarás empleando tu talento en desarrollar algo que la gente valorará también.
De las opciones que tienes, visualiza un día de trabajo, cómo sería, qué harías, con quiénes te relacionarías, cómo terminarías tu día, cómo serían tus superiores, tendrías gente a tu cargo, trabajarías aislado. Hazte estas preguntas y ve si eso es lo que quieres.
Te puedo decir también que en un mundo tan globalizado lo que más cuenta es la capacidad de adaptación, la flexibilidad. Quizá estudies ingeniería, pero terminarás quizá administrando proyectos y personal. Lo mismo si eres médico, quizá algún día termines dirigiendo un hospital.
Para llegar lejos, lo más importante es que lo que hagas, vuelvo a repetirlo, te apasione. Cuando sucede así, el trabajo deja de ser trabajo y en verdad gozas lo que haces.
Las personas más felices no necesariamente son las que tienen el IQ más elevado o aquellas con los puestos más altos en las organizaciones. Cada uno debe encontrar su propio camino y la mejor manera de empezar a hacerlo es precisamente disfrutar lo que se hace. Siguiendo ese lineamiento tan simple verás que la felicidad no es tan complicada.
Mucha suerte y que todo salga bien.

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