Mi perra se escapa

Sin duda, la que manda en casa es tu perrita y no tu. No te tiene ningún respeto y hace lo que quiere. Con dos años costará un poco hacerle entender que la que manda eres tu y que ella debe obedecer, pero no es imposible, es cuestión de paciencia y constancia.
Tendrás que seguir todo un ritual de cosas para hacerle entender quien manda. Empecemos con la comida: si le das una o varias veces de comer al día, debes llamarla, cuando llegue a dónde tu estás, le preparas la comida para que te vea. Cuando tengas el pienso preparado le dices que se siente y una vez que se haya sentado le pones la comida y la dejas que coma tranquila. Nunca le des nada de comida cuando tu estés comiendo, si te da pena y quieres darle algo, espera a que hayas terminado de comer y entonces le dices que se siente y le das la comida que le has guardado.
Con el juego y las caricias: nunca le hagas caso cuando ella te pida que juegues o que la acaricies, debes acariciarla y jugar con ella siempre cuando esté tranquila. Siempre debes iniciar tu el juego y las caricias. Cuando lleves un rato con el juego o las caricias, lo cortas en seco y le dices que se acabó. Seguramente te pedirá más, pero debes ignorarla. Tú decides cuando se juega y cuando se acaba el juego, no ella.
En la calle: a la hora de salir, debes llevarla siempre atada. Busca una correa de esas extensibles y déjala que tire hasta que ya no quede más cuerda. Llévate chucherías, jamón dulce o algo que le guste mucho o quizás un juguete. Primero te paras y la llamas, un par o tres de veces, si no viene le enseñas la chuche y cuando venga le dices que se siente y se la das, entonces le dices MUY BIEN y pones cara de estar muy muy contenta.
Otra de las cosas que puedes hacer es: sales a pasear, le dejas la correa que tire hasta que no pueda más, la llamas y si no viene... fin del paseo. Vuelves a casa. Te quedas allí hasta que se haya calmado y cuando ya esté calmada vuelves a salir. Repites otra vez, que no vuelve cuando la llamas, vuelta para casa. Esto es más engorroso y lo puedes hacer sólo cuando tengas tiempo o los fines de semana.
La idea es: por una parte hacerla entender que tu mandas y que las cosas se hacen cuando tu lo dices y cuando tu quieres. La otra idea es: si te portas bien hay premio, si te portas mal hay castigo. Nunca le pegues para castigarla, si quieres asustarla y que entienda que lo que ha hecho está muy mal, la coges por el cuello, por la parte de arriba (como cogen las hembras a los cachorros para trasladarlos) y la zarandeas un poco. Cuando hagas eso, debes decirle un NO seco y poner cara de muy muy enfadada. Ese es un "castigo" que le hace la madre a los cachorros cuando han hecho algo muy grave. Tu perra lo reconocerá y lo entenderá.
Tienes que ser muy paciente y muy constante. No le des tregua bajo ningún concepto. Debes hacer todo eso cada día, a la hora de comer, a la hora de salir, dentro de casa, en la calle, en todas partes. Tiene que entender que tu lo controlas todo y que ella no puede saltarse las normas que tu le has puesto.
Sé que es engorroso y pesado, pero sólo así lograrás que deje ese comportamiento. Al principio se te hará pesado, pero una vez te acostumbres, lo harás sin darte cuenta. Todo eso no significa que no la mimes o no la quieras, nada más faltaría! Si quieres mimarla, abrazarla o darle un beso, no te reprimas, hazlo, pero cuando ella no te lo pida. Puedes mimarla igual, pero imponiendo tus normas. Piensa que es por su bien y por su seguridad. La próxima vez que se escape, puede cruzar una calle y que la atropelle un coche.
Perdona por la extensión, espero haberte ayudado, si necesitas cualquier aclaración, no dudes en pedírmela.
Saludos. Lilith.