Pastor vasco

Primero que nada debes identificar si se trata de miedo o de defensa territorial. El pastor vasco es un perro sumamente territorial, por lo que invariablemente reaccionará si se siente invadido o amenazado tanto él o sus amos. Si bien es de un carácter alegre y sociable, he tratado con casos así. Verifica si la reacción del perro es en cercanías de tu domicilio, en la vereda o en el jardín del mismo.
La otra alternativa es que se trate de una agresividad de autodefensa provocada por el miedo y creo que es lo más probable.
El problema se genera al final de la llamada "etapa de socialización" del cachorro desde la 7ma hasta la 12va semana de vida, donde debería haber sido "expuesto", una vez vacunado, a la vida cotididana que llevaría de adulto, como por ejemplo pasear por parques, interactuar con otras personas, niños, animales amistosos, autos, etc.
El miedo puede ser hacia objetos inanimados o animados, personas, animales, ruidos, etc. y es por la falta de costumbre hacia ese algo en particular. Si el perro ha tenido la oportunidad de experimentarlo de cachorro no le resultará extraño. Al contrario, si no está habituado y lo experimenta bruscamente por primera vez, le causaría una reacción traumática que provocaría una fobia hacia ese estímulo en particular o cualquiera que se le parezca, reaccionando a la defensiva y con agresión.
El tratamiento adecuado en estos casos indica expornerlo a sus miedos en una forma gradual y constante. Primero, deberás sacarlo más frecuentemente para que se habitúe al "ambiente callejero". Luego, llevarlo a una calle o parque poco transitados, para después gradualmente cambiar a lugares donde hay más cantidad de personas, animales y ruidos. Al primer indicio de agresividad, un pequeño tirón de la correa acompañado de un "NO" firme y seco, alcanzará como llamado de atención. Nunca castigarlo físicamente. Sería interesante y daría buenos resultados que alguien de tu familia que tiene confianza con el perro se acerque a él en bicicleta o corriendo. De esta forma él asociará inmediatamente que no todo el que anda en bicicleta quiere hacerle daño. Otra alternativa es que alguna persona ajena, que NO tiene confianza con el animal le de una golosina o le haga caricias.
No olvides que todo requiere de trabajo, constancia y mucha paciencia, aunque no te desanimes, a los nueve meses es aun un cachorro y el aprendizaje dará resultado efectivo.
Suerte, paciencia y no dudes en consultarme.