Situación insostenible en mi empresa

Trabajo en una pequeña empresa familiar (encima son primos lejanos míos) en la que comencé hace más de 5 años. Me ofrecieron trabajar en su pequeña empresa de distribución de productos gourmet y las condiciones no eran demasiado buenas, ya que su situación era casi de total abandono por haberse ido el anterior responsable, habiendo perdido buena parte de su cartera de clientes. El caso es que yo estaba trabajando en otro sitio y acepté porque me apetecía la idea de cambiar de sector y en el anterior año había estado muy estresado por problemas bipolares. Me ofrecieron un contrato de media jornada con un fijo en nómina y unas comisiones en B. Yo tenía otros ingresos extra y como el sector me gustaba, acepté dando prioridad a estos motivos antes que a los económicos. Conseguí recuperar la cartera de clientes y añadir nuevos, pero el negocio no terminaba de despuntar, ya que los jefes no se decidían a invertir más en el negocio y muchas veces teníamos por ello problemas de stock. Decidido a cambiar de aires ya después de 3 años y con mucha experiencia ganada en administración, compras, ventas, facturación, etc (realmente yo hacía todo excepto la contabilidad, llevada por un externo), me comunicaron su intención de invertir en el sector de la construcción, con un edificio de aparcamientos y locales comerciales como primer proyecto. Me prometieron formación continua (master en prevención de riesgos laborales) y también mejorar mis condiciones económicas. Firmamos un documento de subrogación de contrato, con el cual yo pasaba a cobrar la nómina de la constructora, sin perder los beneficios (comisiones) y antigüedad de la otra empresa. Me centré entonces en todo tipo de gestiones en la constructora, aunque sin dejar de lado las ventas de productos gourmet, las cuales se me siguieron pagando en B. Los problemas han empezado a venir desde finales del año pasado, ya que yo reclamaba nuevas mejoras salariales que se me habían prometido y que en parte habían mejorado, pero no totalmente. Mil excusas me ponían como que yo no tenía cualificación suficiente para exigir más por el momento y que la empresa no estaba atravesando un buen momento... Nuestra temporada alta en el sector gourmet, con la navidad y los regalos de empresa acabó con gran parte de los beneficios invertidos en deudas de la constructora y pagos de cenas sin sentido y otras cosas. No pude cobrar mis comisiones del año 2007 por éste motivo, ya que las empresa-me decían-tenía´en ésos momentos otras prioridades y que yo debía esperar (al igual que las facturas pagadas por mí durante el año a nombre de la empresa). Todo ésto ha derivado en conflictos insalvables y aunque las facturas pagadas por mí ya las he cobrado después de cabrearme mucho, me deben gran parte de las comisiones y la última nómina. Se inventan mil excusas para no pagarme las comisiones y no aguanto más porque encima mi jefa cada vez que puede, descarga sus tensiones contra mí, como si la culpa de todo lo tuviera yo (MOBBING)... Ahora mismo estoy de vacaciones y aprovechando para cambiar de empresa. Mi grado de rabia es tal que consideraría muy perjudicial para mi salud volver a mi empresa. Por favor, digánme si dispongo de algún arma efectiva para plantar cara a ésta situación. Sólo señalar por último, que aunque comencé a trabajar en la constructora en abril del 2006, no fue sino hasta octubre del 2007 que cambiaron en la Seguridad Social mi tipo de jornada (completa realmente, pero media según los papeles) cuando me avisó el gestor laboral de lo grave de la situación.