¿Debo denunciar por insultos y amenazas?

He recibido una llamada bastante fuerte del hermano de mi ex-pareja. Estoy separada desde hace dos años y ha sido un proceso muy largo y duro, en cuyo tiempo mi ex ha estado viviendo en una casa que teníamos comprada a medias y pagando a medias. Yo tuve que irme a casa de mi madre mientras tanto. El caso es que él no podía ni pagar la mitad de la hipoteca y la estoy pagando yo plenamente, pues el banco me reclamaba la totalidad a mí. Al no estar disfrutando la casa, decidí comprar su mitad puesto que al fin y al cabo tenía que pagarla. Con mi abogado preparamos los papeles, firmamos ante notario y a tras ello el individuo se negó a la entrega de llaves porque decía que necesitaba un tiempo para marcharse. Me negué a ello, cambié la cerradura y le comuniqué que cuando quisiera podía venir a recoger sus cosas. Al día siguiente recibo la llamada de marras, en la que se identifican como el hermano de mi ex, y tras numerosos insultos muy fuertes, me amenaza con partirme las piernas y fastidiarme (por decirlo fino)la vida hasta verme desangrarme, pues he dejado a su hermano como a un perro tirado en la calle.
Mi mayor miedo es que tengo un hijo de 5 años con mi ex, cuya custodia es mía, y me asusta que el periodo de régimen de visitas le coman la cabeza o le coaccionen.
No se qué hacer ni de qué serán capaces de hacer.
No he recibido por ahora más llamadas, y de la que he recibido tengo testigos (dos compañeras de trabajo), pues estaba trabajando y tenía puesto un sistema de manos libres.