¿Por qué Hanna Arendt Y Martin Heidegger estuvieron juntos si tenían diferencias políticas?

Existe un libro que aclarará por completo todas tus dudas: 'Hanna Arendt y Martin Heidegger', de Elzbieta Ettinger, editado por Tusquets. Está dedicado por completo a la relación que tuvieron los dos filósofos.
Puedo hacerte un resumen de la historia por lo que más o menos recuerdo. Hanna Arendt estudiaba en la universidad donde Heidegger ya era catedrático o profesor (en cualquier caso ya había escrito Ser y tiempo). Obviamente ella era una alumna brillante, y además era muy atractiva. Así que los dos se enamoraron, o por lo menos iniciaron un affaire sexual. Según el punto de vista de ese libro, en estos primeros años de relación Heidegger no reconocía a Arendt mucho más que su atractivo físico, y ella sentía una admiración desmedida por el maestro. Después ella se va a estudiar a otro sitio, llegan los nazis al poder y Heidegger, que por entonces era el rector de la universidad, da la espalda a Husserl, el que hasta entonces se había considerado discípulo, y ni siquiera va a dar el pésame a su mujer cuando éste muere. También aprueba algunas normas antisemitas en la universidad. El libro sugiere que la verdaderamente nazi era la mujer de Heidegger, y no él mismo, pero eso ya es una cuestión de opiniones. La relación entre Arendt y él se termina, y no vuelven a saber el uno del otro (directamente, se entiende: ambos leen con admiración las obras del otro). Pasados veinte o treinta años (en los cuales, por cierto, Heidegger ya no vuelve a escribir nada parecido a Ser y tiempo, y en cambio Arendt se convierte en una de las filósofas más importantes del momento), Hannah decide perdonarle (los motivos están bastante bien explicados en el libro, donde puedes leer algunas cartas de ella). La relación nunca vuelve a ser la misma, pero de vez en cuando ambos se encuentran en la cabaña donde viven Heidegger y su mujer sus últimos años. Una anécdota curiosa es que cuando ya todo parece haber terminado y la relación seguir un cauce amistoso, el matrimonio Heidegger se ve en ciertos apuros económicos, por lo que decide subastar el manuscrito de Ser y tiempo. La mujer de Martin no tiene una idea más brillante que enviarle una carta a Hannah Arendt para que les aconseje acerca de cómo llevar a cabo la venta, sugiriendo que ella, al ser judía, entenderá de estas cosas económicas... Hannah agarra un cabreo monumental, como es lógico, sin embargo, a la edad en la que están todos ellos, decide no darle más vueltas y ayudarles.