Anónimo
Niños que insultan
Estoy separada, tengo problemas con el menor de 5 años, no me hace caso en nada, y siempre me está insultando, le tengo que decir mil veces vamos al baño, comte toda la comida, etc, siempre diciéndome fea y que la novia de su padre es más guapa, los fines de semana que está con el padre, están todos juntos en la casa porque ella también tiene un niño de 5 años, cuando vuelve de estar con el padre no quiere nada conmigo, yo soy una mujer normal trabajo y creo que lo estoy educando bien (bien no sé, pero el menor tiene todos los caprichos que quiere por parte mía y más, porque todo lo que se me antoja para él se lo compro )No me muestra mucho cariño y mira que yo le dijo siempre que le quiero, pero no sirve de nada me trata super mal y me siento muy mal cuando veo que no me hace caso y me dice que no me quiere. ¿Me puedes dar alguna solución?
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Respuesta de albenda
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Si, Marise, encantada de poderte dar al menos una pauta. Es difícil tarea educar a nuestros hijos, estos no vienen con un manual y cada uno es distinto. Me comentas que es el menor, luego si tienes varios lo sabes por ti misma. Pensamos que educamos a todos por igual, y más o menos puede ser cierto, pero cada hijo no te ha pillado en el mismo momento, ni en cuanto a circunstancias personales, ni emotivamente.
Tu chiquitín, ademas debe adaptarse a otra circunstancia, como es otro hogar cuando se va con su papa y entra en otro ambiente educativo. Esto debe ser complejo también para el, ya que significa un esfuerzo en muchos sentidos por adaptación.
En el caso que me comentas tan claramente se mezclan dos aspectos; de un lado, la irritabilidad que presenta probablemente por adaptación a dos circunstancias distintas, criterios diferentes, otro niño viviendo con su papa de su misma edad, etc... La irascibilidad, la tristeza, los cambios de humor, son reacciones a los cambios. Es su forma de mostrarlo, cada niño lo hace dependiendo de su carácter de una forma u otra.
De otro lado, y sin dudar de tu papel de buena madre que quiere lo mejor para tu hijo, da la impresión de que en tu casa es el niño quien lleva las riendas. Y si primordialmente lo que te preocupa es la reacción que tu hijo tiene contigo, es el punto fuerte. Por lo que comentas, el niño no discrimina que tu eres quien manda en casa y esto es algo que podrías trabajar si quieres cambios a corto plazo en la forma en como actúa tu chico.
Piensa si te ha podido ocurrir por sentirte más débil frente a él, más permisiva sin terminar de adoptar el rol de mama o mejor dicho de una mama que lo consiente. Como se trata de un email, no podemos tratar las conductas de forma detenida, solo a grandes rasgos y es complicado hacer unas pautas generales en unas líneas sin saber casos concretos.
Lo intentare aun así,
- Las muestras de cariño excesivas pueden provocar efectos contrarios. Espera que sea él quien se acerque y las demande. Y dalas cuando se te apetezca pero de forma más controlada. Sobre todo cuando tiene un buen comportamiento.
- Un no es un NO. Cuando castigues a tu hijo con una privación o simplemente hay algo que no deseas que haga, debe quedarle claro que bajo ningún concepto tu vas a dar tu brazo a torcer. Siempre digo que antes de decir un no, os planteéis si lo podéis llevar a cabo. Pues si no es así más vale directamente el permiso, ya que sino indudablemente tu autoridad se ve cuestionada. Por ejemplo, Un niño que llora durante diez minutos por un caramelo recibiendo noes y al cabo de diez minutos se le da un caramelo... 'ha sido premiado por patalear diez minutos'. La próxima vez que desee uno sabe que lo conseguirá de una forma u otra. A no ser que directamente te plantees que un no es u no.
- Si te insulta, no le sigas el juego. Calla mantén una actitud recia. No es la forma en la que tu deseas que te trate, por el contrario premia una sonrisa o una actitud grata. Si persiste en el insulto, sin mediar palabra más que 'a mama no se le habla así', llevalo a otro lugar a su dormitorio mismo y cuando se le pase el mosqueo dale permiso para que salga, no es necesario que cierre la habitación solo es para que se tome un tiempo. Tiempo fuera, le decimos.
No entres en el juego de la otra mama es así o asado... nunca. Es eso un juego que practica porque puede que sin darte cuenta entres en él.
- Cuando venga de estar con su padre, saludale y bésale, pero dale un tiempo de respiro. No le atosigues a preguntas o a besos. Deja que el se acerque a ti cuando haya pasado un tiempo de 'adaptación' a casa.
Educar con amor y disciplina es difícil. Pero ellos demandan normas, las necesitan para sentirse seguros. A veces puede jugar con este aspecto para 'probarte' y ver hasta donde puede tirar contigo una vez a probado en casa de su papa.
De otra parte marise, date un respiro te lo digo con cariño, tu situación no es fácil y educar en ella tampoco, sobre todo cuando afectivamente no te sientes estable y existe esa tentación de 'volcarse' en ternura, sin marcar límites definidos, porque en este momento tal vez tampoco te sientas en situación de ello.
No me hablas de ti, pero entre las soluciones, también esta la de que te marques un tiempo para ti y que tus hijos aprendan a respetarlo, tiempo para leer, dormir una siesta, ir al gimnasio o hacer algo para ti, como pintarte las uñas si te gusta. Y cuando no estén ellos aprovecha para conocer gente nueva o salir a pasear sola, buscar otros refuerzos afectivos nuevos ademas del punto de apoyo que tus hijos signifiquen para ti.
Un abrazo
Albenda
Tu chiquitín, ademas debe adaptarse a otra circunstancia, como es otro hogar cuando se va con su papa y entra en otro ambiente educativo. Esto debe ser complejo también para el, ya que significa un esfuerzo en muchos sentidos por adaptación.
En el caso que me comentas tan claramente se mezclan dos aspectos; de un lado, la irritabilidad que presenta probablemente por adaptación a dos circunstancias distintas, criterios diferentes, otro niño viviendo con su papa de su misma edad, etc... La irascibilidad, la tristeza, los cambios de humor, son reacciones a los cambios. Es su forma de mostrarlo, cada niño lo hace dependiendo de su carácter de una forma u otra.
De otro lado, y sin dudar de tu papel de buena madre que quiere lo mejor para tu hijo, da la impresión de que en tu casa es el niño quien lleva las riendas. Y si primordialmente lo que te preocupa es la reacción que tu hijo tiene contigo, es el punto fuerte. Por lo que comentas, el niño no discrimina que tu eres quien manda en casa y esto es algo que podrías trabajar si quieres cambios a corto plazo en la forma en como actúa tu chico.
Piensa si te ha podido ocurrir por sentirte más débil frente a él, más permisiva sin terminar de adoptar el rol de mama o mejor dicho de una mama que lo consiente. Como se trata de un email, no podemos tratar las conductas de forma detenida, solo a grandes rasgos y es complicado hacer unas pautas generales en unas líneas sin saber casos concretos.
Lo intentare aun así,
- Las muestras de cariño excesivas pueden provocar efectos contrarios. Espera que sea él quien se acerque y las demande. Y dalas cuando se te apetezca pero de forma más controlada. Sobre todo cuando tiene un buen comportamiento.
- Un no es un NO. Cuando castigues a tu hijo con una privación o simplemente hay algo que no deseas que haga, debe quedarle claro que bajo ningún concepto tu vas a dar tu brazo a torcer. Siempre digo que antes de decir un no, os planteéis si lo podéis llevar a cabo. Pues si no es así más vale directamente el permiso, ya que sino indudablemente tu autoridad se ve cuestionada. Por ejemplo, Un niño que llora durante diez minutos por un caramelo recibiendo noes y al cabo de diez minutos se le da un caramelo... 'ha sido premiado por patalear diez minutos'. La próxima vez que desee uno sabe que lo conseguirá de una forma u otra. A no ser que directamente te plantees que un no es u no.
- Si te insulta, no le sigas el juego. Calla mantén una actitud recia. No es la forma en la que tu deseas que te trate, por el contrario premia una sonrisa o una actitud grata. Si persiste en el insulto, sin mediar palabra más que 'a mama no se le habla así', llevalo a otro lugar a su dormitorio mismo y cuando se le pase el mosqueo dale permiso para que salga, no es necesario que cierre la habitación solo es para que se tome un tiempo. Tiempo fuera, le decimos.
No entres en el juego de la otra mama es así o asado... nunca. Es eso un juego que practica porque puede que sin darte cuenta entres en él.
- Cuando venga de estar con su padre, saludale y bésale, pero dale un tiempo de respiro. No le atosigues a preguntas o a besos. Deja que el se acerque a ti cuando haya pasado un tiempo de 'adaptación' a casa.
Educar con amor y disciplina es difícil. Pero ellos demandan normas, las necesitan para sentirse seguros. A veces puede jugar con este aspecto para 'probarte' y ver hasta donde puede tirar contigo una vez a probado en casa de su papa.
De otra parte marise, date un respiro te lo digo con cariño, tu situación no es fácil y educar en ella tampoco, sobre todo cuando afectivamente no te sientes estable y existe esa tentación de 'volcarse' en ternura, sin marcar límites definidos, porque en este momento tal vez tampoco te sientas en situación de ello.
No me hablas de ti, pero entre las soluciones, también esta la de que te marques un tiempo para ti y que tus hijos aprendan a respetarlo, tiempo para leer, dormir una siesta, ir al gimnasio o hacer algo para ti, como pintarte las uñas si te gusta. Y cuando no estén ellos aprovecha para conocer gente nueva o salir a pasear sola, buscar otros refuerzos afectivos nuevos ademas del punto de apoyo que tus hijos signifiquen para ti.
Un abrazo
Albenda
Respuesta de eloisa callejon fernandez
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Todavía es muy pequeño, no debe entender bien la situación de estar los fines de semana en otra casa, con otra esposa y " un hermano". Aunque no lo sea, el puede tener celos del que el hijo de tu pareja se queda ahí y él tiene que irse, volver a tu casa y quedarse sin alguien con quien jugar.
Obviamente te quiere, pero tal vez tu hijo sienta que tu eres la culpable de que él tenga que volver y que el otro niño se quede con su papá y su mamá. Y él este sin su padre, porque está con el otro niño.
Parece un traba lenguas, pero algo de eso le debe pasar por la cabecita.
Entonces manifiesta su rabia, no haciendo caso diciendo que no te quiere e insultándote.
Supongo que ya lo habrás hecho, pero tienes que explicarle que su padre lo quiere muchísimo, al igual que tu, pero que el papa vive en otra casa con otra señora que casualmente tiene un niño como él. Pero que su papá lo quiere muchísimo más a el.
Con respecto a los insultos, no debes permitir ninguno, le dices que si te insulta tendrá un castigo, y lo tienes que cumplir, por ej: no ver el programa de tv que le gusta, o ir a su habitación a pensar 5 minutos y luego volver y pedirte perdón o irse a la cama más temprano o sin postre, lo que se te ocurra, pero con firmeza, cada vez que te insulta o te dice fea, cumple el castigo.
Cada vez que te diga, que no te quiere, tu dile, pero yo si, te quiero mucho, así que te he ganado y te ríes. Porque te está desafiando, entonces tu, no entres en ese juego.
Con respecto a la comida, tu le sieves la comida en el plato, si no la quiere y hace una escena, pues le dices que es lo que hay y punto, que si no come eso, se quedará con hambre. Puede ser que dos o tres días se quede con un poco de hambre, pero luego comerá lo que tu le sirvas.
Y con el baño igual, a la hora de bañarse, lo bañas, aunque llore, grite y patalee.
No debes permitir caprichos y rabietas, porque si está toda la semana contigo, tiene que hacerte caso, y además porque a los niños los límites los ayudan a crecer sanos y fuertes emocionalmente. Los límites son fundamentales en la estrucuración de la personalidad.
Así como le pones límites, también lo tienes que gratificar y felicitar cuando hace algo bien. Por ej: a los niños les encanta que les den pequeñas tareas domésticas, porque se sienten importantes. Ayudar a poner la mesa, a recogerla, ayudar a juntar la ropa para lavar, doblar la ropa para planchar, hacer su cama. Todo eso lo puedes hacer junto a él diciéndole " que bien, estoy orgullosa de ti"o "que suerte que estás aquí conmigo"
O "como me ayudas, sin ti me cansaría mucho más" o "que bien nos apañamos juntos, verdad?"
Educar a un niño no es fácil, debes encontrar el delicado equilibrio entre ponerle límites y gratificarlo. No se puede estar siempre gratificando, pues los niños se vuelven pequeños tiranitos, ni tampoco, poner limites exagerados, pues sería traumático. Los límitesdeben ser firmes y acordes a la edad.
Y por último mamá, tu hijo te quiere, no lo dudes, pero está en una etapa de celos con el otro niño, ya se le pasará.
En todo caso habla con tu ex marido y pídele que cuando esté en su casa, el padre se preocupe en demostrarle mucho cariño.
Un abrazo
Obviamente te quiere, pero tal vez tu hijo sienta que tu eres la culpable de que él tenga que volver y que el otro niño se quede con su papá y su mamá. Y él este sin su padre, porque está con el otro niño.
Parece un traba lenguas, pero algo de eso le debe pasar por la cabecita.
Entonces manifiesta su rabia, no haciendo caso diciendo que no te quiere e insultándote.
Supongo que ya lo habrás hecho, pero tienes que explicarle que su padre lo quiere muchísimo, al igual que tu, pero que el papa vive en otra casa con otra señora que casualmente tiene un niño como él. Pero que su papá lo quiere muchísimo más a el.
Con respecto a los insultos, no debes permitir ninguno, le dices que si te insulta tendrá un castigo, y lo tienes que cumplir, por ej: no ver el programa de tv que le gusta, o ir a su habitación a pensar 5 minutos y luego volver y pedirte perdón o irse a la cama más temprano o sin postre, lo que se te ocurra, pero con firmeza, cada vez que te insulta o te dice fea, cumple el castigo.
Cada vez que te diga, que no te quiere, tu dile, pero yo si, te quiero mucho, así que te he ganado y te ríes. Porque te está desafiando, entonces tu, no entres en ese juego.
Con respecto a la comida, tu le sieves la comida en el plato, si no la quiere y hace una escena, pues le dices que es lo que hay y punto, que si no come eso, se quedará con hambre. Puede ser que dos o tres días se quede con un poco de hambre, pero luego comerá lo que tu le sirvas.
Y con el baño igual, a la hora de bañarse, lo bañas, aunque llore, grite y patalee.
No debes permitir caprichos y rabietas, porque si está toda la semana contigo, tiene que hacerte caso, y además porque a los niños los límites los ayudan a crecer sanos y fuertes emocionalmente. Los límites son fundamentales en la estrucuración de la personalidad.
Así como le pones límites, también lo tienes que gratificar y felicitar cuando hace algo bien. Por ej: a los niños les encanta que les den pequeñas tareas domésticas, porque se sienten importantes. Ayudar a poner la mesa, a recogerla, ayudar a juntar la ropa para lavar, doblar la ropa para planchar, hacer su cama. Todo eso lo puedes hacer junto a él diciéndole " que bien, estoy orgullosa de ti"o "que suerte que estás aquí conmigo"
O "como me ayudas, sin ti me cansaría mucho más" o "que bien nos apañamos juntos, verdad?"
Educar a un niño no es fácil, debes encontrar el delicado equilibrio entre ponerle límites y gratificarlo. No se puede estar siempre gratificando, pues los niños se vuelven pequeños tiranitos, ni tampoco, poner limites exagerados, pues sería traumático. Los límitesdeben ser firmes y acordes a la edad.
Y por último mamá, tu hijo te quiere, no lo dudes, pero está en una etapa de celos con el otro niño, ya se le pasará.
En todo caso habla con tu ex marido y pídele que cuando esté en su casa, el padre se preocupe en demostrarle mucho cariño.
Un abrazo
Con su padre no me llevo bien, y el niño lo sabe como puedo afrontar este tema.
Perdona, no entiendo bien tu pregunta.
¿Te refieres a cómo afrontar el problema con el padre de tu hijo?
¿Te refieres a cómo afrontar el problema con el padre de tu hijo?
Si, es que no llevamos muy mal y estamos en juicio y él cada vez que viene a recoger al menor siempre está picándome y alterandome y empieza las discusiones y el menor lo ve. Entonces el menor sabe, porque el padre se lo ha dicho que yo no quiero que entre en la casa.
Si el caso es así, mejor que no lo llames, pues daría lugar a más discusiones. Tu sabes que lo ideal es que no discutan delante del niño, y que ninguno le hable mal del otro.
Por lo menos tu que vives con el niño, no le hables mal del padre.
Pero no es necesario hablar con tu ex, le puedes enviar un mail o una carta cunado va el niño. Te sugiero que no hagas reproches, simplemente pon algo como lo siguiente:
"Mira, me parece que nuestro hijo está un poquito celoso, del hijo de tu pareja, te pido que por favor lo mimes mucho y le digas que lo quieres.
Me está costando un poco, pues está pasando un período de cierta rebeldía, por eso te pido ayuda. Si notas algo más en él, te pido que me lo comentes"
Gracias
<div>Es una carta, pidiendole algo, pero no entrando en conflictos</div>
Es mi sugerencia, luego tu sabrás evaluar, si es conveniente o no.
De todos modos, trata de cumplir con los otros consejos que te di.
Si no tienes más preguntas.
Por lo menos tu que vives con el niño, no le hables mal del padre.
Pero no es necesario hablar con tu ex, le puedes enviar un mail o una carta cunado va el niño. Te sugiero que no hagas reproches, simplemente pon algo como lo siguiente:
"Mira, me parece que nuestro hijo está un poquito celoso, del hijo de tu pareja, te pido que por favor lo mimes mucho y le digas que lo quieres.
Me está costando un poco, pues está pasando un período de cierta rebeldía, por eso te pido ayuda. Si notas algo más en él, te pido que me lo comentes"
Gracias
<div>Es una carta, pidiendole algo, pero no entrando en conflictos</div>
Es mi sugerencia, luego tu sabrás evaluar, si es conveniente o no.
De todos modos, trata de cumplir con los otros consejos que te di.
Si no tienes más preguntas.