Depresión en el embarazo

Buenos días:
Mi consulta es la siguiente:
Estoy embarazada de 6 semanas y estoy sufriendo depresión en el embarazo. Ha sido un embarazo buscado pero sólo lo he tenido que buscar un mes, vino a la primera. Nunca he tenido instinto maternal, pero siempre he pensado que eso venía una vez tuvieses a tu hijo y empezaras tu vida con él. Al igual que nunca me han gustado excesivamente los niños (aunque siempre supe que quería ser madre, que el mío me encantaría) siempre he sentido adoración por los animales... Quizás más que adoración "obsesión".
Te tenido durante 4 años un gato enfermo, supe que estaba enfermo hace solo 1 año, y mi vida desde entonces la he dedicado a intentar alargar su vida y sobre todo su calidad de vida. Vivía prácticamente para él. Cogí tal dependencia que mi única meta era encontrar medicinas nuevas, tratamientos, no salía por quedarme con él, estaba feliz cuando él estaba bien y mal cuando él estaba mal...
Tuvo una recaída muy importante en Octubre y conseguimos que saliera de ella... Estábamos tan contentos mi pareja y yo que decidimos buscar ya el niño, ya sería una felicidad completa. En Diciembre tuvo una recaída sin salido y tuve que dormirlo para siempre...
Mientras tuvo esa recaída (duró una semana) me enteré que estaba embarazada ("tan rapido")... Mientras veía que el pobre sufría yo no dormía, no comía, tenía ataque de ansiedad continuos, los nervios a flor de piel... Y encima me sentía muy culpable porque podía hacerle daño al bebé... No hay que decir que en ese momento odié estar embarazada... Empecé el embarazo sin tener ilusión.
Cuando todo terminó incluso sentí alivio, ya había hecho todo lo posible y durante dos o tres días me encontré bien y deseando de dar la noticia... Pero ya le digo... Sólo duró esa alegría dos o tres días...
Ahora estoy de 6 semanas y sigo sin tener mucha ilusión... Sólo hago acordarme de mi gato... Lo echo tanto de menos y además se me han quedado las imágenes de su sufrimiento en la cabeza y no se van. He sufrido de depresión en algunas ocasiones y he tenido que estar medicada... Ahora estoy igual... No tengo ilusión por nada, no me quiero arreglar, no quiero ducharme, solo tengo ganas de llorar, no quiero salir a la calle, me siento inútil, sin autoestima, no quiero hablar con nadie del embarazo...
Necesito ayuda porque de verdad que lo estoy pasando muy, muy mal.
Muchas gracias de antemano y enhorabuena por esta labor que hacéis donde se nos ayuda tanto.
Un saludo y Feliz Año.

6 respuestas

Respuesta
1
Evidentemente tu gato no era un simple gato, para ti. Pusiste mucho en él (de positivo: amor y de negativo: dependencia) y ahora vives las consecuencias. Estás elaborando el duelo por la pérdida. Ya te pasará (de hecho son muy frecuentes y pasajeros los episodios de depresión durante el embaraza y en el post-parto) a no ser que entorpezcas el proceso, con miedos y actitudes que has de examinar cuidadosamente, con el fin de evitar que crezcan y se vuelvan demasiado poderosos.
Quizás sea una gran suerte que hayas conocido y experimentado una parte de tu naturaleza (la que ama y depende en exceso) por medio de la historia con tu gato. Ello podría ser la gran ocasión ya que te puede ayudar a no repetir el problema con tu hijo. Si aprendes de lo vivido, puedes aligerar mucho el peso de la relación entre tú y tu hijo.
Los sentimientos de culpa que viviste, el sentirte responsable por el destino del gato, este vivir para él, son fenómenos que hablan acerca de unas ideas que tienes sobre que significa amar, y qué significa ser responsable que habrías de reexaminar, para ello o bien te esfuerzas en leer buenos libros sobre estos temas o acudes a un psicólogo que te guíe en este esfuerzo.
Saludos
José M. Moreno
www.jmmorenoalavedra.com
Muchas gracias por su respuesta.
¿Podría recomendarme algún libro que me pueda ayudar para ello?
He estado en muchos psicólogos pero aún no he dado con ninguno que me haya podido ayudar de verdad.
Un saludo y mil gracias de nuevo.
Cada vez que alguien me pide algún libro, me pone en apuros por que la verdad es que no creo que uno o dos libros te saquen del problema a ti ni a nadie.
Vivimos en una época en la que nos hemos acostumbrado a exigir respuestas fáciles, cómodas y rápidas a los problemas de la vida y la industria cultural saca partido de esta costumbre. En cualquier librería encontrarás miles de libros de autoayuda, de manuales de "Como conseguir...", libros tipo recetas de cocina. Uno quiere la técnica, uno quiere que le digan qué debe hacer para conseguir tal cosa. Y el tema la mayoría de las veces no va por ahí. No creas que este comentario se dirige especialmente a ti, es un comentario general que se dirige a actitudes que TODOS tenemos en más o menos medida y que pueden funcionar en algunos problemas, pero en otros no.
Por ejemplo si te preocupa como educar a tu hijo, o si te preocupa que esta depresión que experimentas sea algo más que un duelo por la pérdida del gato, honestamente no sé que libro recomendarte. Otra cosa es que hablemos de autores y sus obras. Esto es diferente pues ya no hablamos de uno o dos libros sino de autores (por lo menos los que a mi me apasionan) a los que has de leer en su obra y son obras que expresan el esfuerzo de una vida entera. En estas lides, sí, te puedo recomendar a C. G. Jung, a Freud, a J. Hillman, a Nietszche, a W. Giegerich, etc.
Leer y profundizar en estos autores, no es tan fácil pero si haces el esfuerzo, te garantizo una extraordinaria recompensa... :-)
Saludos
J. M. Moreno
www.jmmorenoalavedra.com
Respuesta
1
En algún momento durante todo este proceso seguro que has estado mejor y peor, y a ver si acierto, cuando mejor estabas era cuando pensabas en como ayudar a tu gato y ponías todas tus energías en ello. es así o no?. A menudo cuando luchamos por las cosas conseguimos que nuestra atención se centre solo en ese objetivo, nuestros recursos atencionales que son limitados se centran en la acción, y la acción es enemiga de la reflexión. Cuando tuviste que volver a tu realidad fue cuando te deprimiste, cuando pudiste comenzar a emplear tus recursos atencionales en ti misma. El problema no es, a ver si me explico bien, la depresión en si misma, sino el centrarte en sus síntomas destendiendo el resto de lo que te rodea, es en ese momento cuando se produce un proceso de autocentración que desemboca en un círculo vicioso difícil de soltar. Te centras en ti misma y desatiendes al resto del mundo que te rodea, y como lo que te rodea es lo que potencialmente podría ayudarte a salir de esto solo dejas espacio para pensar en ti misma y tus desgracias y el mundo que te rodea solo lo ves a través de la lente de tu ensimismamiento y por tanto lo ves negro. No se trata de que tengas que hacer cosas porque te apetece, eso es una falacia, las cosas se hacen porque se hacen y no podemos esperar a tener ganas para hacerlas porque justamente no haciédolas es como apetece menos aún hacerlas. Ahora tienes una obligación y vas a tener que cumplirla. Es como cuando tienes un problema estomacal, al principio no puedes comer de todo en cantidades grandes, sino que tienes que empezar gradualmente a introducir alimentos en pocas cantidades y según que alimentos. La acción en una depresión sigue el mismo principio, poco a poco puedes ir introduciendo pequeñas actividades diarias, dé es que menos te cuesten (no las que más te gustan sino las que menos te disgustan´viendo como estás ahora), la más digeribles por tanto. Una idea que se me ocurre a mi, pero podría ser más fácil quizá hacer otras, es que comiences a ir a clases de preparación para la maternidad, son de pocas horas, haces ejercicio, hablas con otras madres que tendrán los mismos miedos que tu estás sufriendo, y te sentirás mejor al ver que eres capaz de hacer cosas incluso sin ganas.
Lo peor delas depresiones es que buscamos razones para ellas, el por que de las mismas, cuando en realidad cualquier razón es válida, sí, hay muchas razones para deprimirse en esta vida, todos no morimos, enfermamos, nuestra pareja no es el príncipe azul, envejecemos, nuestros seres queridos se mueren..., pero también podríamos pensar que dentro de lo que hay siempre podemos vivir mejor o peor, incluso cuando estamos deprimidos. No busques el por que porque las razones pueden ser infinitas e igual acabas justificando el estar deprimida sin necesidad de hacerlo. Las depresiones vienen y van, se curan solas a medida que vamos aprendiendo a vivir y conseguimos olvidarnos del por que estábamos deprimidos.
Respuesta
1
A veces el embarazo es una situación difícil, depende mucho de cada mujer y de las circunstancias, además te sientes mal porque estos sentimientos no los puedes decir claramente porque la gente espera que una embarazada que este siempre feliz y deseosa de tener a su hijo en brazos. EL hecho de que no te gusten los niños en general no quiere decir que no te vaya a gustar el tuyo( te gustará y mucho ya lo verás) Hay que tener en cuenta dos cosas, primero lo situación con tu gato te ha afectado mucho. Poco a poco irás superándolo pero no puedes obsesionarte y estar todo el día pensando en tu gato, cuando te vengan estos pensamientos a la cabeza debes eliminarlo, busca una actividad que te impida pensar en esto, un libro, una película, un paseo, cocinar... lo que quieras algo que te distraiga y no te haga pensar constantemente en él. Lo segundo, son las hormonas, cuando estamos embarazadas tenemos una jauría de hormonas en nuestro cuerpo volviéndonos locas y tan pronto podemos llorar como reír, esto se irá suavizando.
No te sientas mal por lo que sientes ahora, pero piensa que parte no es real porque es culpa de las hormonas. Piensa que estar pensando en el sufrimiento de tu gato no te ayuda ni ayuda a tu gatito, ya no puedes hacer nada y no pasa nada porque si estaba sufriendo es mejor así, ¿no crees? ¿Tu piensas que él te quería? ¿Y crees que le gustaría verte tan triste?
Intenta entretenerte todo lo que puedas, no estés sola, si puedes compartir estos sentimientos con alguien mejor, tal vez lo puedas hablarf con tu pareja. Si ves que continuas igual o peor tendrás que recibir ayuda.
Si te puedo ayudar aquí estoy. La gente dice que un embarazo es maravilloso... puede que si... mi experiencia personal es que no, lo maravilloso son los hijos y no lo sabes hasta que los tienes en brazos y te preguntas como puedes quererlo tanto.
Un abrazo
Respuesta
1
Definitivamente lo que describes acerca de lo que sufriste con tu mascota ha condicionado que hayas caído en depresión, aunado con que el embarazo es una época llena de cambios hormonales y si es el primero, también es un impacto emocional muy grande.
Lo que estas viviendo por tu gato es un duelo, es lógico, esperable y normal, cuando ya no es normal es cuando se alarga por mucho tiempo, o empieza a poner en riesgo tu vida.
Es normal que en el primer embarazo "no te caiga el veinte" porque es algo totalmente nuevo, y no se "siente" nada en el abdomen, todo sigue como antes, eso no tiene nada de extraño o de malo, no por eso vas a ser una mala madre, pero como que todo se te juntó y estas sufriendo al doble o al triple en cuanto a emociones.
Es muy importante que acudas con un médico psiquiatra, que te valore y cheque tus síntomas de la depresión, hay algunos medicamentos que pueden darse en mujeres embarazadas sin que le hagan daño a tu bebé, además de que acudir a terapia puede ayudarte mucho con el duelo de tu mascota.
Acude cuanto antes a valorarte, para que puedas vivir el resto de tu embarazo de la mejor manera posible.
Respuesta
1
Apreciada (xxxxxx):
¡Ánimo!. ¡Tu puedes curarte fácilmente!.
Tienes un problema de amor hacia ti misma, de autoestima. Ya tenemos una ventaja. Lo hemos detectado, y ahora será muy fácil que lo llegues a superar.
Por tanto, tenemos que aprender a amarnos a nosotros mismos.
Lo primero es NO CULPABILIZARTE DE TU PASADO. El pasado ya se fue, ya no existe. Da gracias a Dios de haberlo vivido y de poder sacar experiencias de él para AHORA. Si tu pasado fue duro, ahora puedes ser más fuerte y tener una experiencia valiosísima.
No te preocupes por EL FUTURO. Vive al día. Haz las cosas con tu mejor intención. Si no salen como tu quisieras, acéptalo. No tienes tú la culpa. Las personas reaccionamos a veces mal. Tú sigue haciendo el bien.
Aprende a CONTROLAR TU PENSAMIENTO. Cuando percibas que te estás diciendo a ti misma: "Fracasarás" "Eres una inútil" y cosas por el estilo, piensa. Estoy haciéndolo mal. Lo que sí es ahora un fracaso es estar pensando eso. Piensa en algo que te guste: una canción, una puesta de sol, una sonrisa que te dio una persona, el interés de que seas feliz del que esto te escribe, o otra cosa parecida.
Acéptate como eres. Guapa o fea, lista tonta, rica o pobre. Mira lo que tienes, no lo que te falta cuando te comparas con los demás. Puedes andar, reír, escribir, ver con tus ojos, comer y beber cuando quieres. Piensa que hay muchos seres humanos en el mundo que no tienen esas cosas que tu sí tienes, y se esfuerzan por sobrevivir y ser felices.
Intenta no ponerte demasiadas obligaciones. Haz cosas durante el día, pero bien hechas, perfectamente hechas. Cada cosa que hagas piensa que es como si no existiera otra cosa para hacer en el mundo. Disfruta de lo que haces. Esa es la clave.
Otra cosa, no te compares con nadie. Vive TU VIDA. No quieras parecerte ni tomar modelo de lo que le pasa a este o al otro. Tú eres único e irrepetible y tienes que aprender a darte satisfacción, a conocerte y a respetarte a ti misma. Si los demás tienen problemas, tú procura ser consciente que su tristeza te puede arrastrar a ti.
Para ello, recobra energía disfrutando de tu vida, respirando, paseando al aire libre en la montaña o junto el mar.
Intenta no observarte demasiado. Si te tienes como protagonista "estelar" de tu vida no podrás dedicar suficientemente a los demás (eso me pasó a mí también durante algunos años en que viví solo).
La mejor solución para el problema que notas ahora es LLENAR TU VIDA DE HECHOS DE AMOR Y DE SERVICIO PARA LOS DEMÁS.
Sí, hay muchas personas que pasan a diario en tu camino que necesitan de ti, de una sonrisa, de que les escuches, de que valores sus trabajos o esfuerzos. ¿Qué te impide esforzarte para hacerles la vida más agradable? Así, cuando llegue al final del día te vendrán pensamientos de esas personas contentas, llenas de energía que les has comunicado tú, y verás que eso es muy contagioso (pues te lo pasas muy bien). Estarás pensando qué y cómo actuar mañana, la semana que viene, etc.
Tienes que vivir una vida que te satisfaga a ti. No dejes pasar los días uno detrás de otro sin ningún sentido. Cuenta los días de tu vida por las buenas obras que has hecho en cada uno de ellos. Si algún día no has hecho nada positivo por los demás, considéralo un día perdido.
En cuanto a las pastillas, yo no creo mucho en ellas. La fuerza está en ti, en tu mente. Conozco a personas que tomaban seis pastillas diarias contra diversas dolencias de su espíritu que se han recuperado tomando una infusión de manzanilla por las mañanas y una infusión de cola de caballo con miel por las noches.
Hazte un plan de vida, un horario, y cúmplelo, por ejemplo:
7. 00 Levantarse y aseo
7. 45 Lectura, meditación o paseo
8. 15 Desayuno
9 a 13 trabajo
13 a 14 almuerzo
14 a 18 trabajo
18 a 20 tiempo libre
20 a 21 cena
21 a 22 Formación, lectura
22 a 23 aseo.
23 Descanso.
No quieras hacer muchas cosas. Ves haciendo las que puedas, pero cuando cojas una cosa entre manos intenta hacerla perfectamente, como si fuera la única cosa que pudieras hacer en tu vida. Sé útil a los demás no te encierres en ti misma, ayuda a la gente que te rodea en tu familia, en tu trabajo en tus ratos con amigos. Hazles la vida sencilla, que no se tengan que preocupar por ti. Que después de estar contigo "noten" que han recibido energía, que se sienten mejor. Esa tendría que ser la motivación principal de tu vida, lo demás es relativo y menos importante.
Procura también alimentarte correctamente, tomar alimentos sanos y que sabes que te convienen, cuida a tu cuerpo y a tu persona. Respeta las necesidades del sueño. No tomes drogas, ni fumes ni alcohol ni nada de eso. Procura aprender a respirar bien, capta la energía de lo que te rodea, deja que te lleguen los rayos del sol, las partículas de aire que te dan la vida que necesitas para respirar. Haz buenas obras de las que tu sabes que puedes hacer. Si algo sale mal, ten paciencia contigo misma, no te martirices, amate a ti misma.
Respuesta
1
Lo primero indicarte que padeces una depresión clara y que debes tratar por tu bien y el del niño, el fármaco más indicado es la fluoxetina, a dosis habituales.
Cuando avance el embarazo te encontraras mucho mejor y seras, una muy buena madre.
Un saludo muy cordial y feliz 2011

Añade tu respuesta

Haz clic para o

Más respuestas relacionadas