¿Tengo problemas en el sexo?
ace poco empezamos a tener relaciones sexuales. (Yo nunca había tenido sexo antes cosa de crianza y era algo que esperaría al matrimonio )... Pero no se que hacer o que me pase durante el acto, ha sido solo 4 veces que hemos tenido relaciones... Bueno, en otras veces no llegamos a intentar la penetración, sabe todo inicia bien e incluso lubrico bien(no se mucho respecto al tema, espero pueda explicarme), pero las 4 veces que hemos tenido la penetración batallamos mucho, y creo que solo una vez logre sentir placer así como cuando lo hacemos oral o cuando el me toca con su dedo o bien cuando me penetra con este, batallamos para lograr la posición para que se haga bien la penetración, pero ademas la erección de el no dura mucho, sabe creo dura más cuando se lo ago oral, he oído que muchas el problema pasa por causa de la mujer, ¿así qué decidí preguntar para que me ayuden a saber que que puedo acer?... Si me siento frustrada por que como le decía solo una vez sentí más placer, el me pregunta si siento venirme durante el acto y... Le digo que pues siento rico ... Aunque pues no se que se siente realmente (comenta mi pareja como ganas de ir al baño)... Pero no no siento más... Le repito siento más cuando incluso me toca con el dedo pero en la parte de arriba no tanto cuando penetra el dedo... No se que acer.. Como decía a el lo amo mucho y la verdad si me gustaría experimentar más.. Pero también lo que me importa y busco durante.. Es que el sienta placer e incluso le pregunto como siente más.
No se si esto sea problemas conmigo por que yo no tenia planeado acer esto si no asta el matrimonio... Aun que si me dan deseos y empezamos pero cuando ya estamos no siento o no se si lo que siento es lo que debe sentires... Ay estoy echa bolas... Pero mi pareja me importa mucho y pido su ayuda para lograr más placer para los 2...
No crea que aveces no tengo ganas... Claro que tengo muchos deseos .. Pero cuando ya intentamos la penetración y logramos pues no siento tantas cosas...
3 Respuestas
Respecto a tu pregunta
He leído lo que expones es muy extenso lo que preguntas así que lo dividiré en secciones
En forma general después ya siendo ams específicos ok
Es cierto que Influye mucho la educación y la creencias o religión que impide tener abierta esa mentalidad fe"culpabilidad" y sentir ese deseo de algo malo el placer -
Aunque el placer es algo bello y hermoso que se debe de experimentar.
Aclaro que para para poder tener una buena relación es primero que haya una buena realcion verbal es decir que haya esa comunicación como pareja y nunaca se debe de obligar a tener relaciones por mero "sexo" si no disfrutar del momento.
Y es muy válido eso de esperar hasta el matrimonio y es muy apreciado aunque en la actualidad esta practica se ha ido perdiendo.
Primero lo que debes de hacer es palticar con tu novio al decior hablar me refiero de una foram abierta co pareja decir lo que les gusta y lo que no explorar su cuerpo
Además las partes eroticas sensitivas no nada más es el coito de echo todo el cuerpo la piel es sensitivo y sexuual muchas mujeres pueden tener un orgasmo sin ser penetradas.
Aqui priemro qeu bada es quitarte esa etiqueta de culpabilidad qeu eres tu la que esat mal por no provocar ese palcer a tu pareja eso es ser egoista ya que el palcer es de ambos y lamejor fiorma de disfrutar de esto es satisfacerse ambos y no oslo uno si no termina esa relacion en insatisfaccion por una parte y easa relacion termina por monotonia.
Y se cabaab esa relación.
Quizás com es la tu primera experiencia sexual es muy recomendable que antes de que intente n la penetración es muy recomendable los juegso sexuales el jeugo presexual para poder llegar al clímax.
Y eso debe de saber tu pareja aunque si ambso es su primera ves lo irán descubriendo poco apoco ademas tu frustración no tien findamento es normal que te sientas así.
Ya que yu cuerpo necesita responde mediante estímulos es decir uds son más sensitivas más de oiod es decir románticas com decirles comsa linda al oído unam usica relajaora bonita, una cena unso detalles besos pequeños, caricias poco apoco por todo el cuerpo ir besando cada parte de tu vcuerpo cada zzona ir sintiendo que esl que te gusta o dte desagarda con tu pareja una ves descubierto esa sxonas solo jhay que trabajarlas
Sentiras com responde tucuerpo en esa szonas si al besar o o rozar tu cuerpo sinte esa senzacion de escalofrios ocn senzaciones agradables va por buen camino.
Las orejas la nuca los hombros, la espalda beso la lengua todo son estímulos los senos saberlos estimualar pueden provocar mujchas senszaxciones agradables.
Hasta que comeinzes a sentir esa segregación humedad vaginal "lubricación que es un indicio en el que tu cuerpo eta liusto par ala penetración u no sea dolorosa.
En el próxima respuetsta te enviare una nota el cual podrás realizar las técnicas para poder llegar realizar lo que quieres un saludo!
Desde el punto de vista físico, estos se pueden clasificar en función de si son cambios genitales o extragenitales, es decir, del resto del cuerpo.
Los cambios o respuestas más psicológicas, son más difíciles de clasificar en tanto que son vividas de forma personal por cada ser humano en base a sus experiencias, vivencias y aprendizajes a lo largo de la vida.
Curiosamente y muy al contrario de lo que se piensa tanto en el hombre como en la mujer, ambas respuestas se parecen, compartiendo más semejanzas que diferencias.
La respuesta sexual humana se podría dividir, para ser estudiada con más facilidad, en tres o cuatro fases dependiendo de los autores. La clasificación más conocida es la realizada por Master & Johnson, que diferencian:
Fase de excitación
Fase de meseta.
Fase de orgasmo.
Fase de resolución.
La principal diferencia entre la respuesta sexual femenina y la masculina es que en la primera, la fase de meseta o mantenimiento de la excitación es más larga y duradera, de forma que el acercamiento al orgasmo se da más lenta y paulatinamente.
Por otro lado, una vez que se llega a la fase más avanzada de la excitación o lo que para otros sería la primera fase del orgasmo, es importante que no se detenga la estimulación si se pretende llegar al orgasmo.
En el caso de la respuesta sexual masculina, una vez que se alcanza un determinado punto de excitación, conocido como el momento de eyaculación inminente, no hay vuelta atrás y aún en el caso de detenerse la estimulación, el paso al orgasmo acompañado de la eyaculación es inevitable
Respuesta genital masculina
Durante la fase de excitación, se da la erección, respuesta refleja que consiste en un aumento de volumen y tensión del pene debido a una mayor afluencia sanguínea en la zona. Así, mientras que en estado de reposo la sangre entra por las arterias y continúa su flujo por la salida venosa en el pene, durante la excitación esta salida se cierra de forma que la sangre se retiene en los genitales.
Cuando la salida venosa de abre, con la relajación muscular que prosigue al orgasmo, se vuelve al estado de reposo o detumescencia del pene desapareciendo la erección.
Durante esta fase, además se tensa el escroto, los testículos ascienden y aumentan algo de volumen debido a la congestión.
Es también en un momento más avanzado de esta etapa cuando las glándulas de Cowper segregan el denominado líquido preseminal, cuya función es la de limpiar el conducto urinario de restos de semen y orina, por donde posteriormente se expulsará el semen durante la eyaculación. También responde a una función lubricante.
Aún cuando la cantidad segregada es de apenas unas gotas, este líquido contiene espermatozoides que aún en bajas concentraciones, no descarta un posible embarazo.
La fase de meseta consistirá en el mantenimiento de la excitación, y por lo tanto de la obtención de la tensión sexual necesaria para llegar al orgasmo manteniéndose las reacciones antes descritas.
Posteriormente se dará la fase del orgasmo, durante la cual habrá eyaculación aunque no necesariamente ambas respuestas van juntas.
La eyaculación consiste en la expulsión del semen por la uretra, gracias a las contracciones pélvicas que se suceden durante el orgasmo.
El orgasmo, tanto en el hombre como en la mujer, es la descarga mediante una serie de contracciones más o menos regulares, de la tensión o acumulación sanguínea alcanzada durante la excitación y meseta. Esta respuesta va acompañada de una sensación física de placer intenso, vivida psicológicamente de forma distinta por cada persona.
El semen está compuesto por espermatozoides que se forman en los testículos y del conjunto de líquidos segregados por las glándulas anejas (próstata, vesículas seminales y glándulas de Cowper).
Los espermatozoides, una vez producidos por los testículos gracias a la acción de las hormonas sexuales masculinas (andrógenos y testosterona), ascienden al epidídimo donde terminan de formarse. De ahí prosiguen su camino hacia el conducto deferente, haciendo parada en la vesículas seminales y posteriormente en la próstata, donde se mezclarán con líquidos lubricantes y con los nutrientes necesarios para su supervivencia, finalizando este recorrido con la eyaculación.
Por último, durante la fase de resolución, con la relajación o detumescencia del pene, descenderá la erección paulatinamente. Tras esta fase, no podrá haber erección durtante un tiempo, que variará en función de la edad y las características físicas del varón. Pasado este tiempo puede volver a haber erección acompañada nuevamente de orgasmo aunque la eyaculación será menos abundante o inexistente.
Respuesta genital femenina
Durante la fase de excitación en la mujer, van a darse también una serie de cambios, si bien no tan evidentes como en el hombre, no dejan de ser notables.
Una de las primeras manifestaciones de la excitación es la lubricación vaginal que aparece aproximadamente a los treinta segundos de la estimulación sexual. Esta lubricación consiste en un transudado de las paredes de la vagina que hará más fácil la penetración en caso de darse.
De nuevo como ocurría en la respuesta genital masculina, la acumulación de riego sanguíneo en la zona de los genitales, provoca además de la lubricación, la hinchazón o tumefacción del clítoris, junto a la dilatación y el engrosamiento de las paredes de la vagina.
Estas respuestas se acompañan de una elevación y expansión del útero a la vez que los labios mayores se aíslan y elevan apartándose de la entrada de la vagina.
Durante la fase de meseta o mantenimiento de la excitación, se da lo que se conoce como la retracción del clítoris, que se debe realmente a la hinchazón del capuchón del clítoris y de los labios menores más que un retroceso real de éste. Mientra tanto se produce también la secreción mucosa de las glándulas de Bartholino.
Si la estimulación es continua y persistente, se acumulará la tensión genital provocada por el aflujo de sangre durante la excitación, dándose la descarga en que consiste el orgasmo acomapañada de una serie de contracciones que la facilitan.
Éstas se producen tanto en las paredes de la vagina como en el útero y músculos pélvicos ya desde la fase más avanzada de la excitación, dándose con más intensidad y en menor intervalo de tiempo durante el orgasmo.
En la mujer, se conocen varios tipos de orgasmo:
Orgasmo vaginal.
Orgasmo clitoral.
Orgasmo mixto.
El primero consiste en realidad en una estimulación indirecta del clítoris, por lo que se conoce como el mecanismo prepucial - glandal que se debe al roce durante los movimientos de la penetración de los extremos de los labios menores y del capuchón del clítoris sobre éste. Por otro lado, la vagina carece de terminaciones nerviosas y por lo tanto de sensibilidad, excepto en el primer tercio a continuación de la entrada de la vagina.
El orgasmo clitoral responde a una estimulación directa del clítoris, mientras que el mixto se conoce como el resultante de la estimulación vaginal y del clítoris.
No obstante, no se puede hablar de un orgasmo vaginal como tal, por la influencia indirecta de la estimulación del clítoris.
Respuesta extragenital
Respuesta masculina
Erección de los pezones.
Rubor sexual.
Tensión y contracciones musculares.
Aumento de la tasa respiratoria.
Aumento de la presión sanguínea.
Contracciones en el esfínter del recto.
Respuesta feminina
Aumento de los pechos por vasocongestión y erección de los pezones.
Rubor sexual (sobre todo en la piel del pecho y vientre).
Tensión y contracciones musculares.
Aumento de la tasa respiratoria
Aumento de la presión sanguínea.
Contracciones en el esfínter del recto.
? No tiene porqué. Puedes sentir un auténtico deseo pero no llegar a tener una buena lubricación. Normalmente, cuando una mujer siente deseo, debe observar naturalmente una lubricación vaginal. Pero a veces, la conexión no se hace entre el deseo y la excitación física.
Se trata exactamente del mismo problema que la pérdida de erección en el hombre. Se puede producir por una razón física (toma de medicamentos, diabetes, desequilibrio hormonal durante la lactancia o después de un parto, menopausia) o por una razón física como la ansiedad, depresión, problemas.
La ausencia de lubricación vaginal significa sencillamente que uno de los elementos de la cadena que comienza con el deseo para llegar a la excitación física no funciona perfectamente. ¡Eso no significa que el deseo sexual sea demasiado intelectual, ilusorio, o simulado!
Excitación sexual y deseo sexual
?
El deseo sexual es un sentimiento, una emoción. Se desarrolla en el cerebro. La excitación, por su parte, es el efecto físico que produce el deseo sexual en el cuerpo. Es la concretización práctica del deseo. La erección masculina y la lubricación femenina también son signos de excitación sexual. Por supuesto el deseo precede la excitación, es el que conlleva la excitación. Cuando la conexión no se hace bien, se puede sentir un deseo que no se transforma en excitación.
Estrógenos, las hormonas del deseo femenino
?
Si, por supuesto. Los estrógenos, las hormonas secretadas en mayor cantidad antes de la ovulación, son muy propicias al deseo. Diversos estudios han demostrado que lo aumentan. Una mujer siente más deseo durante sus momentos de fertilidad, como si la naturaleza hubiera previsto darle ganas de hacer el amor para que se reproduzca. La testosterona, la hormona masculina, también está presente en menor cantidad en la circulación sanguínea femenina. Esta pequeña cantidad es sin embargo muy útil y muy eficaz para estimular el deseo.
Cuando esta hormona es muy baja, el deseo también disminuye. Es lo que se produce cuando algunas mujeres toman una píldora a base de acetato de ciproterona, una píldora contra el acné, que también es una píldora antitestosterona. Existe una hormona llamada prolactina, que es un anti-deseo sexual. Cuando las tasas son elevadas (al principio de la lactancia, por ejemplo, de forma anormal cuando se toman ciertos medicamentos) el deseo se desmorona. El deseo femenino no es por tanto únicamente psicológico, también depende de diversas hormonas.
Lamentablemente muchos hombres no le dan suficiente importancia a la lubricación vaginal, que es el primer signo de excitación femenina, y deberían saber que es igual de indispensable que la erección del pene para lograr una buena y sobre todo placentera penetración .
Cuando hay excitación la lubricación aparece incluso antes de que se hinchen el clítoris y los labios vaginales. En la zona vaginal hay humedad pero no tiene nada que ver con la lubricación vaginal que es mucho más abundante. Sabías que una mujer excitada puede mojarse (lubricar vaginalmente) entre 3 y 10 segundos, tiempo récord, ¿No crees?
Basta que la bese en la boca el hombre que le apasiona para estar empapada, a veces con sólo tocarla, y para qué te cuento cuando roza sus senos, o su Monte de Venus o también al ver una escena erótica, o tener una fantasía cachonda, etc, etc, . Biológicamente la lubricación es consecuencia del incremento del flujo sanguíneo que rodea a la vagina durante la excitación sexual. Por eso el clítoris entra en erección y los labios menores vaginales cambian su tamaño y color. En fin, ´la madre naturaleza sabe que hace'.
Sin embargo, hay un sin fin de situaciones por las cuales la excitación puede decaer y por ende también la lubricación, desde percibir un mal olor ahí donde te conté cuando estás en pleno faje, hasta un trato frío e indiferente de parte del amante . Ello a pesar de la reacción automática e involuntaria de la vagina de lubricar cuando es penetrada. También hay una relación directa entre la distensión de la vagina y una mayor lubricación, por eso es que puede ser más estimulante un pene más ancho, siempre y cuando se cumplan los otros requisitos para erotizar a la mujer. Luego entonces, los hombres en todo caso deberían preocuparse más por lo ancho que por lo largo de sus penes.
No creas que la lubricación sólo sucede cuando la mujer está despierta, mientras duerme y sueña aunque no haya sueños eróticos, la vagina palpita y se humedece también.
Tarea de la semana
Acércate cada vez más a la zona sexual de tu mujer, partiendo de los muslos, del vientre, de las nalgas... Recuerda que el lugar donde el placer es " exquisito " para una fémina, es siempre el clítoris, ya que ahí se encuentran numerosas terminaciones nerviosas. La vulva también es sensible a la excitación, se hincha bajo el efecto del deseo y es sensible a las caricias, y a los besos. Sé generoso y quédate en esa zona todo el tiempo que ella lo requiera, sin prisas, gózandolo plenamente tú también.
Cortesia de EROTIKA
Bueno espero te ayude estos articulso leelos con calma y si tuiens ams preguntas no dudes en hacerlo estoypara servirte
Suerte!
1) Relax:
Esta es la base de la técnica toda, es sobre lo que se construye toda la habilidad de controlar el momento de la eyaculación y la capacidad de tener orgasmos internos. Con relax nos referimos a tener el poder de encontrar la calma y el relax en el momento de mayor excitación.
Hacer el amor en forma tántrica suele ser algo tranquilo, lento, que lleva un tiempo, donde cada parte de la pareja debe tomarse su tiempo para realizar el acto.
Y, en este tipo de acto sexual, es mucho más fácil relajarse y pensar, que si estamos haciendo el amor de forma salvaje y veloz. Ya el hecho de ir más lento hace que estemos más relajados.
2) Conciencia:
Estar relajados nos permite abrirnos, aumentar nuestra conciencia, elevar nuestros sentidos, abrir la mente al universo y enfocarla en todo lo que en él ocurre. Y, especialmente, enfocar nuestra mente y nuestra conciencia, mucho más amplia ahora, en el momento de placer por el que estamos atravesando. Si podemos apreciar lo bien que nos sentimos y lo placentero que es lo que estamos haciendo, más posibilidades hay de que podamos bajar el ritmo, relajarnos e ir más despacio.
3) Medición:
El siguiente paso, una vez que hemos logrado estar abiertos y con todos nuestros sentidos alerta y aumentados en sus capacidades, es monitorear y medir nuestro nivel de excitación.
Sí, como hemos logrado estar en armonía con nuestros sentidos y sensaciones, ahora deberíamos ser capaces de mantener un estricto control sobre nuestra excitación (control entendido como la capacidad de hacer un seguimiento, para saber dónde se encuentra nuestro nivel de excitación).
Una vez que sabemos donde estamos parados con respecto a nuestra excitación, podemos pasar al otro tipo de "control", aquel que nos da la posibilidad de dirigir nuestra excitación, de reducirla y aumentarla, de modificarla para aumentar el disfrute, tanto nuestro como el de nuestra pareja. Las cosas que nos excitan y que nos hacen perder la excitación no son siempre las mismas, cambian con el tiempo e incluso pueden cambiar con nuestro estado de ánimo o con nuestro humor, por lo cual pueden ser diferentes de un día para el otro. Y no son siempre obvias.
La idea de este paso es conocernos a nosotros mismos, ser capaces de leernos y saber exactamente dónde estamos, para poder ejercer un control y modificar la excitación de la forma en que lo deseemos. A medida que practiquemos, seremos capaces de ejercer más y más control sobre esta medición, hasta dominarla casi completamente.
4) Ritmo:
Cuando hablamos de propio ritmo, nos referimos a ser capaces de dominar la forma en que nos movemos, el "ritmo" que llevamos durante el acto sexual, para reducir su velocidad.
Si nos concentramos en el momento, en las sensaciones que estamos sintiendo durante el acto sexual, no en llegar al orgasmo o a la eyaculación, lo más seguro es que mantendremos un ritmo más sosegado, menos veloz y violento, disfrutando el proceso más que el final.
Siempre debemos recordar que hacer el amor no es correr una carrera, que no hay plazos de entrega ni un tiempo o un record para batir, sino que a lo que apuntamos es a conseguir un momento placentero y de conexión con nuestra pareja o con nosotros mismos. Debemos bajar la velocidad, tomarnos nuestro tiempo, no apurarnos, llevarlo con calma, disfrutar realmente de lo que estamos haciendo, dejando el final para el momento en que se haga necesario o en que el proceso verdaderamente este llegando a su fin.
Llevar el ritmo correcto es una parte vital en el control.
La palabra clave en mantener el ritmo es "cima". ¿A qué nos referimos con "cima"? La cima seria un momento de gran excitación, el de mayor excitación, el cual una vez superado lleva al orgasmo.
Para lograr mantener una aproximación adecuada a las "cimás", lo que debemos hacer es ajustar los estímulos que nos llevan al momento de placer, de forma que podamos manejarlos y llegar cerca de la cima una y otra vez, sin superarla nunca, y volviendo a bajar en el momento en que estemos a punto de hacerlo. Con esto lograremos crear momentos de placer, subir y bajar en la escala, sin nunca eyacular realmente.
Básicamente, para decirlo de una forma muy gráfica, es caminar por la cornisa entre recibir tanto placer como sea posible de la situación y absorberlo, sin nunca pasarnos tanto que se produzca la eyaculación. Nunca debemos superar la "cima", porque esto significa llegar demasiado lejos en la cantidad de placer que podemos recibir, y por lo tanto se producirá un orgasmo con eyaculación, justamente lo que estábamos tratando de evitar.
La clave de esta técnica es lograr caminar correctamente esta cornisa de la que estamos hablando.
5) Circulación de Energía:
En este ítem nos referimos a circular la energía a través del organismo, alejándola de los genitales y del miembro masculino en los momentos apropiados, como ya hemos dicho anteriormente.
La idea es, en vez de simplemente apuntar a conseguir un orgasmo tan grande como sea posible, tan rápidamente como sea posible, manejar la energía, para poder repartirla por todo nuestro cuerpo, permitiendo que todo nuestro organismo se eleve a niveles más y más altos de placer con cada orgasmo interno que tengamos.
Además, como la energía no se desperdicia siendo lanzada del organismo en la violenta forma que es la eyaculación, sino que se la pone en movimiento en forma interna una y otra vez, siempre dentro nuestro, la resistencia que podamos tener durante el acto sexual aumenta a niveles casi infinitos. Por esto es que esta parte es de una importancia vital.
Cuanto más excitación se vaya construyendo, más energía deberíamos ser capaces de redirigir hacia las otras regiones de nuestro cuerpo para su reutilización.
Las sensaciones que este proceso trae acarreadas son, como mínimo, de un nivel de placer mucho mayor que el orgasmo normal.
6) Montando la Hola:
A este proceso que hemos estado describiendo de aumento del placer a través de los múltiples orgasmos internos se lo llama montar la hola y es el ultimo paso a explicar aquí y, por supuesto, el más importante y la técnica más importante que podemos explicar.
Montar la hola es una explicación perfecta de cómo vamos progresando en la escala de obtención de placer, aumentándolo constantemente a través de las subidas y bajadas, dejándonos llevar por este proceso.
Este aumento escalonado del placer no es experimentado, lamentablemente, por aquellos que llegan velozmente a la eyaculación. Ellos nunca desarrollan su habilidad para absorber más y más placer, por recibir cada vez más placer antes de terminar. Pero cuando uno lo logra, las sensaciones de la hola son de un éxtasis total, que no puede ser comparado de ninguna forma con el orgasmo común que todos experimentamos.
Esta serie de pasos y momentos en la técnica son una explicación simplificada pero correcta y completa de cómo se produce este proceso en escala de creación de energía sexual y placer, de la forma en que éste aumenta como si de una rampa se tratase.
Práctica
Lo cierto es que, una vez experimentado este tipo de orgasmo, la desesperación masculina por llegar a la eyaculación y simplemente derramar tanto semen como sea posible se nos volverá incomprensible. O, mejor dicho, la comprenderemos, pero no habrá forma de que la compartamos y hasta nos parecerá un tanto triste lo limitado que esta perspectiva es, con todas las otras posibilidades que se abren y de las que la mayor parte de los hombres no conoce absolutamente nada.
Pero hasta aquí todo ha sido teórico y, lamentablemente, con leer unas cuantas líneas no alcanza para ser un experto en ninguna disciplina. La practica es imprescindible, ya que no hay mejor forma de conocer que a través de la propia experiencia (el que en este caso la practica pueda llegar a ser algo tan placentero, es simplemente un valor agregado).
La práctica es necesaria, como en todo ejercicio relacionado con el Tantra, para poder cambiar nuestros patrones de energía, nuestros hábitos y, principalmente, nuestra mentalidad con respecto a los fenómenos.
El Tantra es no sólo una forma de conseguir placer, una filosofía que ve el sexo y el placer como un medio de celebración, sino una forma de hacer el amor totalmente distinta a la que es habitual en las sociedades occidentales, mucho más amplia y espiritual, mucho más cercana a la meditación que a un simple acto animal guiado por los instintos y nada más.
El Ejercicio
Como la mayor parte de los ejercicios relacionados con el Tantra, éste tiene como base la respiración sexual, una practica básica de toda la filosofía tántrica. Nos referimos a la respiración pausada, rítmica, relajada y con un patrón determinado y que es el primer paso a la hora de empezar cualquier practica tántrica.
Esta respiración debe realizarse desde el fondo del estomago, con toda la capacidad de toma de aire siendo utilizada, y con una exhalación muy lenta y tranquila, siempre en una calma total y con todos los músculos del cuerpo tan relajados como sea posible.
En este caso en particular, en el de este ejercicio, ésta respiración está acompañada de los sonidos y movimientos que normalmente realizamos durante el clímax del acto sexual, en el momento en que llegamos al orgasmo. Si logramos aprender esta respiración y hacer un análisis, entenderemos realmente porque la respiración es una parte tan importante y remarcada en la practica del sexo tántrico.
Una vez hecha esa aclaración, empecemos a ver el ejercicio propiamente dicho, que consta de una serie de paso descriptos individualmente, simples y fáciles de seguir.
Esta práctica debe ser hecha con una pareja, no en soledad, y la idea es utilizar la respiración sexual a la que hacíamos referencia anteriormente para alejar la excitación y la energía de nuestras zonas más erógenas y repartirla por todo el cuerpo.
Haci que paracticalo!
Si llevas apracticaa esto consegiras muchooo con tu pareja y tu relacion
Cuidate y suerte!
muchas gracias nuevamente... EXCELENTE!
:) :) :)
- Compartir respuesta
Lo siguiente es que: es muy normal, natural, tener problemas para penetrar en los primeros intentos, la practica es la que irá mejorando todo, solo la práctica.
Al principio el será muy rápido o muy lento, igualmente tu seras muy lenta o muy rápida al principio, en la medida que practiquen se irán ajustando uno al otro.
Aparte de todo eso, lo natural, también tenemos obstáculos para una buena sesión de sexo, como las preocupaciones y angustias. Si estas demasiado preocupada por algo la actividad sexual decae o se retrase etc, y lo mismo le pasa a el. Una forma de preocupación es estar pendiente de que no sientes o sientes, que el siente bien o mal, etc. No hay que estar pensando demasiado en esas cosas, porque se convierten en pequeñas angustias que dañan el éxito de meter y disfrutar.
Lo principal en meter es disfrutar ...
- Compartir respuesta
En un momento pensé que era yo la que había escrito esto hace 3 años. Te pasó igual que mi. ¿Mira no te culpes por todo esto la causa o motivo de esto es porque los dos son inexpertos pero ya se irán descubriendo poco a poco lo mismo que te pregunta tu esposo a mi me lo preguntaba el mío y yo contestaba igual que tu pero en mi mente decía esto es hacer el amor? Si todos hablaban de hacer el amor y decían que era lo más placentero que existe en la vida,, ¿qué está pasando? Esa era mi pregunta pero como yo decidí formar un hogar yo era virgen y no sabía que era lo que tenía que hacer o cómo actuar. No más de lo que si sabía era que dolía pero no imaginé que tanto😅
Y luego yo decía si yo hubiera sabido que así era esto. Mi marido ya había tenido relaciones con alguien más pero dudo que haya tenido alguna más antes o después de esa... Estoy segura que fue la primera, eramos inexpertos el menos que yo. Pero sabes cual era el problema seguramente y muy afirmado... El problema es que no eramos tan abiertos no conversábamos acerca de que nos gustaba y que no en la cama; y es una de las cosas importantes me parece que tienes que dejar esa pena a un lado igual que tu esposo. Tienes soltarte más en la cama desata esa fiera que llevas dentro. Dale esa sorpresa a tu esposo. Ahh otra cosa puedes hacer que tu esposo dure más haciéndolo primero oral y luego la penetración. Dile que no termine porque quieres que te penetre. Saludos y besos😘🤗
- Compartir respuesta