Me llama la atención que dices que tu hermano es gay pero que no es como los otros que están todo el tiempo pensando en sexo. Me das a entender que piensas que tu hermano es gay de nacimiento y los otros por ser pervertidos “se hicieron”.
Yo pienso que puede darse por varias razones:
- La 1ra es que uno nace con esa inclinación sexual, de hecho una vez vi un documental que justamente, trataba el tema de dos gemelos idénticos, uno de los hermanos era hetero y el otro gay. En este programa se buscaba determinar, desde el vientre de la madre, como uno puede llegar a ser gay.
- 2do puede darse a raíz de un trauma en su niñez temprana (abuso, maltrato o algún comportamiento de los allegados que, desconociendo que hacían mal, pusieron en práctica alguna conducta que produjo un bloqueo psíquico en el niño o niña).
- 3ro la promiscuidad o lujuria, la cual puede desencadenar que uno esté (de manera constante) “excitado mentalmente” y lo haga susceptible a probar otros tipos de relaciones.
No creo que sea correcto decir que uno “se haga” gay (es decir, que “elige ser”). Me parece una total ignorancia y estupidez que alguien diga eso. Estoy seguro que muchos chicos/cas sienten que está mal y no quieren serlo. No quieren ser discriminados, no quieren “ser pecadores”.
Ahora, yendo al sexo. El hablar de sexo y practicarlo no es algo exclusivo de los gay. Es bien sabido que el hombre es más promiscuo que la mujer (o por lo menos se nota más). También se habla que los gay son más promiscuos… tomando lo anterior y sumado al “sentido de rebeldía” (que muchos gay tienen) consciente o inconsciente por atropellar al mundo que busca reprimirlos, pues es obvio que sean así. Ellos sienten que “ejercen su libertad”.
Aclaro, no todos son iguales. Está la gente decente y la que no, sin importar su sexo o inclinación. Se puede ser gay, tener un buen corazón, buenos deseos y no ser promiscuo. No hay que meter a todos en la misma bolsa.
Muchas veces una persona termina teniendo determinada conducta para poder encajar, sentirse normal, a gusto consigo mismo o para no sentirse solo/a. Las influencias externas pueden acondicionar a los seres humanos al igual que las malas influencias.