¿Diferencia entre el voto en blanco y el nulo?

El sistema electoral es el sistema por el cual los votos se traducen en escaños. Existen diversos sistemas electorales, pero todos ellos tienen, entre otras cosas, una fórmula electoral como uno de sus elementos.

Existen también muchos tipos fórmulas electorales (y no existe "la mejor" de ellas), pero en el caso de España (me imagino que preguntas por las elecciones de mañana) existe un umbral electoral del 3% en las elecciones generales y del 5% en las municipales (en las autonómicas cada comunidad autónoma tiene la suya, pero por lo general son 3% o 5%). Esto significa que, en el caso de las generales, por ejemplo, una candidatura necesita llegar al 3% de los votos obtenidos en su provincia para entrar en el cómputo de escaños, es decir, para que se le aplique la fórmula, que en España es la del sistema D'Hondt.

Entonces, ¿qué pasa cuando votas nulo o blanco? La principal diferencia es que el voto blanco cuenta como parte de los votos que establecen la barrera electoral (como los votos normales hacia los partidos, ambos son votos válidos); mientras que el voto nulo no se cuenta, es decir, tú has ido a votar y consta oficialmente como tal porque los de la mesa electoral te han apuntado en la lista, pero en la práctica es como si no hubieras ido, pues tu voto no se contabilizará para el proceso de asignación de escaños a través de la fórmula electoral, pero tampoco para la barrera electoral.

Antes de continuar me parece importante aclarar que los votos en blanco son los que dentro del sobre no tienen nada o tienen una papeleta en blanco (en algunos casos te pueden poner expresamente una papeleta con la opción de votar en blanco). Los votos nulos, en cambio, son aquellos en los que dentro del sobre tienen: 1- más de una papeleta; 2- cualquier cosa que no sea una papeleta en blanco o de un partido (en las elecciones pasadas la gente ponía rodajas de chorizo como forma de protesta); o 3- una papeleta modificada (escrita o rota), aunque sea de algún partido.

Ahora vamos a algo un poco más técnico. ¿Qué efectos tiene el voto en blanco en los resultados? Ya hemos dicho que en España existen estas barreras del 3% y el 5%, ahí es donde está el truco. Lo que hace el voto en blanco es aumentar el número de votos (pero evidentemente no de escaños), por lo que esto significa que en valores absolutos la barrera electoral asciende y dificulta la entrada a partidos pequeños. Los votos nulos, como ya hemos dicho, no se cuentan para esta barrera. Si dicha barrera no existiera, no creo que tuviera ningún efecto significativo en los resultados respecto el sistema D’Hondt (existen otros en los que sí). Además, como los votos en blanco no computan como candidatura, no se les asignan escaños, y los escaños de las candidaturas pequeñas que no han podido entrar irían destinados a otras candidaturas con más votos.

Por eso, en España existe el Movimiento Ciudadano por el Voto en Blanco Computable, que reivindica que se computen los votos en blanco como una candidatura más. Esto se traduciría en el parlamento como escaños vacíos, sin representante. Por el momento, esta función la hace el partido Escaños en Blanco, cuyos representantes no toman posesión del cargo y dejan el escaño vacío (en caso de obtenerlo, claro), por supuesto renunciando también a cualquier gasto que provenga de las arcas públicas.

Después de tantas cosas extrañas, acabaré con lo más ameno: la interpretación de cada voto. Ambos votos, nulo y blanco, se interpretan como inconformidad o protesta. La diferencia es que, debido al efecto que tiene el voto en blanco por causa de la barrera electora, mucha gente en España opta por el voto nulo y critica el blanco como si se tratara de un voto de cariz “apático” o “indiferente”. El voto nulo se considera más gamberro, y podría ser utilizado por aquellas personas que no sólo están disconformes con las candidaturas, sino con el propio sistema político, e incluso con el propio Estado, y que si no fuesen por esta opción no irían a votar; por lo tanto podría interpretarse como una especie de “voto anarquista” o muy crítico con el Estado (aún así, no conozco anarquistas que vayan a votar, aunque sea nulo, pues siempre han tenido como tradición la llamada abstención activa o ideológica).