Al igual que ocurrió con los clientes de Popular que pasan a serlo de Banco Santander, los clientes de Banco Mare Nostrum (BMN) serán absorbidos por Bankia. La fusión de Bankia y BMN tiene una serie de consecuentas prácticas para los pequeños ahorradores, aquellos que tuvieran su nómina domiciliada en BMN o una cuenta o depósitos, y para los hipotecados. Bankia ha informado de que la entidad tiene previsto completar en la primera mitad de 2018 la integración de BMN, cuya fusión por absorción anunció hoy antes de la apertura del mercado.
Una de las consecuencias de la absorción de BMN por parte de Bankia es el cambio del número que identifica cualquier cuenta bancaria, que se conoce como IBAN. Esta modificación permitirá la integración en los sistemas del Bankia y tan solo constituye una gestión administrativa, que tendrá que ser comunicada a cada usuario sin que implique ningún coste.
En principio, Bankia se debería encargar de reconducir a ese nuevo número de cuenta todos los pagos y recibos domiciliados que tuviera el cliente. Sin embargo, es recomendable controlar que el cambio se ha realizado adecuadamente y facilitar el IBAN a posibles clientes o proveedores para que no se produzca ningún problema en el pago de facturas.
En caso de que Bankia decida ofrecer nuevas condiciones a los clientes con cuentas, las principales alternativas serían la Cuenta ON (cuenta corriente) y el plan “Por ser tú” para clientes con nómina, dos ofertas con una ventajosa política de comisiones.
Aunque Bankia no se ha pronunciado al respecto, la integración también podría suponer el cierre de parte de las oficinas de BMN, sobre todo en las zonas en las que la entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri tiene más peso. En el caso de que un cliente se viera afectado por el cierre de una sucursal, Bankia tendría que realizar todas las gestiones que esto conlleve e informar al usuario de cuál será su nueva oficina de referencia.
La integración de BMN en Bankia podría llevar consigo la desaparición de algunos productos de ahorro o cambios en algunas de sus condiciones.
En cuanto a la protección de los ahorros, el Fondo de Garantía de Depósitos ofrece un respaldo de hasta 100.000 euros por entidad y por titular para todos aquellos consumidores que mantengan su dinero en cuentas o depósitos a plazo fijo. Por tanto, hasta ahora, si un consumidor tenía parte de sus ahorros en BMN y otra parte en Bankia, contaba con una doble protección: 200.000 euros de respaldo.
Con la fusión de ambos bancos, la cosa cambia: al pasar a convertirse en un único banco, la protección se reduce a 100.000 euros, algo que debe ser tenido en cuenta por aquellos ahorradores que mantengan un saldo superior en la entidad.
Para los clientes con un préstamo o una hipoteca pendiente, la absorción de BMN no supone ningún problema. Simplemente tendrán que seguir abonando su deuda aunque, a partir de ahora, se la pagarán a Bakia.