¿Tenemos qué de pagar un poder especial firmado ante un abogado y un notario que fue por nada?
Hemos rápidamente informado el bufete del abogado que hemos cambio de idea, que no compraríamos el apartamento,¿también hemos pedido la anulación de una cita por la obtención del N.I.E. Se puede considerar eso más una llamada con la agencia inmobiliaria como un trabajo que vale 150 euros?
¿Por lo se podría que la inutilidad del poder implica automáticamente su extinción o no existe un ley por este asunto?
Podemos añadir que la factura recibida por e-mail no es detallada: honorarios 150 euros, es todo.