Sin saber qué separación hay entre viguetas, tendrías seguramente que reforzar la estructura para evitar las tradicionales fisuras y deformaciones, y sin saber aún el cálculo que habría que realizar, recomendable duplicar el número de viguetas. Antes del uso del hormigón todos los forjados de vivienda se hacían de madera, y muchas construcciones han llegado sin problemas hasta nuestros días, por lo que no es necesario atar estructuralmente con hormigón o armadura metálica los muros.
Además, si se hace un buen forjado de madera: estructura, tabla, aislante, rastrel y tabla, se reducen los gastos, y el “espesor” del forjado. No habría que poner baldosa, y si se pone hay que tener cuidado en que el mortero no contacte con la madera ya que se pudre. En ese caso habría que incluir una capa de arena y sobre ella poner baldosa de barro de pequeño formato que se adapta bien a posibles deformaciones.
Si se tiene claro donde irán los tabiques, reforzar la estructura en esas zonas, y utilizar pladur ya que es más ligero que el ladrillo.
Antes de intervenir tienes que contactar con algún arquitecto de la zona, ya que es un proyecto estructural.