Los seres vivos estamos hechos de compuestos de carbono que podemos describir como reducidos (con mucho hidrógeno) y el carbono disponible en un planeta como el nuestro era originalmente, inicialmente, sólo carbono oxidado (dióxido de carbono). Para reducir el carbono hay varias alternativas, y la de las plantas (y otros organismos fotosintetizadores, pero no todos) es la fotosíntesis oxigénica, que produce oxígeno. Es así porque además de energía, que se recibe como luz, se requiere hidrógeno, y en este tipo de fotosíntesis se saca del agua (H2O), rompiendo los enlaces que lo unen al oxígeno. Queda así oxígeno que se libera como oxígeno molecular (O2) y podemos decir que es un subproducto o ¿por qué no? Un residuo no aprovechado por el proceso, como las sustancias de las heces, que son esencialmente lo no aprovechado de los alimentos. Hasta aquí respuesta afirmativa. Pero las plantas son aerobias, sus células además de plastos tienen mitocondrias, que también evolucionaron de bacterias, que realizan un proceso opuesto al de la fotosíntesis, la respiración celular; de hecho fotosíntesis y respiración se resumen por una misma ecuación química con el sentido cambiado. En este segundo papel el oxígeno es un ingrediente necesario, un reaccionante, no un producto desechado o descartado, y la respuesta sería: no, el oxígeno no es «caca» para las plantas, aunque «sí lo es» para la fotosíntesis.