Estoy obligada a abrir al antenista de la comunidad si mi seguro de hogar ya ha verificado que mi instalación está bien hecha.
La semana pasada recibo una llamada inquisitoria del administrador indicando que es "urgente" entrar en mi vivienda. Pensé que se trataba de una rotura de cañería, inundación, incendio... Finalmente se trataba de que un vecino que recibe la señal de la antena débil y tiene interferencias. Llamé a mi seguro de hogar enseguida y ya ha revisado el cableado de antena de mi casa, verificó que mi instalación está bien hecha, no he de cambiar nada. Pero sí es cierto que yo recibo señal débil y hay 3 canales ( canales que no se suelen ver mucho, no son los principales) que presentan de vez en cuando interferencias por lo que si yo recibo la señal débil entiendo que la derivo débil. Sólo es un vecino el que está quejándose. Pero el antenista tenía claro que el problema venía de arriba, que era necesario revisar la antena, el amplificador, además es una zona con muchas antenas de teléfono, quizá medir la señal en las viviendas de arriba. Me dejó claro que el problema era de la comunidad. Aunque para ni para el resto de vecinos ni para mí es un asunto urgente (varios de los que están arriba también reciben la señal débil, pero en ese momento cambian de canal y la señal vuelve después)... En fin, yo por la llamada del administrador entendí que era muy importante descartar que el problema viniera de mi casa por lo que llamé al seguro enseguida con el fin de colaborar y sí era necesario cambiar alguna pieza pues sin problema... Pero el caso es que hoy después de explicarle todo, hasta tengo un informe del antenista que confirma que mi cableado está bien que es un problema de comunidad etc; Le he facilitado incluso la máquina que utilizaron para medir la entrada y salida de la señal de antena... Me manda un correo electrónico diciendo que sí o sí hay que entrar en mi casa otra vez. Me he quedado bastante sorprendida con su actitud tan imperativa es más sin contar conmigo ha fijado la hora con el antenista que trabaja para él. Lo cierto, es que mi horario es muy apretado en estos momentos y yo no puedo estar en casa a la hora que su antenista puede. Me está estresando mucho. Es más, me pregunto si es estrictamente necesario que se entre en mi hogar de nuevo. Antes de hacerme sentir que la responsabilidad era mía quizá él tenía que haber investigado un poco más y ver que era un asunto de comunidad. La verdad, es que trabajo todo el día y no puedo pedir permiso otra vez y el problema no viene de mi hogar. ¿Estoy obligada a abrir la puerta? No me gusta decir no, pero tampoco es justo que él gestione tan mal las cosas y nos meta en compromiso a los demás de este modo. ¿Qué puede pasarme si me niego a abrir la puerta si ya tengo un certificado de hace días que demuestra que el problema no viene de mi casa?