Es normal preocuparse cuando tu gato no parece estar del todo bien tras una cirugía, especialmente si hay síntomas como vómito o letargo. Te explico algunos puntos importantes que debes considerar:
1. El vómito verdoso
El líquido verdoso podría ser bilis, que a veces los gatos vomitan cuando tienen el estómago vacío durante mucho tiempo. Sin embargo, también podría ser una señal de algo más serio, como una reacción a los medicamentos postoperatorios o una infección interna.
2. Hinchazón de la cicatriz
Aunque el veterinario ya revisó la cicatriz y te indicó medicamentos, la hinchazón podría ser una señal de infección o inflamación persistente. Asegúrate de que la zona no esté roja, caliente o supurando, lo cual sería motivo para contactar al veterinario de inmediato.
3. Letargo y falta de apetito
Es normal que tu gato esté algo menos activo tras la cirugía, pero si duerme mucho más de lo habitual, no come o no bebe agua, esto no es normal. Los gatos suelen recuperarse rápidamente tras ser castrados, así que estos síntomas podrían indicar que algo no está bien.
4. Recomendación
Si tu gato lleva ya varias horas sin comer, vomitó bilis y está más letárgico de lo normal, te recomendaría contactar al veterinario lo antes posible. Podría necesitar que lo evalúen para descartar una infección, complicación con los puntos, o algún problema con los medicamentos.
Mientras tanto, asegúrate de que tenga acceso a agua fresca y un lugar tranquilo donde descansar. Observa si hay más vómitos o cualquier cambio en su comportamiento, como dificultad para orinar o defecar, lo cual también sería una señal de alerta.
Si necesitas más información sobre los vómitos en los gatos, aquí tienes un recurso útil: vómitos en los gatos.