¿Cómo reclamar una noticia falsa?
Hoy, al leer las noticias, me he despertado con la sorpresa de que han hablado de un suceso que conozco de cerca. Al parecer, la periodista de turno(que tiene la poca vergüenza de firmar con nombre y apellido) se debió beber un par de vinos antes de redactar el artículo porque el 90% de lo que comenta es rotundamente falso; da datos falsos e incluso nombres propios . ¿Sería posible de alguna forma poder demandar a esa periodista? ¿Cómo se hace eso? ¿Cómo se puede mentir en un medio de comunicacion con total impunidad? ¿No deberían contrastar las informaciones? Hasta SÁLVAME es más riguroso con esas cosas. Además, mirando por internet, veo no es la primera queja que recibe esta "periolista".
¿Me puede decir alguien cómo proceder?
2 Respuestas
Hay que distinguir dos supuestos, a) Que esa noticia falsa le perjudique a usted. b) Que no le afecte personalmente. En el primer caso tendría usted derecho a instar una reclamacion por los daños y perjuicios que la haya ocasionado esa falsedad. En el segundo caso solo le queda denunciar ante el propio medio de comunicación y en las redes sociales, esa falsedad. En este enlace tiene información que le puede ser util.
Las noticias falsas suelen difundirse a través de sitios web de noticias falsas que, en un intento de ganar credibilidad, suelen emular fuentes de noticias auténticas. Según las investigaciones, las redes sociales permiten que las afirmaciones falsas se difundan rápidamente, más rápidamente, de hecho, que las noticias reales. Las noticias falsas se difunden rápidamente porque suelen estar diseñadas para captar la atención y apelar a las emociones, por lo que a menudo presentan afirmaciones o historias extravagantes que provocan ira o miedo.
Los canales de las redes sociales suelen priorizar el contenido en función de las métricas de interacción (es decir, la frecuencia con la que se comparte y se le da me gusta) en lugar de su precisión o su nivel de investigación. Este enfoque puede permitir que el clickbait, la hipérbole y la desinformación se difundan ampliamente. Las empresas de redes sociales se consideran plataformas en lugar de editores, lo que significa que no tienen las mismas responsabilidades legales que los medios de comunicación tradicionales, aunque esto puede cambiar a medida que evolucione el panorama político y legal.
Los bots de las redes sociales pueden difundir noticias falsas, ya que producen y difunden artículos en masa, independientemente de la credibilidad de sus fuentes. Los bots pueden crear cuentas falsas en línea, que luego ganan seguidores, reconocimiento y autoridad, algunos de los cuales están programados para difundir información errónea.
Los trolls (usuarios de Internet que intentan deliberadamente iniciar discusiones o molestar a la gente) también participan en la difusión de noticias falsas. A veces se les puede pagar para que lo hagan por razones políticas. Los términos "granja de trolls" o "fábrica de trolls" a veces se utilizan en este contexto para referirse a grupos institucionalizados de trolls que intentan interferir en la toma de decisiones políticas.
Las noticias falsas a veces implican el uso de Deepfakes. Se trata de videos falsos creados mediante software digital, aprendizaje automático e intercambio de rostros. Las imágenes se combinan para crear nuevas imágenes que muestran eventos o acciones que en realidad nunca sucedieron. Los resultados pueden ser muy convincentes y difíciles de identificar como falsos.
Ejemplos de noticias falsas Las noticias falsas a menudo se difunden a través de sitios web de noticias falsas que, en un intento de ganar credibilidad, a menudo emulan fuentes de noticias auténticas. Según las investigaciones, las redes sociales permiten que las afirmaciones falsas se difundan rápidamente, de hecho, más rápidamente que las noticias reales. Las noticias falsas se propagan rápidamente porque suelen estar diseñadas para captar la atención y apelar a las emociones, por lo que suelen presentar afirmaciones o historias extravagantes que provocan ira o miedo.
Los canales de las redes sociales suelen priorizar el contenido en función de las métricas de interacción (es decir, la frecuencia con la que se comparte y se le da "me gusta") en lugar de su precisión o su nivel de investigación. Este enfoque puede permitir que el clickbait, la hipérbole y la desinformación se difundan ampliamente. Las empresas de redes sociales son vistas como plataformas en lugar de editores, lo que significa que no tienen las mismas responsabilidades legales que los medios de comunicación tradicionales, aunque esto puede cambiar a medida que evolucione el panorama político y legal.
Los bots de las redes sociales pueden difundir noticias falsas, ya que producen y difunden artículos en masa, independientemente de la credibilidad de sus fuentes. Los bots pueden crear cuentas falsas en línea, que luego ganan seguidores, reconocimiento y autoridad, algunas de las cuales están programadas para difundir información errónea.
Los trolls (usuarios de Internet que intentan deliberadamente iniciar discusiones o molestar a la gente) también participan en la difusión de noticias falsas. A veces se les puede pagar para que lo hagan por razones políticas. En este contexto, a veces se utilizan los términos “granja de trolls” o “fábrica de trolls” para referirse a grupos institucionalizados de trolls que intentan interferir en la toma de decisiones políticas.
Las noticias falsas a veces implican el uso de deepfakes. Se trata de vídeos falsos creados mediante software digital, aprendizaje automático e intercambio de rostros. Se combinan imágenes para crear nuevas secuencias que muestran eventos o acciones que en realidad nunca sucedieron. Los resultados pueden ser muy convincentes y difíciles de identificar como falsos.