Un contrato de "renting" es un contrato de alquiler con prestaciones accesorias. Por lo tanto, la impresora no es un activo de la empresa sino un elemento alquilado por la empresa.
En definitiva, deberá contabilizar en la cuenta (621) el importe satisfecho por el alquiler y en otras cuentas de gastos, como por ejemplo, la (622) y la (629) los importes que correspondan a los servicios accesorios incluidos en el "renting": mantenimiento, reparaciones, cartuchos de tinta o de toner, etc.
En cuanto a las licencias de uso de programas informáticos deberá contabilizarlas en la cuenta (206).