El servicio de bricolaje o "manitas" contemplado en muchas pólizas facilita al asegurado el envío de reparadores por parte de la compañía y, en algunas pólizas, incluso cubren las 2 o 3 primeras horas de mano de obra gratuita pagando el asegurado el coste del material.
Es importante saber que la garantía de daños estéticos, como te decía, es de aplicación ante siniestros cubiertos en la póliza, y lo que aquí presentas no es siniestro (no es un hecho fortuito e inesperado, es una condición paulatina por el paso del tiempo) ni está cubierto (expresamente excluido en la mayoría de las pólizas).
Por tanto, si ésto ocurriese es responsabilidad del reparador advertir de la posibilidad de rotura del material y entraría dentro del margen contractual que se adquiera con la empresa reparadora (no con la compañía) la responsabilidad del cambio de suelo ante rotura. Generalmente estos profesionales solicitan la firma de un escrito al asegurado para no hacerse responsables ante una posible rotura o de tapar tan solo la zona afectada con un material de elección del asegurado.
Para finalizar, y a modo de reflexión totalmente personal, debemos saber que una compañía de seguros o una mutua es, en base a sus orígenes, una comunidad de personas que realizan el pago de una prima fija para que, en el momento de ocurrencia de algunos de los sucesos fortuitos que se describen el el contrato sobre el riesgo asegurado, la comunidad responda realizando el pago del siniestro sin qué éste resulte demasiado costoso. Con todo ésto indicar que el mantenimiento de un bien es responsabilidad de su propietario y, como todo, hay que realizar las tareas necesarias para que el paso del tiempo no deteriore ni una vivienda, ni un vehículo ni nuestra propia salud. Si las compañías de seguros tuviesen que asumir los pagos de los mantenimientos de las viviendas de sus asegurados, serían empresas de mantenimiento con tarifa plana y nada más.