Plantaciones de frutales en zona montañosa

El olivo no te lo recomiendo porque es de hoja perenne y a temperaturas inferiores a -5ºC sufre daños por frío en las hojas, yemas, ramas y tronco. El árbol en su conjunto sufre daños por frío a temperaturas menores de -8ºC.

El peral y el manzano son especies que se adaptan bien al frío y que además requieren de altas necesidades de frio para producir correctamente por lo que en principio ambos podrían considerarse para su cultivo. Entre peral y manzano el manzano es más resistente al frío, ya que las ramas y tronco de peral sufren daños por frío a -20ºC/-29ºC mientras que las ramas y tronco de manzano sufren daños por frío a -34ºC. El árbol en su conjunto sufre daños por frío a -29ºC en el caso del peral, mientras que en el del manzano estos daños ocurren a -34ºC.

El peral es una especie con adaptación óptima a altitudes entre 600 y 1000m. Es poco sensible a los calores estivales elevados y exigente en agua, por lo que en secano sólo puede cultivarse con pluviometrías superiores a los 600mm anuales, de lo contrario deben suministrársele riegos tanto mayores en número cunato más tardía sea la variedad. No es demasiado exigente en el tipo de suelo y vegeta bien en suelos entre 50 y 80cm de profundidad, ya que sus raíces son superficiales.

Las exigencias del manzano, desde el punto de vista del medio, son las mismas que las del peral, salvo por su mayor resistencia, en general, a la caliza activa. Son especies exigentes en frío (1000 HF) y menos sensibles a las heladas primaverales que el peral, por ser de floración más tardía. Esta especie se adapta muy bien a altitudes de 600-1000m, que mejoran sensiblemente la coloración y calidad del fruto (firmeza) en comparación con zonas de llanura.

Para encontrar más sugerencias sobre otras posibles especies que pudieran cultivarse en la zona montañosa de San Alberto Uspallata además del peral o manzano, resulta muy interesante dar una vuelta por los alrededores de donde está situada la parcela y observar que especies hay cultivadas, seguramente descubriremos alguna más que se adapta perfectamente a las condiciones locales, tanto de clima como de suelo.

Otro factor importante a considerar a la hora de elegir la especie es informarse sobre el precio del fruto en el mercado y de la cantidad de kilos que se producen aproximadamente por árbol. De esta forma tendremos una estimación de los ingresos y descontando los gastos aproximados de cultivo podemos hacernos una idea de si el cultivo es rentable o no. Por ejemplo, los naranjos han sido muy rentables en la zona de Valencia (España) durante muchos años pero desde hace ya algunos años el bajo precio de los cítricos está haciendo que se abandone masivamente su cultivo y se sustituya por otros más rentables.

Si ya ha cultivado manzanos en la zona con éxito tanto técnico como económico le recomiendo (aunque la decisión es suya) aprovechar la experiencia adquirida en el pasado y los conocimientos en cuanto a técnicas de cultivo, productos fitosanitarios utilizados, etc. y ampliar la producción de manzanos, plantando esta misma especie en el nuevo terreno a cultivar.

Por último, en cuanto al tamaño o edad de la planta:

Las plantas de vivero que se cultivan en condiciones de campo y menos tecnificadas suelen tener 2-3 años, mientras que las plantas que se cultivan con un control atmosférico, con sustratos más adecuados y prácticas culturales más eficientes están listas para su trasplante en 18-24 meses. De pedir plantones al viverista, éste debe suministrarle material vegetal listo para ser trasplantado. Le recomiendo pedir los plantones en maceta y trasplantarlos en primavera, cuando las temperaturas ya no son tan acusadas y la planta dispone de más tiempo para adaptarse al clima local antes de que vuelva a llegar el invierno.

Espero haberle ayudado y le deseo mucha suerte en el nuevo cultivo.